¿Alguna vez has querido hacer algo con las mejores intenciones pero todo sale mal?
Espero que la respuesta no sea nada similar a mi experiencia, Kenneth. Se desató un completo caos, en las noticias ha aparecido que el causante de un disturbio fue un hombre rebelde bajo el efecto de estupefacientes, sin embargo te confieso que al parecer la causante de todo fui yo.
Aunque no sé por qué te estoy contando esto con una sonrisa en la cara, te juro que lo que sucedió fue tan estúpido que parece una historia muy exagerada:
Estábamos en aquél bar al que le gusta ir a Sam, realmente se sentía el ambiente más pesado que de costumbre, incluso la música era de protesta, realmente el ritmo era más violento. Se sentía bien por alguna razón. Nuestros amigos también vinieron, era la primera vez de Akane y de Garfield en ese lugar.
-Tenía demasiado tiempo sin venir a este sitio.- Dijo Todd mientras bebía de su lata de Pepsi.
-¿Aquí fue donde te hiciste amigo de Sam?- Preguntó Akane.- No sabía que les gustaba este estilo...- Estaba sorprendida.
-A Samantha la conozco desde el preescolar, pero comenzamos a tocar aquí cuando nos sentíamos molestos. Que era casi siempre.- Rió.- Pero todo cambió cuando Claire comenzó a...- Guardó silencio.- Ella no importa, lo importante aquí fue que dejamos de tocar en estos lugares porque Gary me convenció de formar un grupo de jazz, cambiamos mucho de aires Sam y yo. Pero de vez en cuando es bueno venir aquí.-
-Debo admitir que tiene su gracia, pero es demasiado diferente a los lugares donde ahora tocamos.- Dijo Garfield.- Es la primera vez que vengo a este sitio.-
-¿Por qué no seguiste contando sobre por qué dejaron de tocar aquí?- Pregunté y todos se veían completamente serios.
-Linda.- Dijo Gary.- No es algo que nosotros podamos contarte...- Se interrumpió al ver a Sam llegar, fue al baño.
-¿Qué pasa aquí?- Preguntó con una gran sonrisa.- Vaya música, realmente están enfadados.- Comentó.
-¿Sabes por qué lo están?- Pregunté de nuevo, no quería volver a preguntar por Claire y arruinar el momento.
-Deberías preguntarle tú misma al vocalista, si te ignora sólo dile que me conoces y de inmediato se volverá muy amistoso. Tiene una cara de miedo pero en verdad es todo amor ese hombre.
No me había fijado bien en la apariencia del vocalista: Era muy corpulento, de gran barba y cabello largo. Su actitud me parecía más de una banda de metal a la de un grupo punk.
Cuando el grupo terminó de tocar le pregunté al vocalista qué sucedía para que el lugar se sintiera de esta manera. Como Sam me dijo, me ignoró hasta que le dije que la conocía.
-¡Oh! Eres la chica con la que está saliendo Sam, ¿verdad?- Me abrazó de inmediato, su semblante serio cambió por completo a uno alegre.-¿En serio no lo sabes? Bueno, en realidad no importa. Al menos te estás interesando en saber: Unos imbéciles acaban de golpear al dueño de este lugar, es un gran sujeto si me preguntas.
-¿Por qué lo golpearon?- Había visto al hombre algunas cuantas veces, no era nada como las personas que venían aquí, era delgado y siempre vestía de manera formal, un poco nerd si me preguntas. Me sorprendía escuchar que lo golpearon.
-Como verás, linda, en este lugar se aceptan personas.- Al ver que no entendía, se inclinó sobre una pierna y me explicó.- Aquí aceptan a todos siempre y cuando no te burles y respetes. Y a algunos imbéciles les ha dado por pensar que a las mujeres que aman a otras y los hombres que aman a otros son una clase de enfermos, lo golpearon por aceptar a esas personas, ¿puedes creerlo?- La noticia también me enfureció después de saber.- ¿Dónde está Samantha? Quiero ver a mi dulce niña.- Le contesté y llamó a su grupo y todos fueron a verla.
Me acerqué nuevamente a mis amigos, Akane y Garfield se veían intimidados. Samantha y Todd estaban muy felices de verlos, Todd no dejaba de sujetar la mano de Akane, me parecía muy lindo.
-¡Jeff! Tanto tiempo sin verte.- Exclamó Samantha yendo directamente a abrazarlo.- ¿Cómo has estado?-
-Me ha ido bien, últimamente muchas personas vienen a querer aprender a cantar. Pero ninguna ha tenido tu talento.- El hombre sonreía demasiado.- ¡Todd! Tampoco me he olvidado de ti muchacho... ¡Es una chica muy hermosa la que te acompaña! Mucho gusto en conocerla.- Extendió su enorme brazo para saludar a Akane.
La plática se volvió muy amena. Garfield y Akane por fin se sintieron en confianza y también reían. Sobre todo, estábamos conociendo una parte de Todd y Sam que nunca habíamos visto. Jeffrey era el maestro de música de Todd y le enseñó a Sam a cantar, principalmente porque es un amigo cercano de la madre de Sam. Poco a poco fuimos tocando el tema del dueño del club.
-¿Saben mis niños? A pesar de la alegría de verlos aquí no puedo evitar sentir ira por lo que le sucedió al pobre de Jerry. Lo peor es que es un maldito grupo de escoria, tienen reuniones incluso los muy hijos de puta.- Suspiró profundamente.- Cómo me vendría bien una buena botella de ron, pero olvidé mi cartera en casa.- Rió.
Al ver tan felices a mis amigos, decidí ir con el chico que atiende la barra y le pagué por una botella. El dinero que suelen darme papá y mamá es exagerado.
-Normalmente no vendemos las botellas, pero contigo haré una excepción. Este no es tan barato, pero cuidado, tiene mucho alcohol.- Dijo mientras me entregaba la botella.
En unos minutos regresé con el grupo de Sam y le extendí la botella a Jeff, me miraba sorprendido.
-Los vi muy felices y como eres un amigo muy bueno de Sam quise hacerte este pequeño regalo.- Dije al entregársela.
-Linda, debes tener cuidado al tener el dinero para comprar una botella.- Dijo con seriedad, luego sonrió.- Pero te agradezco, créeme que en cuanto pueda devolverte el favor, lo haré.-
No me esperaba lo que haría. Metió un trapo en la botella y tomó su encendedor. Se levantó sobre la mesa y gritó con una voz gutural, opacó al vocalista en turno, la banda en el escenario se quedó muda.
-¡Hermanas y hermanos! ¿Quién quiere devolverles el favor por lo que le hicieron a Jerry? ¡Esos bastardos se reunen cerca de nosotros!- Muchas personas voltearon a verlo y enseguida comenzaron a gritar. Jeff había creado una multitud enfurecida en cuestión de segundos, incluso el grupo en el escenario bajó.
Entre los gritos, Jeffrey nos miró y le dijo a Sam
-Ustedes vayan a casa, no quiero ponerlos en peligro, vi lo que le hicieron al pobre Gary, tranquilo hijo, le devolveré el favor a ese idiota si lo llego a encontrar.- Brincó de la mesa y salieron todos, completamente enfurecidos.
Sólo quedábamos en el lugar el chico de la barra y nosotros.
Una vez fuera, se sentía el frío de la noche y a lo lejos muchos gritos.
-Vamos a mi casa.- Dijo Todd.- Es la que queda más cerca de este lugar.-
-Demonios Katherine.- Me dijo Sam, su mirada era de sorpresa total. Se quitó de nuevo su chamarra y me la puso, había olvidado de nuevo llevar abrigo conmigo. Me besó y me miró fijamente.- Tu regalo le traerá días de hospital a algunos imbéciles intolerantes... Genial.-
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Querido Kenneth
Teen FictionKenneth ha vuelto a casa en una noche completamente lluviosa, se encontrará con la noticia de que su hermana Katerine no está en casa. Le ha dejado su diario para que él sepa sus vivencias y sólo él pueda tener una idea de lo que le sucedió a Kat.