Capitulo 24

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     Camine lo que a mi parecer fueron horas hasta dar con una carretera con la esperanza de que algún automóvil se detuviera, pero para mi gran suerte  cada vez parecía más desolada. 

    Estaba agotada, mis fuerzas me abandonaban a cada paso que daba y el sol no parecía darse tregua, seguí caminando sin rumbo alguno no tenía idea de dónde estaba y rogaba que alguien con un alma bondadosa pudiera ayudarme y que fuera pronto por que lo más probable es que Jaziel ya estuviera por despertar si no es que ya lo hizo, por que de ser así lo más seguro es que este buscándome furioso para llevarme de nuevo con él y castigarme como la primera vez. Recuerdo que me asusté tanto que no podía parar de temblar me golpeó hasta el punto de dejarme inconsciente y al despertar tenía la ropa arrancada y estaba cubierta por una sábana manchada de sangre no quise ni imaginar que hizo conmigo mientras estaba dormida tal vez lo mismo que hacía cada noche cuando me negaba a hacer algo, decía que era mi castigo y que él era mi dueño y que podía hacer conmigo lo que quisiera, odiaba la sensación de sus manos sobre mi cuerpo. Y lo odiaba a él. Era un maldito.

     El inconfundible sonido del motor de un carro me hizo parar en seco, a lo lejos un pequeño carro conducido por una mujer mayor me llenó de esperanzas, alce mis brazos al aire y los agite como loca en señal de que se detuviera. 

     El auto lo hizo a un par de pasos de mí, me acerqué corriendo a la ventana del copiloto. 

    —Muchas gracias por detenerse— la señora me miró de arriba a bajo.

     —¿En que puedo ayudarte niña?— preguntó dulce.

     —Por favor necesito que me ayude— y rompí en llanto, todo lo que había estado aguantando durante  este tiempo salió a flote en ese momento, estaba rota. 

     —Ho mi niña no llores, ven entra te llevaré conmigo y en el camino me contarás que paso contigo, ¿Bueno?— la señora se estiró y abrió la puerta del copiloto para que yo entrara. — Soy Ellie y tu como te llamas. 

     Limpie mis lágrimas he intente aclarar mi voz —Soy Lisa, Lisa Thompson. Mucho gusto señora Ellie y de nuevo muchas gracias.

     —No hay de que Lisa— dejo mirandome mientras volvía a arrancar el auto — Iremos a mi casa, esta ubicada en un pueblo a más o menos una hora de aquí ahí podrás llamar a alguien por si lo necesitas y comer algo. — saco de la guantera un pañuelo y me lo entregó — Ten. Bueno ahora si podrías explicarme qué hacías tú en una carretera tan poco transitada sola y vestida de esa manera.  

     Observe mis uñas sucias y mi blusa rota y viendo hacia el suelo solté un suspiro he intentando controlarme para no soltarme a llorar de nuevo y empecé a relatar  todo lo sucedido, primero le expliqué quién era y con quien estaba casada, Ellie estaba muy sorprendida decía que estaba muy joven para estar casada y luego refunfuñó algo sobre los jóvenes y sus locuras adolescentes que no entendí muy bien y termine contándole cómo había llegado hasta aquí y como escape, su cara fue de asombro cuando se lo dije y me felicitó por ser una chica tan valiente. 

     Lo que restó del camino hasta su casa ella me contó sobre su esposo que lamentablemente había muerto hace unos años pero que a pesar de eso seguía guardando un gran amor hacia él  y que esperaba encontrarse con él algún día y sobre sus dos hijas que ahora ya eran todas unas profesionales. 

     —Bienvenida— dijo deteniéndose en una pequeña casa , me pareció curioso que todas las demás casas de la calle estuvieran pintadas de colores opacos y sin vida y la de ella de un llamativo amarillo. —Aquí todos son unos amargetes y sus casa lo reflejan. — su comentario me hizo reír. 

    Algo apenada entre a su casa y me quedé de pie justo al lado de la puerta. — No te quedes ahí niña ven, mira aquí hay un baño — señaló — puedes tomar una ducha si quieres, hay toallas limpias en el armario y mientras yo buscaré algo de ropa limpia para ti estoy segura que encontraré algo de tu talla. — se acercó a mi y me tomó de las manos y embozo una comprensiva sonrisa — Ten por seguro que nunca más volverás a ese lugar aquí estás a salvo, ¿bueno?. — asenti. 

    —Muchas gracias. — me soltó y se escabulló a una de las tantas habitaciones de la casa,  mientras yo me metía al cuarto de baño. Había un pequeño espejo sobre el lavado pero me negaba a ver mi aspecto de esa forma así simplemente me limité a desvestirme y adentrarme a la ducha. Frege mi cuerpo hasta sacar toda la suciedad de él y me vestí con lo que la señora Ellie había dejado para mi sobre el retrete un conjunto de ropa interior, unos  jean y una camiseta a cuadros que me quedaba un poco grande pero que le agradecí con toda el alma. 

    —Ven siéntate a comer— me dijo en cuanto salí del baño — mientras llamaré a la policía para que vengan y así puedas explicarles todo lo sucedido. 

    Y así lo hizo una hora después de que los oficiales llegaron y de haberles explicado todo estaba en la patrulla rumbo a la estación, ahí llamarían a Patrick y le notificarian de mi encuentro, claro que antes de irme le agradecí inmensamente a la señora Ellie por haberme ayudado y le prometí volver a visitarla y esta vez traería a Patrick conmigo para que conociera a la que fue mi salvadora. 

N/A
Hola gente soy yo de nuevo.
Aquí les traigo el último capítulo del año y que espero que les guste.
Muchas gracias por leer y comentar enserio me pone muy feliz 😊

No se olviden de pasarse también por mis otras historias.
Gracias.

Y les deseo un feliz año nuevo a todos 😍🥳

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