La Cita [KOOkMIN]

🏒①⑨ (Pt. ½)🏒

>> Park JiMin <<

Se esta volviendo completamente obvio que Jeongguk tenía razón. Él es un refuerzo de imagen. Mientras voy por el camino empedrado hacia el edificio de Filosofía, al menos quince personas me dicen: hola, ¿cómo estas?, te ves bien. Soy recibido por muchas sonrisas, despidos y saludos que siento como si hubiera pisado un planeta completamente diferente. Un planeta llamado JiMin, porque todo el mundo parece que me conoce. Pero yo no tengo ni idea de quiénes son, aunque debo de haberlos conocido en la fiesta de Kai.

Malestar retuerce mi estómago, junto con un movimiento de autoconciencia que me mantiene aferrándome a mi paso. Inquieto por toda la atención, prácticamente corro hacia clase y cayendo a mi asiento junto a NamJoon.

Jeongguk y Kang no han llegado todavía, lo que es un poco aliviador.
No estoy seguro de si tengo ganas de hablar con cualquiera de ellos en este momento.

— He oído que saliste con Jeongguk este fin de semana —es lo primero que NamJoon dice.

Dios. ¿No puedo estar un sólo segundo sin que me recuerden al chico?

— Uh, sí —digo vagamente.

— ¿Eso es todo? ¿Sí? Vamos, quiero todos los detalles sucios.

— No hay ninguno —me encojo de hombros—. Sólo estamos pasando el rato a veces —al parecer, ésta es ahora mi respuesta recurrente.

— ¿Qué pasa con tu otro flechazo? —NamJoon asiente de manera significativa hacia el pasillo opuesto.

Sigo su mirada y me doy cuenta que Kang acaba de aparecer. Se sienta en su asiento y saca un Macbook de su bolso, y como si sintiera mi mirada sobre él, levanta la cabeza y sonríe.

Le sonrió de vuelta y luego Choi pasa, rompo mi contacto visual mientras me enfoco en el centro del podio.

Jeongguk esta atrasado, lo cual es impropio de él. Sé que estaba con sus compañeros de equipo la noche anterior y que no tiene práctica esta mañana, pero no hay manera de que se hubiera dormido hasta las cuatro de la mañana. Saco discretamente mi teléfono para enviarle un mensaje, pero su mensaje me llega primero.

Jeongguk: Estoy tratando con una emergencia. Llegare para la segunda mitad. ¿Tomas notas para mí hasta que llegue?

Yo: ¿Todo bien?

Jeongguk: Sí, limpiando el desorden de Yugyeom. Larga historia. Te diré después.

Tomo muchas notas durante la clase, más en nombre de Jeongguk que el mío, puesto que ya he leído y aprendido de memoria la última teoría. Cuando Choi habla, mi mente se desvía. Pienso en mi inminente cita para cenar con Kang, y ese inquieto malestar vuelve, trayendo una sensación de náuseas a mi estómago.

¿Por qué estoy tan nervioso al respecto? Es sólo una cena. Y eso es todo lo que va ha ser. Otros pueden desnudarse en la primera cita, pero yo no soy uno de ellos.

Pero Kang es un jugador de fútbol. Las chicas con las que él sale probablemente se desnuden antes de que los menús incluso lleguen, ¿y si espera eso de mí?

Que si él...

No, me digo firmemente a mí mismo.
Me niego a creer que sea el tipo de chico que presionaría a alguien a dormir con él.

A los cuarenta y cinco minutos, Choi avisa de un receso y todos los fumadores de la clase salen corriendo como si hubiera sido atrapados en una mina durante dos semanas. Me dirijo afuera, no para fumar, sino para buscar a Jeongguk, quien todavía no ha hecho acto de presencia.