El hospital

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La ambulancia llegó con rapidez, una única vez había visto a Jake tener un episodio por alergia a la canela, estábamos en la secundaria, tendríamos si mucho 14 años y logro ponerse morado frente a mi. Unos chicos mayores que nosotros pensaron que sería "divertidísimo" arrojar canela en polvo mientras Jacob Lucas pasaba por un pasillo cerrado camino a su casillero, el mío estaba justo enfrente del suyo y Chris, Andrea y yo estábamos guardando algunas cosas por que nos quedaba más cerca.

Escuchamos la "bomba" de canela explotar y vimos a Jake cubierto en la sustancia, el aroma me dió náuseas inmediatamente pero mi miedo fue más fuerte; pocos meses antes Jake había tenido otro ataque en la iglesia y su mamá le había platicado a mi mamá y a la mamá de Chris sobre lo "mortal" que era la alergia de su hijo

Sus vías respiratorias se contraen en segundos— había dicho —No puede respirar para nada y... oh mi pequeño bebé— mi abuela me había atrapando escuchando y me envió a mi habitación sin más información, pero si yo odiaba la canela, Jake debía evadirla a toda costa.

Recuerdo correr a él e intentar limpiar su rostro con mi uniforme, tosía, Chris y Andy corrieron tras de mi y con una botella con agua intentamos limpiarlo pues ya les había dicho lo que había escuchado, los chicos reían a carcajadas mientras Jacob no podía respirar, Andrea corrió a advertir a un profesor, abucheada por los demás estudiantes que pensaban que era todo muy divertido hasta que Jake se desmayó en mi brazos y caímos juntos al piso frente a su casillero.

—Cariño ¿Qué sucedió? —me preguntó la paramédico mientras seguíamos en el piso de la cafetería, Fred estaba junto a mi. Todo parecía tan igual a la última ocasión

—E-Él es muy alérgico a la canela y-y-y bebió café— quería llorar, ni siquiera podía hablar correctamente y eso que Jake no estaba morado en mis brazos como la última vez.

—¿Sabes si trago el café?— no lo sabía... negué. —No pasa nada, tú novio estará bien— me dijo antes de voltear a seguir intentando abrir las vías respiratorias de Jake y subirlo a una camilla.

—Y-Yo, Fred, debo ir con él— si me sentí un poquito mal, sin embargo no soportaría no ir con Jacob y menos seguir viendo a Frederick comer. Asintió, me dio un abrazo reconfortante y salí corriendo hacia la ambulancia avisando a Chris y tomando la mano libre de Jake.

—Él estará bien— me aseguró otro de los paramédicos mientras seguían entubando a mi... amigo. —¿Lo habías visto así antes?— asentí —Ves, estará bien, esta respirando sólo ya— saber que respiraba por el mismo aunque con mil tubos dentro y luego de la inyección para controlar la alergia que le habían puesto, me hizo sentir mucho mejor; llegamos rápidamente al hospital, lo metieron y tuve que quedarme en la sala de espera hasta que ellos me dieran permiso de entrar, Chris, los señores Lucas y mi madre abrazada de Lucy Lucas entraron minutos después.

—¿Qué pasó, Cat?— preguntó Chris una vez que me alcanzó y me abrazó conociendo mi estado de shock.

—El bebió café con canela sin darse cuenta— expliqué para todos

—¿Qué hacia Jake contigo?— Chris me miraba extrañado y yo no quería explicar pero ahora sus padres y mi madre nos miraban con interrogativas en su rostro.

—Nos topamos en el café, yo estaba con un amigo y lo vi cuando salía del baño— era casi verdad —vi que tenía dificultad para respirar y pedí ayuda.— terminé mi muy convincente explicación.

Jessica y Joe entraron corriendo a la sala de espera, la ridícula y dramática de mi enemiga gritaba a las enfermeras y doctores lo incompetentes que eran sin saber siquiera lo que había sucedido; la mamá de Jake la abrazó y le explicó la situación, Jessica me fulminó con la mirada, enserio, si las miradas mataran sería yo quien estuviera en una camilla en este momento.

—¡¿Por qué demonios siempre estás TÚ cuando a Jakey le dan episodios de alergia?— me acusó y si Chris no me tomaba de los brazos en ese momento esta escena hubiera sido muy diferente. —Hola Chris— dijo, cambiando completamente el tono y haciendo un gesto con la mano como saludo.

—Hola...— volteó a verme con cara de "y esta loca qué" a lo que tuve que suprimir una risa.

—Familiares de Jacob Lucas— dijo un doctor exageradamente guapo saliendo de unas puertillas de resorte con unos papeles en las manos

—Soy su papá — habló por fin el señor Lucas mientras que todos nos levantábamos de las sillas al mismo tiempo.

—Soy su mamá— dijo Lucy abrumada por la situación —ellos son amigos, todos somos familia— específico para que el doctor hablara

—Bien, el joven ha tenido una fuerte reacción, tenemos en el expediente que no es la primera, han actuado con rapidez y le han salvado la vida pero esto no puede estarse repitiendo, la escasez de oxígeno puede ser peligrosa para el cerebro.— siguió explicando— tengo entendido que fue un accidente. —nos miró a todos esperando una respuesta

—Lo fue— hablé por fin ganándome su mirada castaña. —bebió café sin percatarse que tenía canela, tal vez fue sólo un sorbo, no creo siquiera que lo haya tragado— dije con rapidez, la mirada del doctor recorrió mi rostro con intensidad ganándome un codazo de Chris quien también lo notó.

—¿Y usted es?— preguntó revisando los papeles en sus manos

—Catherine Hut— estreché su mano —Estaba con Jake cuando... sucedió— tragué saliva

—¿Es su novio?— preguntó anotando algo en las hojas

—¡No!— dijimos Jessica y yo al unísono

—Amiga, es mi... es mi amigo— afirmé ganándome una sonrisa de aprobación a mi respuesta.

—El señor Lucas estará bien, esperaremos a que pase el efecto de la inyección para des entubarlo y ver cómo reacciona, un par de horas más ¿de acuerdo?— nos miró a todos con algo de diversión en el rostro, saber que Jake estaba bien era más que suficiente. Todos asentimos y él se alejó a paso seguro, volteando una última vez antes de volver a entrar por donde había llegado.

—Ugh, se me antoja hacerle un baile vestida de enfermera— dijo Jessica a Joe que se encontraba a unas cuantas sillas de nosotros, la miré con asco. Joe estaba extremadamente callado y alejado, algo que no era normal.

—Que asco me das— le respondió a su hermana con una mueca desagradable

—¿Nos vamos?— preguntó Chris, él sabía que no quería pero no era lugar para que yo estuviera y él tampoco, odiaba el hospital desde lo de su madre y su hermana; así que asentí.

Mi mamá nos siguió a la salida al igual que la mirada de Joe, algo traía entre manos y me preocupaba con qué saldría. Unos pasos resonaron tras de nosotros haciéndonos voltear, el doctor de Jake, corría para alcanzarnos por el largo camino, Chris tomó a mi madre y la apuro a salir del hospital cuando gritó mi nombre.

—¡Catherine!— lo observé mientras esperaba

—Doctor... ¿sucedió algo?— Jake estaba primero y si algo le había pasado correría y donaría mis pulmones de ser necesario.

—N-no... es sólo... tu... su amigo está bien— parecía nervioso— es sólo... Amm yo... —se rascó la nuca —Quería saber si le gustaría salir conmigo— dijo al final... hola febrero.

Me abofetee mentalmente luego de pensar eso, Jake estaba en el hospital y yo estaba coqueteando con su doctor, pero a quién engañaba, su prometida estaba en el piso de arriba esperándolo y el jamás sería mío.

—Claro, me encantaría— contesté

—Estoy libre el viernes... bueno "libre"— explicó —mi guardia en urgencias termina— sonrió y me encantó.

—El viernes me parece bien— sonreí igual y el brillo en sus ojos me pareció maravilloso, febrero se veía bastante prometedor.

—Te llamo, para no quedarte mal— carraspeo— ¿Me darías tu número?— No nada más mi número... ¡contrólate Catherine! Sonrió... por favor díganme que eso no lo pensé en voz alta.

—Tu...¿amigo? Te espera— señaló a Chris que se asomaba intentando, falsamente, ocultarse en un pilar.

Le di mi número al doctor Sebastián Ambrose especialista en Alergias y me sentí feliz al respecto esperaba, solamente que no fuera un fiasco como Fred.

CatherineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora