Hay un tiempo en el que a los niños se les da por querer una mascota. Hasta ahora Mark, pese a la insistencia de Yuna, no había pensado demasiado sobre eso. Cuando estuvo casado, su esposa era alérgica a cualquier animal con pelos por lo que tener una no sé le había pasado por la cabeza. Ahora le daba un poco de pena que Yuna no pudiera tener una, por lo que decidió llevarla a una tienda de mascotas una tarde que salió temprano de trabajar. Frente a una vidriera Yuna veía con desinterés los perritos, incluso los gatos y los peces.
-¿Qué hacen aquí ustedes?-preguntó Jinyoung confuso al encontrarse al par de personas que compartían la casa con él.
-Oh, Jiniong... Jinung... Jinnie.-Yuna trató de decir su nombre pero era tan difícil, solo "Jinnie" estaba bien.
-Jinyoung.-la corrigió su padre y ella sólo se encogió de hombros.-Estamos buscando una mascota para Yuna.- contestó a Jinyoung.
-Eso es genial...-Mark sonrió, antes por supuesto que había consultado con él para saber si podían traer consigo una mascota.-¿Y qué van a elegir? ¿Un perro, un gato?-preguntó mirando hacia la vidriera también.
-¿No es eso demasiado común? Todo el mundo tiene eso. Quiero presumir algo distinto.-Mark suspiró y Jinyoung se la quedó viendo, hacía unos cuatro meses que vivía con este padre y su hija y desde el día 1, Yuna le había parecido una mocosa muy peculiar.
-Pues entremos, seguro nos muestran algo distinto.- Jinyoung le dijo y fue el primero en entrar seguido por el par.
Una primera opción fue una serpiente. Jinyoung le dijo a Yuna que eso definitivamente no, que esas mierdas eran como las suegras, trepadoras y traicioneras.
La segunda opción fue un hurón pero Mark dudo puesto que necesitaban más cuidado que un perro y no sabía que tanto ellos estarían en la casa para satisfacer sus necesidades.
-¿Qué tal está cosa peluda de ocho patas? Es como un perro deforme que siempre tendrá el mismo tamaño.-y a Yuna le fascinó la tarántula incluso si la bicha acaparaba demasiado lugar en su pequeña mano. Mark la miraba horrorizado y Jinyoung estaba demasiado divertido con la situación.
-La quiero, papi.-el trabajador del local miró a la niña como si no entendiera el por qué no tenía miedo de esa cosa, sin embargo, dinero es dinero así que luego de explicar los cuidados y otras cosas, la tarántula le fue entregada a la niña.
Después de eso, los tres caminaban rumbo a la casa con Yuna llevando la caja donde la tarántula viviría ahora, ella sonreía muy feliz y aunque Mark no estaba muy de acuerdo con su elección, esa sonrisa le decía que había valido la pena.
-Nunca pensé que de verdad elegirías eso.-rió Jinyoung con burla.
-Es porque me recuerda un poco a ti, Jinnie.- Mark comenzó a reír por el comentario de su hijo.
-¿Lo estás diciendo por mi trasero, mocosa? ¿Esa cosa tenebrosa te hace acordar a mi? ¿Y qué diablos con eso de "Jinnie"?
-¡Eso es, Tenebrosa será su nombre!- Jinyoung rodó los ojos. Esa niña era un caso.
Ahora Jinyoung estaba con Yuna sobre su regazo viendo un documental sobre arácnidos en su celular.
-¡Hay tanto tipo de tarántulas! ¡Quiero todas!-Jinyoung imaginó por un par de segundos aquello. Imaginarse una vieja viviendo rodeada de gatos no era extraño pero una niña con una casa plagada de arañas.
-Suena como una película de terror.-el mayor dijo.
-Las películas de terror son divertidas.-dijo ella.
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Two men and half woman [Markjin]
FanfictionNo es la típica historia donde un padre amoroso, divorciado y al borde de la bancarrota se topa con un chico joven dedicado, cuidadoso y delicado con infantes. No, Mark, de 32 años, debido a ciertas circunstancias termina en un departamento viviendo...