Querido Kenneth

XXVI: Noche de chicas

Caminando a casa de Todd surgió la plática sobre el lugar en el que hace unos minutos estábamos.

-Estuvimos horas escuchando punk, rock y metal y nunca estuvimos enterados de cómo se llamaba el lugar.- Dijo  Garfield.

-Se llama La Madriguera desde que la conocimos. Gracias  a Jeffrey, nuestro maestro.- Mencionó Sam rápidamente.-  Si te preguntas desde qué edad la conocimos, fue desde los catorce, siempre estábamos tras el escenario. Podemos decir que es el lugar "más seguro". Con el tiempo  decidimos formar una banda con una chica que acabábamos de conocer, Claire.- Sam miró a los ojos a Todd para que continuara con la historia, Akane lo miraba con muchísima atención y una gran sonrisa.

-Y entonces así surgió Femme Rebelle, Claire no estaba de acuerdo con que estuviera un hombre, sin embargo yo le dije "Hey, conozco a Sam desde más tiempo que tú, yo sólo me dedicaré a tocar la guitarra y las canciones las hacen ustedes"... Finalmente comenzamos a tocar en el escenario que tanto tiempo vimos desde atrás.- Parecía que Todd y Sam cambiaban el turno para contar la historia.

-Y era genial, ¿sabes? En La Madriguera podías ir vestida como se te diera la maldita gana porque Jerry había conseguido muy buena seguridad. Créeme que aquél que se quiera pasar de listillo con cualquiera recibirá una buena golpiza y una segunda oportunidad para entrar. Si vuelven a caer en las mismas acciones, los guardias se aseguran de que caigas en el hospital y de que no vuelvas a entrar... Volviendo al tema, Femme Rebelle surgió porque me parecía muy injusto que el ámbito de la música se viera muy opacado por hombres, en otros lugares similares a La Madriguera se limitaban a decir "Si sabes que este es un lugar con más hombres sabes a lo que te arriesgas". Nuestra primera canción básicamente fui yo gritando insultos a cada imbécil que intentó tocarme en esos lugares. Les encantó.-

-Se volvió un hábito ir cada noche a La Madriguera a tocar, por eso nos conocen tanto.- Comentó Todd con una gran sonrisa de satisfacción.

-Sí...- La mirada de Sam se convertía casi siempre en una mirada vidriosa, a punto de romper en llanto pero siempre conseguía calmarse. Apreté su mano y me acerqué a ella, besó mi frente.- Para nuestra suerte las cosas cambiaron para mejor.-

-Después de que dejáramos la banda comenzamos a juntarnos más con nuestros otros compañeros de clase: Akane y Garfield. Comenzamos las campañas de Dungeons and Dragons y pasamos muy buenos momentos en el sótano de la casa de Gary.- Comentó Todd

-Hasta que llegó la perra de Maxine a jugar y no dejaba de mirar a nuestro elfo paladín y decidí dejar de dirigir partidas.-  La voz de Sam era de molestia

-Recuerdo eso, sí que se volvió muy incómodo.- Mencionó Akane.

-Demasiado, temía que el roleplay se subiera de tono cuando ella estaba cerca.- Mencionó Garfield.

Con la plática nunca nos dimos cuenta que ya habíamos llegado a la casa de Todd, se veía muy bien cuidada.

Sus padres nos abrieron la puerta, estaban completamente sorprendidos de vernos a todos.

-Papá, mamá, ¿se pueden quedar con nosotros? Hay un disturbio y no quiero ponerlos en riesgo.- Todd les hablaba con mucha facilidad a sus padres, ellos nos dejaron pasar. Abrazaron mucho a todos los demás.

-¿Quién es ella?- Preguntaron sus padres al verme.-

-Es una nueva amiga nuestra, nunca la había llevado a casa con ustedes, se llama Katherine.- Sentí que era mi momento de introducirme así que saludé, muy apenada.

-Pueden llamar a sus padres para decirles que están aquí.- Dijo la madre de Todd, mientras su esposo se dirigía a la cocina.

No tenía idea de que el padre de Todd fuera un gran cocinero, ¡la cena estaba deliciosa! Y nos trataron muy bien a todos, en especial a Sam. Es genial ver cómo ella puede llamar la atención fácilmente y hacer que todos la busquen y quieran.

-La única regla, Sam se queda a dormir con Todd en su habitación. O chicos con chicos y chicas con chicas.- Dijo el padre Todd al final.

-¿Por qué con Sam específicamente?- Pregunté.

-Porque Sam destruiría a nuestro hijo si él intentara hacerle algo.- Dijo riendo la madre de Todd.- Puede que nuestro hijo se vea muy atlético, pero Sam le patearía el trasero con esas enormes botas.-

-Con o sin ellas, señora.- Rió Sam, Todd torcía los ojos.- Pero creo que pasaré de golpear toda la noche a su hijo y me quedaré con las chicas.-

-Pues ya está decidido.- Finalizó la madre de Todd.- Que tengan una buena noche.- En realidad me parecía imposible que tuvieran tan buen ánimo.

-¿Tus padres siempre han sido así?- Pregunté mientras nos separábamos en el pasillo. Todd iba a hablar pero Sam lo interrumpió.

-Claro que siempre han sido así, son una dulzura.- Viendo como actuaban los dos, parecía que eran hermanos.

-Nada comparado con la hermosa madre de Sam. Es gentil, muy cariñosa y hace unas excelentes galletas.- Le mostró la lengua, abrió la puerta de su cuarto, Garfield entró y cerró la puerta no sin antes haberle dado un beso a Akane.

Sam nos guió a la habitación donde íbamos a dormir. Era un cuarto muy amplio con una cama muy grande, algunos cuadros elegantes y una televisión con DVD. Era un cuarto bastante cómodo.

-Están completamente enamorados.- Mencionó Sam.- Pero no se aman tanto como yo amo a Katherine.- Me abrazó fuertemente.

-Creo que cada quién ama a su manera. Yo siento que él es todo para mí, y es algo lindo porque sé que yo significo lo mismo para él.- Sonrió ampliamente Akane. Tú tienes la suerte de haber encontrado a alguien como Katherine. Haberte salido de esa banda y alejarte un poco de esos lugares te benefició muchísimo.-

Kenneth, te juro que sentí que por fin había llegado mi oportunidad para preguntarle a Sam por su pasado en Femme Rebelle.

-¿Qué sucedió antes de mí? ¿Por qué suelen callarse..?- Me interrumpí al ver que Akane y Samantha se miraban seria y fijamente la una a la otra.

Sam suspiró fuertemente y se sentó en la cama, nos invitó a hacer lo mismo.

-¿Estás segura?- Preguntó Akane.

-Siento que tiene que saberlo, actuamos de manera muy grosera interrumpiendo las cosas cuando llegamos a ese tema...-

Mi corazón latía muy rápido.