Capítulo 7: Conejos y castigos

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-¿Esta vez?

El susto se vió reflejado en el rostro de Wei Ying cuando escuchó esa voz a su espalda. Lan Wanji se hallaba parado detrás de él, con su porte regio y elegante, pero se podía ver en su rostro la confusión.

"¡¡¡Demonios!!!, ¿por qué estuve hablando en voz alta?"

Se reprendió interiormente por su estupidez, pensando en una solución creíble para decírsela a Lan Zhan quien lo miraba en busca de una respuesta.

-Oh Lan Zhan digo, Lan Wanji, ¿se encuentra aquí a estas horas? ¿Por qué?

Lan Wanji no notó la familiaridad con la que lo llamó o simplemente decidió pasarlo por alto.

-Mnn, estuve patrullando. Además no llegaste a la cena y ya es las nueve.

-¡Oh eso es malo, ahora seré castigado por romper las reglas! ¡Y todo porque me quedé dormido mientras jugaba con los conejos! - Wei Wuxian puso una cara de espanto y desesperación (demasiado sobreactuado) esperando a que Lan Zhan se la crea y sea más fácil escapar de la situación. Obviamente Lan Zhan no le creyó ni por un segundo y se le quedó viendo, esperando una respuesta verdadera. Había decidido que le gustaba que lo llame tan familiarmente, esa sensación de ser cercanos, acapararlo para él.

-Eh... ¡Mira! ¡Lan Zhan!¡Lan Zhan! – Dijo, mientras agarraba por las orejas a aquellos dos conejos que cargaba y se los presentaba a Lan Zhan - ¡Son un regalo para ti! Uno de ellos quedó dormido en mis brazos y creo que el otro se quedó por él. ¿Qué piensas? ¿Los quieres o no?

Lan Wanji se quedó sorprendido, más por el latido acelerado de su corazón que por el sorpresivo acto en sí.

- Los animales están prohibidos en el Receso de las Nubes. - sabía que Lan Zhan los rechazaría pero se veía en sus ojos cómo deseaba aceptar el obsequio, sólo hacía falta este empujón más para que los aceptara.

- Eso es una lástima, entonces tendré que buscar a otra persona...- solo un poco más.

- ¿A quién?

- Bueno, a quien sea bueno para asar conejos- respondió con una sonrisa en los labios, ya casi ...- ultimamente no he tenido una comida decente en mucho tiempo

- Matar está prohibido en el Receso de las Nubes.

- Entonces lo haré fuera de aquí. Después de todo no los quieres. ¿Por qué te importarían?- y...

- Me los quedaré.

- ¿Eh? ¿Ahora los quieres? Mírate, debes hablar con tu corazón con más frecuencia.

- Los aceptaré. -repitió.

Y como si fuera obra del destino los conejos saltaron de las manos de Wei Ying al suelo, y empezaron a jugar uno sobre otro.

-Oh mira Lan Zhan... Están uno encima del otro...Son ellos...

-...jump....Obsceno.

- Pero yo no acabé mi oración. Un momento... ¿Lan Zhan en qué estabas pensando?

(...)


Después de volver y tener que explicarle a Lan Qiren la situación y dar una pequeña batalla para aceptar a esas dos bolas de pelo esponjoso, Wei Wuxian solo salió con una advertencia y un castigo en el pabellón de la biblioteca que implicaba hacer unas cuantas copias, solo unas muchas...

Wei Wuxian deseando matar a Lan Qiren por el castigo impuesto por un pequeño error de sueño, Lan Qiren con un sentimiento realizado como si castigar a Wei Wuxian hubiera sido su deber desde siempre y un Lan Zhan serio por fuera pero por dentro feliz por poder pasar más tiempo con el joven, dio gracias que su tío lo asignara a vigilar a Wei Wuxian, no confiando en dejar a esa "amenaza andante" solo, palabras de su tío para sorpresa de Lan Zhan, quien nunca escuchó a su tío referirse así a nadie.

Mi sacrificio, tu oportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora