La boda

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El capítulo que más ansiaba escribir está aquí....Albus y Minnie se casan.

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Las dos semanas pasaron volando, cuando quisieron darse cuenta ya era la última noche que serían solteros. Habían contratado tres niñeras para que se quede con las cuatro niñas

-¿Era necesario tres niñeras más un auror?-preguntó Minerva a su casi esposo

-Luego de lo que hizo Mark, ninguna protección es suficiente, las niñeras están entrenadas para cualquier tipo de ataque-aseguró el peliblanco, Minerva negó con la cabeza divertida, besó a su prometido y se fue con sus amigas a su despedida de soltera.

No era nada alocado, solo fueron a un negocio a comprar mucha cerveza y whiskey, luego a una casa que habían alquilado para tomar el alcohol que habían comprado y cantar canciones a los gritos.

A la mañana siguiente, Mienerva se despertó y notó que estaba todo listo para que se empieze a preparar para su boda. Unas horas más tarde estaba lista.

Sus amigas la veían con una gran sonrisa, por fin su mejor amiga se casaba con alguien que amaba y la amaba de verdad

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Sus amigas la veían con una gran sonrisa, por fin su mejor amiga se casaba con alguien que amaba y la amaba de verdad.

Llegaron al lugar donde se haría la boda, un hermoso campo, decorado de rojo y dorado en honor a la casa de ellos dos. Sus hijas estaban en primera fila junto a las niñeras. Albus estaba con su traje negro en el altar viendo a su futura esposa con una gran sonrisa.

Minerva entró del brazo de su mejor amigo Albert, Pomona estaba en primera fila del lado de Albus junto a Cassiopeia y Andromeda, ya que justo ese día era domingo y la pequeña Black todos los domingos iba a visitar a su hermana. La pelinegra sonreía a todos los invitados hasta que en la mitad del camino le sonrió a la fila de sillas dónde estaban los invitados de Albus y vió a Gellert, haciendo que su sonrisa se achicara

-¿Que está haciendo Gellert Grindelwald en mi boda?-susurró enojada a Albert

-Albus insistió en que quería que su mejor amigo este en su boda-le contestó

-Claro mejor amigo y examante también-gruñó Mcgonagall

-Que nada te arruine este día-le aconsejo y llegaron al altar, Albert unió las manos de los novios y le sonrió a Albus-Cuidala, hazla sufrir y desearas terminar en Azkaban

-Jamás lastimaria a la mujer que más amo en este mundo-sonrió Albus mirando con una gran sonrisa a su casi esposa. El juez dió todo un discurso largo y hermoso

-Minerva Mcgonagall ¿Acepta a Albus Perciaval Wulfric Brian Dumbledore como tú esposo para amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

-Sí acepto-sonrió mirando al hombre que amaba

-Y tú, Albus Perciaval Wulfric Brian Dumbledore ¿Acepta a Mienerva Mcgonagall como tú esposa para amarla y respetarla hasta que la muerte los separe?

-Sí acepto-sonrió acariciando con su pulgar el dorso de la mano de su esposa

-Por el poder que me concedió el ministerio, los declaró marido y mujer, puede besar a la novia-sonrió el juez. Albus tomó a Minerva de la cintura y la acercó para besarla dulcemente mientras ella ponía sus manos en las mejillas de su ahora esposo.

La fiesta comenzó cuando todas las mesas aparecieron por arte de magia y dónde estaba el altar se armaba una pista de baile. Luego del vals de los novios, la señora Dumbledore se sentó en la mesa principal mientras miraba con una gran sonrisa a su esposo que bailaba con Dorea. Cuando sintió que alguien se sentaba a su lado en el lugar de Albus

-Vete Grindelwald, no voy a dejar que me arruines este día-dijo la mujer sin mirarlo y se dedicaba a mirar como sus gemelas tomaban la mano de Sabrina y la ayudaban a bailar al compás de la música

-No tengo la intención de arruinar nada, solo vengo a felicitarte por tu boda y bueno por tus cuatro hermosas hijas, se nota que Kendra será igual a su padre, pelo pelirrojo y esos ojos azules que parecen que te examinan con rayos x, pero definitivamente la forma de su cara es la tuya-dijo con una sonrisa

-Ya te gustaría a ti tener hijos con él-rió Mienerva mirándolo-Si tan solo no te hubieras obsesionado con las reliquias de la muerte y su madre no hubiera muerto, él se estaría casando contigo

-Ya deje el pasado atrás, espero, con honestidad, que seas muy feliz en tu vida junto a Albus-sonrió Gellert mientras un auror llegaba y se lo llevaba de vuelta a prisión. Ella solo se paró y se acercó a la pista de baile para pasar el mejor día de su vida.

Luego de que terminara la fiesta, volvieron a casa en familia, no tendrían una noche de bodas y su luna de miel sería en familia, no dejarían tanto tiempo a sus pequeñas.

Ya acostadas las niñas, llegaron al cuarto entre besos y cayeron a la cama, Albus arriba de Minerva

-Nunca había sido tan feliz como cuando aceptaste ser mi novia-dijo Albus

-Yo jamás fui tan feliz en mi vida-rió la pelinegra volviendo a besar a su esposo.













Hola Hola

El capítulo de la boda llegó, ya en el próximo habrá un salto temporal y empezamos con el primer año de las gemelas.

Bye bye

Una historia de amor diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora