24. Luz.

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Mark sonreía antes las ocurrencias de Jinyoung en ese momento. Pues el menor ahora le había indicado que se parara junto a la cama y lo miraba sentado. No sabía qué rayos pretendía por lo que también estaba algo nervioso. Jinyoung susurró un "bien" que él apenas logró escuchar y luego se levantó.

El menor se puso frente a él y, lentamente, comenzó a deshacerse de las ropas de Mark. Él contrario simplemente se dejó hacer, no sé sentía avergonzado para nada de su cuerpo y Jinyoung ya lo había visto entero por lo que si él objetivo de éste era avergonzarlo, pues no sucedería. Una vez que el mayor quedó solo en ropa interior frente a él, Jinyoung sonrió.

-¿Se puede saber que planeas?-inquirió Mark.

-Un pequeño juego.-contestó simplemente.

-¿Y se supone que ahora te tengo que hacer algún tipo de baile sexy o algo por el estilo?-se rió Mark. Jinyoung negó regresando a la cama pero, esta vez, parándose sobre el colchón. Mark enarcó una ceja. Puede que lo que sucedería a continuación lo hiciera arrepentirse de lo que le dijo a Jinyoung momentos atrás.

Jinyoung se desnudó frente a él, quedándose en bóxer también. Mark no sabe si lo hizo a propósito pero luego el menor comenzó a acariciarse a sí mismo frente a sus ojos. Mark sólo podía seguir el movimiento de las manos de éste. Jinyoung acarició su propio cuello y luego en medio de su cuello para llevarlos sobre sus bíceps. Mark lo observaba con atención. Pronto esas manos pasaron por sus pezones, endureciéndolos por su mismo. Su rostro se volvió completamente seductor y erotico. Mark pasó saliva, tratando de contener las inmensas ganas de abalanzarse sobre él.

Jinyoung sonrió. Parecía confiado pero estaba rojo como un tomate. Siguió con su juego y sus manos fueron a delinear entre su marcado abdomen. Acto seguido se dio una media vuelta y se bajó la ropa interior dejando ante la hambrienta mirada de Mark su trasero bien formado. Mark jadeó.

-¿Qué..?

-Shh, tú solo puedes mirar. Y si veo que te pones duro, no voy a dejar que me hagas nada.

-¿¡Qué!?-era imposible que eso no pasara si tenía a Jinyoung enseñándole su trasero, tocándose a sí mismo y haciendo esas caras totalmente eróticas.

-Hay un tiempo límite.-dijo el menor antes de caer sentado en la cama con las piernas abiertas frente a Mark.-Tú, por el momento sólo puedes hacer tres cosas: mirar, respirar y parpadear.-dijo. Mark suspiró y asintió.

Jinyoung acunó sus testículos con una de sus manos y luego se comenzó a exparcir con la otra el líquido preseminal de su ya erecto miembro por toda su extensión. Y así comenzó la tortura para Mark viendo a Jinyoung masturbarse frente a él y sin poder tocarlo ni tocarse a sí mismo. Trataba de desenfocar su vista pero era imposible porque de forma casi masoquista no quería apartar la vista de las acciones del menor. Jinyoung estaba siendo todo un bastado caliente y él estaba luchando para que la sangre no bombear a directo a su entrepierna. Intentaría mantener lo excitado que estaba pero comenzaba a sudar. Necesitaba hacer algo. Jinyoung continuaba dándose placer a sí mismo frente a sus ojos. No sabía ya que observar, literalmente, se lo estaba devorando con los ojos.

-¿Y-y de cuánto...es ese límite?-articuló Mark. Jinyoung lo miró mordiéndose la lengua de lado con una media sonrisa.

-Hasta que yo me venga.-y dicho esto siguió masturbándose, su mano subiendo y bajando por su pene mientras soltaba jadeó y gemidos que sólo prendían más a Mark pero éste se dijo a sí mismo que lo soportaría.-Si te veo duro antes...ahh~ entonces no tendremos nada.-dictó. Mark abrió los ojos. ¡Eso era tan cruel! Jinyoung soltó una risita casi malvada y continuó. Mark sólo podía pensar en todo lo que le haría luego de que esta tortura pasé pero no se espero que Jinyoung dejara de masajear sus bolas para después llevar uno de sus dedos a la entrada de su culo. Mark sintió que el aire se le iba cuando el dedo se hundió en él y Jinyoung gemía más. Joder. El más joven metía y sacaba ese dedo mientras se masturbaba suciamente frente a él, Mark estuvo tentado de cruzar las piernas para que su pene no saltara, esto era sin duda una prueba muy difícil. Viendo los músculos de Jinyoung tensarse en sus acciones.-¿Quieres ocupar el lugar de mis dedos?-soltó con una voz tan sexy que Mark jadeó.

Two men and half woman [Markjin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora