Todo Cambio Despues De La Muerte De mi Jefe

Capítulo 26

Dios porque siempre me pones en apuros de este grado.

No puedo decirle la verdad a Pablo porque siento que se va a enojar y si no le digo también, porque siempre me tienes que hacer sufrir a mi de esta manera.

- Yo... -me razco la cabeza pensando en algo que pueda decir. Pero carajos nada se me ocurre en estos momentos.

- Laura, estoy perdiendo la paciencia dime, ¿Donde estabas? - Me grita, serio y por lo que veo esta muy enojado.

- Estaba con Santiago. - Le dijo con voz baja solo para que yo me escuchara pero por la reaccion que hizo el si me escucho.

Puedo ver que sus ojos cambia a un tono de verde más potente, me carga como si fuera un costal y me lleva dentro de la casa.

- Hay eres un animal Pablo, bajame ya.
- Le ordeno pero mis palabras le entran por un oído y le salen por el otro.

Entramos al cuarto y me avienta a la cama.

- Laura es la última vez que te pregunto dónde estabas y con quién.

Hay carajo estoy muy nerviosa y en estos momentos no tengo ni la menor idea de cómo reaccionar.

- Fui a una cafetería que está en el centro con... - me razco en sinónimo de que estoy nerviosa. - Ya te dije con quien.

- Espero, ese hombre no te haya dejado muy cansada. - Dice con un tono muy enojado.

Se separa de mi para después quitarse su camisa, haciendo que todos los botones se desprendan de su camisa.

Yo al ver que se quita su camisa me pongo más nerviosa de lo que estaba y retorcedo.

- ¿Que estás haciendo? - Le pregunto con miedo, no quiero hacerlo. - No te me acerques. - Le grito con miedo.

En serio no quiero.

- ¿Porque no? -Pregunta con cinismo.

Jala de mi brazo y me pega a su anatomía, haciendo que mi cuerpo y el suyo estén muy pegados.

Estamos tan juntos que su nariz choca con la mía, en sus ojos puedo ver un deseo que lo carcome por dentro, mientra yo aquí toda miedosa.

- Yo soy tu prometido y tu eres muy guapa. - Dice con sensualidad.

- Sueltame. - Le grito con miedo.

Me quita mi blusa y yo quedo con brasier.

Me levanta del suelo y dice - Además eres mía, solo mía.

Termina de decir para último aventarme a la cama.

Se sube arriba de mi y junta sus labios a los míos, yo intento forcejear con el pero lo único que consigo es que se acomode.

Mando a la chingada todo, voy a disfrutar lo que la vida me está dando.

Toma mi cabeza por detrás y hace un beso mucho más profundo que solo demuestra cuanto nos deseamos.

Mando a la chingada todo saco mis brazos de sus pectorales y lo llevo a su cabello para jugar con el.

El beso se comienza a hacer lento, comienzo a disfrutar movimiento por movimiento. Pablo besa de maravilla.

En mi mento quiero gritarme que lo que hice con el fue sexo que no hice el amor pero es que esa noche lo disfrute tanto, cada roce cada caricia cada beso en pocas palabras disfruté todo. Pero mi cabeza no lo quiere admitir.