13. Porque te quiero.

743 79 189
                                    

Jinyoung se sentía un estúpido. ¿Cómo no lo había notado antes? Días atrás había visto fotos de la tipa en el instagram de Mark y no la reconoció. La última vez que la había visto había sido hace año y medio en medio de una disputa que tuvo con su padre. Ahora no sabía que hacer en esta situación, si Yuna se ponía mal se iba sentir la peor persona del mundo.

-Jinyoung.-la mujer dijo. Ella no había puesto atención a la presencia de la niña y Yuna pareció notarlo por lo que aprovecho ese momento para girarse hacia Jinyoung y rogar con sus ojos que la tomará en brazos. Eso hizo dejó que ella se escondiera en su pecho y miró mal a la mujer.

-Vete.-exigió Jinyoung con su peor cara de asco.

-No tienes por qué odiarme. Solo he venido a recibirte como corresponde, ya que soy la dueña de casa y tu madrastra.-ella dijo.

-Me sobran motivos por los cuales odiarte. Quiero que te vayas, estoy ocupado por si no lo habrás notado y no necesito que nadie me reciba en mi casa.-masculló el menor. Ella lo miró confundida sintiéndose atacada de repente y sin razón. Jinyoung sentía que el odio comenzaba a crecer dentro de él. ¿Cómo podía existir ser tan repugnante pisando sobre la tierra? Su hija estaba a unos metros y ella no fue capaz de reconocerla de primeras. Cualquier madre lo haría.

-Podrías ser más respetuoso, mocoso.-y ahí estaba su verdadera personalidad.

-Alguien me dijo una vez que el respeto uno se lo da a quien se lo merece.-se levantó ocultando el rostro de Yuna todo lo posible y pasó a su lado.-Me voy yo. Hazme el favor de no cruzarte más en mi camino, por algo la casa es grande.- salió.

🕷️

-Enana, ¿Estás bien?-se sentía idiota al preguntar eso pero ella seguía pegada a él incluso luego de encerrarse con ella en su antiguo cuarto.

-Si, Jinnie... No te preocupes.-contestó y luego suspiró. Jinyoung la sentó en su cama.

-¿Quieres que nos vayamos?-preguntó.

-Dijiste que la casa es grande. ¿No?

-No quiero que estes triste.-dijo Jinyoung.

-Quiero...quiero que llames a mi papá.- sus labios temblaron y Jinyoung entró en pánico. Hizo lo que la niña pidió, llamó a Mark que por suerte estaba en su descanso en el trabajo y pudo contestar sin problemas.

-¿Qué pasa, amor mío?- la voz de su papá era algo que siempre iba a calmarla, la niña suspiró.

-Jinyoung me está mostrando cosas lindas, quería decírtelo. Llevaremos rosas como las que llevara Jinnie cuando se casen.-Mark notó ese cambio de tema.

-Está bien, bebé. Los estaré esperando a ambos para que también me cuentes todo lo que hagan. ¿Si?-dijo su padre.

-No olvides alimentar a Tenebrosa cuando llegues y...-hizo una pausa.-Te amo, papá.-Mark frunció el ceño del otro lado de la línea.

-Yo también te amo. ¿Segura que no sucede algo?-Yuna sonrió.

-No, sólo te extrañaba un poquito.-dijo la menor.-Te paso con Jinnie otra vez, no olvides decirle que lo amas a él también.- sonrió con travesura mirando a Jinyoung y este se sonrojó. Mark rió del otro lado.

-Mark, lo siento...ella de repente quiso llamarte.-dijo Jinyoung.

-Está bien, no me molesta. ¿Está todo bien de verdad? Sé cuando ella está rara.- dijo.

Two men and half woman [Markjin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora