Catherine

Terminó 3/3

—Deja de llorar, tú terminaste con el— quería asesinar a Chris, pero mis ojos hinchados no me lo permitían

—Se supone que no debía sufrir estas cosas— me quejé volteando a verlo

—Bebé... los Stanson se irán a Alemania con Joe, es por eso que Jessica se queda con Jake...— Puta. Madre.

—¿Por qué no me dijiste eso antes?— me senté rápidamente

—Porque no dejas que nadie explique las cosas— hablo con obviedad, lo miré confundida... bueno, tenía razón —Jake estaba pasando por mucho y tú lo desechaste cuando el te dijo la verdad— ¿Por qué Chris siempre tenía razón?

—Es molesto que nunca te equivoques— le dije— pero debo dejar que pase algo de tiempo ¿no? Jugar con sus sentimientos estaría mal— asintió

—Estás entendiendo las cosas— aplaudió— vamos a ver lo de tu departamento, salgamos a comer y disfrutemos del calor— sugirió— luego iremos con Jake a que le digas cuánto lo amas y vuelvan y se casen— se burlo

—¿Joe se va?— pregunté de la nada

—Sí, ese maldito bastardo se alejará de aquí— su mirada se ensombrecía al hablar de él— ¿Por qué estás tan obsesionada con el Cat?— indagó.

Y la verdad es que Joe no siempre fue malo, un jugador tal vez, pero por más bueno que intentara ser su familia siempre se ponía en medio.

Cuando estábamos en la secundaria Joe era el típico gordito y nerd que sólo se fijaba en una chica y se enamoraba, su hermana al contrario siempre fue la popular y se burlaba constantemente de él. Pero Joe tenía un aliado de travesuras, Jacob Lucas. Donde fuera que encontrarás a uno el otro estaría ahí por igual, salvando a otros niños de los bullies, estudiando o comiendo, a diferencia de Joe, Jake tenía kilos de menos y mucho acné.

Jake no era bienvenido en la casa de Joe por qué sus madres no se soportaban, Ashley Stanson era una perra pretenciosa que, aunque ambas familias vivieran una enseguida de la otra, pensaba que siempre sería mejor que ellos. Jacob Lucas sr. Se había partido el lomo por darle todo a su familia pero su esposa siempre buscó más, para llegar a la sociedad de la que tanto presumía su vecina; así que Joe creció con la pretensión de su madre y las quejas y burlas hacia su mejor amigo.

Cuando en la preparatoria le comenzó a gustar una chica, era yo... la misma chica que le gustaba a su mejor amigo, el "pobre" que para su, ahora, contaminada mente no la merecía; por lo tanto pelearon por mi hasta no ser más amigos y cuando el intento algo conmigo, pensó que su dinero, del cual su madre presumía tanto y su hermana se jactaba para hacer amistades me conseguiría, pero Jake tenía algo que Joe no tenía, uña carisma inigualable, unos ojos de ensueño y una sonrisa que derretía a cualquiera, aparte su personalidad era de oro, cuidar a todos a su alrededor, estudiar y ayudar eran los principios inculcados por su padre y eso había ganado mi corazón.

Cuando Jake se fue Joe vió una oportunidad presentarse y se aprovechó siendo él el primero en mi cuerpo, como siempre había soñado, pero yo no sentía amor por él y en su dañada mente, si yo no sentía amor inigualable y una atracción obsesiva debía burlarse de mi para llamar mi atención, trazo inculcado por su padre, el gran empresario y acaudalado hombre de negocios. Todo el pueblo sabía de sus aventuras con mujeres de cada país, estado y ciudad que visitaba y Joe quería ser como él; así que cada que podía se burlaba, hacía comentarios ofensivos o me hacía sentir menos para que yo siguiera ahí, a su lado y no me alejara, dejándome un trauma que en mi juventud no se vió desarrollado más que por una personalidad introvertida.

Eso me había hecho Joe, por eso siempre quería agradarle y verme hermosa a su alrededor, sino, el iba a dejarme, sino era de su agrado se alejaría de mi, si no tenía sexo con él todos sus amigos se enterarían y la burla sería yo, no él. El problema era que para acostarme con Joe, tenía que estar ebria.