Se recomienda leer este capítulo escuchando "If You" cover de Jeon Jungkook.
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Por primera vez haría la estupidez de mi vida, esa que siempre mantuve como imposible para mi: ahogarme en alcohol. Al menos eso era algo que Min no podía hacer por su poca tolerancia. No podía creer que un martes no había ningún bar abierto, está bien que era navidad, pero hay gente sola que vive llorando y tomando, la navidad debía pensar en ellos también, en mi. Estacioné a una cuadra de distancia y luego bajé, no sin antes mirarme en el espejo, mis ojos estaban rojos e hinchados.
-Una botella de soju por favor. -le dije al bar ténder y este me quedó mirando.
-Hijo, creo que a vos te vendría bien algo más fuerte. Vodka o quizás whisky.
¿Tan mal estaba?.
-Lo que sea. -contesté rendido.
Tomé vaso tras vaso de algo que pude identificar como un bourbon, no sabía demasiado sobre bebidas, pero la navidad pasada el señor Park me había servido de aquel líquido de gusto dulzón. Una vez que estaba un poco bastante mareado apoyé mi cabeza sobre mis brazos y cerré los ojos listo para dormir sobre la barra. ¿Cómo era posible que cinto años se fueran en una sola noche?. Se habían reído en mi cara. Jimin mentía en cada "Te amo" que salía de sus labios y Yoongi... Yoongi nunca fue muy cariñoso conmigo, pero realmente lo admiraba, había sido un completo idiota y él no había tomado en cuenta mis palabras.
-Nuestro invitado de la noche se presenta ante ustedes, recíbanlo con un fuerte aplauso.
Un show de cuarta en un bar de cuarta, genial.
-Hola... hola ¿se escucha? Buenas noches, mí nombre es Jungkook y hoy vine a interpretar un tema conocido, se llama If You, espero que les guste
Su voz melancólica llegó a mis oídos, era más grave de lo que recordaba, sus notas altas siempre habían sido tan limpias, recuerdo como se destacaba por el control de su voz y nunca faltaban sus excelentes melismas. Solía destacarse entre el resto, por algo era el vocalista principal. Me quedé disfrutando del sonido de su voz, admirándolo como lo había hecho toda mi vida desde que lo conocí. No me animé a levantar mi rostro, después de tantos años ya debía haberse olvidado del que algún día fue su compañero y amigo.
Seguí con la cabeza escondida en mis brazos, escuchando su melódica voz, siempre fue un excelente tenor y transmitía el dolor de cada palabra a través de sus labios. Me daba vergüenza ir a saludarlo o siquiera que me viera. El día que Jimin y yo dejamos Bangtan, Jungkook se había enojado conmigo, tanto como para no dejar que me despida, no era un "hasta siempre", era un "hasta luego" sin embargo lo triste es que ese "hasta luego" hubiera sido una mentira. Una mentira de cuatro años. No he vuelto a verlo ni saber de él, creí que sería un cantante famoso y reconocido, al menos eso estoy seguro de que lo merecía.
