I'm Deaf // Lee Minho

.27.

Dedicado a Lixprinces

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- Si mamá, ya hice las compras hoy, ya te lo dije.

- Está bien hija, ¿Te hace falta algo? ¿Dinero o algo?

- Estoy bien, si necesito algo les diré ¿Si?

- De acuerdo, y... Aquí entre nosotras, ¿Hay algún chico?

- ¿Ch-chico?

- Si, algún pretendiente.

- Bueno... - Alargue y pensé en Minho. - Hay un chico, se llama Minho.

- ¿Ah sí? ¿De dónde lo conoces? ¿Que edad tiene?

- Mamá calmate. - Reí. - Lo conosco de la cafetería, tiene mi edad y es muuuuuy apuesto.

- ¿Y qué más?

- Pues... No puede oír.

- ¿Es sordo?

- Si, pero te juro que es la mejor persona que he conocido.

- Puedo notarlo. - Sonrió pícara. - ¿Nació así?

- No, tuvo un accidente que afectó sus tímpanos, van a operarlo en un par de meses.

- ¡Oh! ¡Que bueno oír eso! - Dijo alegre.

- Si, quiero que llegue ese día.

- Me alegro mucho hija.- Dijo con un tono alegre. - Ya demo irme, tu padre tiene hambre. - Rió y lo enfocó.

- Está bien, yo voy a estudiar un poco más.

- Adiós hija, cuídate mucho.

- ¡Adiós mamá!

Luego de eso corte la videollamada y seguí repasando los movimientos con las manos.
Hasta que recordé lo que había pasado el día anterior con Jisung.
¿De verdad le gustaba?

Iba a seguir con mis movimientos cuando mi celular llamó mi atención.

Félix:

Estoy aburrido
Así que te envío esto para avisarte que pasaré por tu en rato para ir al cine
¿Que dices?

Le respondí a los segundos que estaba de acuerdo ya que también estaba sola y luego me dijo que pasaría por mí en veinte minutos.

- ¿Chan no volvió a buscarte?

- Por ahora no, es un alivio.

- Parecía ser buen chico ¿Que le habrá ocurrido? - Dijo Félix mientras tomaba un sorbo de su soda.

Quizás algo había ocurrido, pero aún así, es extraño que me haya dejado plantada dos veces consecutivas y luego aparezca con la misma chica.

¿Habrá sudo un juego?

De todas maneras, yo no soy ese tipo de chica que busca solo una aventura y ya. Si eso era lo que el quería, se había confundido de persona.

- No lo sé, pero no quiero saberlo, y pensar que era mi crush...

- Es cierto, pensaba que harían buena pareja. - Dijo decepcionado.- ¿Sabes quién hace buena pareja?

- ¿Quién?

- Minho y tú

- ¿Q-que estás diciendo?. - Dije mientras sentía como mis mejillas comenzaban a acalorarse.

- La verdad, la cruda y simple verdad, amiga mía. - Revolvió mi cabello. - Pero ya, enserio, se nota que te gusta, me alegro por ti y estoy orgulloso, no cualquiera se fijaría en alguien que no oye, que no habla o que no puede ver. Mi niña ya creció. - Limpio una lágrima falsa en su mejilla.

- Eres un idiota. - Reímos.

- Pero me amas.

- Lo se

- ¿Más que a Minho?

- ¿Lee Félix?

- Dime mi lady

- Corre

- ¿Correr?

- Tres.

- ¿Hatt?

- Dos.

- ¡Espera Hatt! ¡No me mates! - Dijo adelantándose unos pasos.

Luego de que Félix corriera solo hasta las escaleras del control comercial, nos reunimos en la entrada para irnos a nuestros hogares.

- Oye Hatt. - Me llamo el rubio. - ¿Aquel no es Yuta? - Señaló a un chico de cabello largo.

- Si, es el, vamos a saludarlo. - Tomé a Félix de la muñeca y lo arrastré hasta mi amigo.

Nos dirigimos el, y pude notar que había una chica a su lado.

- ¡Hey Yuta!

- ¡Hatt! - Dijo al verme. - ¿Que tal? - Nos saludo a ambos. - Oh, ella es mi hermana Sakura. - La chica se escondió un poco detrás del mayor. - No habla mucho coreano.

- Oh Hola Sakura, soy Hatsu. - Hable en japonés.

- ¿Eres japonesa? - Dijo algo tímida.

- Así es, vine para estudiar aquí.

- Yo vine a visitar a mi hermano. - Dijo con más confianza.

- ¿Cuánto tiempo te quedarás?

- Unos cinco meses, volveré para ir a la universidad.

- ¡Genial! Podemos salir uno de estás días si quieres. - Ví como sus ojos brillaban.

- ¿De verdad?

- ¡Claro!

- Pero yo también voy, no quiero quedarme solo. - Agregó Yuta.

- ¿Hola? Sigo aquí. - Dijo Félix a mi lado ya que no entendía de que estábamos hablando.

- Podemos salir todos juntos. - Le dije. - Se quedará unos meses.

- Ya veo. - Alargó el rubio. - Podemos encontrarnos en el café e ir al parque luego.

Parque.

Minho.

Beso.

Por unos segundos recordé esa tarde.

Y aunque sentía que mis mejillas comenzaban a tomar color, no quería dejar de recordar aquello. Y mientras Félix y Yuta hablaban entre ellos, y Sakura miraba una tienda de ropa, yo estaba con la imagen del castaño en mi cabeza.
Quería verlo, quería estar con el, quería ir a pasar junto a él, sentir su calor, su tranquilidad...

Me había dado cuenta de que lo extrañaba.

Si.

Lo extrañaba.

Pero me daba pena enviarle un mensaje para vernos. Porque aunque ya nos hemos visto muchas veces, es el chico que me gusta, y los nervios siempre llegan a uno cuando alguien especial para ti va a verte en unos minutos.

En fin, cuando uno se enamora de alguien no está en sus casillas.

¿Persona enamorada?

¿Estoy enamorada?