Los Especiales, Primer Libro De La Saga: Los Legados Oscuros De Lorien.

Capítulo 29

"CONOCIENDO NUESTROS LEGADOS"

SEBASTIAN JONES

En algún lugar de Colombia

Después de desayunar, los 4 salimos con nuestras mochilas listas para marchar en busca de los que faltan. Por mi parte separo los bits que se unían para formar las cabinas desplazándolos de nuevo dentro de la Tablet, mientras veo que Lyon y Luidymar están a punto de bajar el muro de piedra que nos protegió de la vista de los chismosos cuando los detengo.

- ¡AUN NO! - les grito y al oírme ambos giran a verme.

-Quiero hacer algo primero- les digo mientras me acerco a ellos.

Ambos se miran extrañados por mi petición, pero acceden y dejan el muro como esta.

- ¿Qué tienes en mente? -pregunta Kevin aún soñoliento.

-Puedes llamarlo "entrenamiento", quiero saber con qué contamos y cómo podemos mejorar-

Luego de algunos segundos tengo la Tablet lista en una aplicación de bloc de notas para tomar los apuntes necesarios.

-¡Okey ¡Las damas primero -le digo sin mirarla

-Eso no fue lo que dijiste esta mañana en el desayuno antes de comerte todo sin esperarme -murmura ella algo enfadada, pero hago caso omiso.

-¡Vale! Yo ya he visto todos tus legados en acción. Tienes un buen control de la Telequinesis, puedes adquirir y cambiar las habilidades de los animales a voluntad gracias a tu Instin, pero debemos trabajar en tus otros 2 legados -

-Los tengo bajo control -responde ella bastante molesta por lo último que dije.

-No estoy diciendo lo contrario. Solo pienso que podríamos mejorar la eficiencia de estos. Por ejemplo, el canto, cuando lo utilizas para atacar debes tener cuidado de no dañar a tus amigos por lo cual lo sueles usar cuando estás sola ¿No es así? -

-Sí, pero... -comienza a excusarse.

-Considero que... -la interrumpo.

-... debe de haber una manera en que puedas dirigir ese legado en una sola dirección. Así cuando estemos en aprietos grandes y necesitemos ese legado en particular sería bueno que pudieras usarlo de esa forma. En mi caso yo tengo que concentrar la energía eléctrica en la palma de mis manos y luego desplazarla hacia los dedos índice y medio de cada mano para redirigir la corriente al lugar exacto que deseo dispararlo. -

-¡Querido! Estamos hablando del legado peligroso. A mí no me da tiempo de redirigir la energía o siquiera de concentrarla en un solo punto -hace una pausa corta haciendo ademanes.

-Sale cuando grito y es peor cuando canto. Ni siquiera puedo sentir si la frecuencia aumenta o no-

Todos se quedan pensativos ante la situación. Tocar el tema de los Legados Peligrosos y como entrenarlos para que sean menos letales es algo que tiende a cerrar el espacio del positivismo, ya que es algo que para nosotros sale de forma natural como cuando respiramos, no nos percatamos de que lo estamos haciendo a menos de que estemos hablando de eso o nos esté pasando algo que tenga que ver con eso.

-Bueno -interviene Lyon.

-En la tribu teníamos como una especie de llamada de emergencia para cuando sucedía algo o nos perdíamos. Era como una especie de silbido solo que haciéndolo de la forma correcta incrementábamos el sonido, recuerdo que inclusive usábamos hojas grandes, le hacíamos una forma circular para que el ruido pudiese llegar más lejos-

-Once, eres un genio -le digo un poco imperativo centrando mi atención ahora en Trece.

-Luidy piensa ¿Qué hacemos si estamos en un sitio con mucho ruido y queremos que alguien que está de espaldas a nosotros nos escuche? ¿Qué hacemos con nuestras manos para amplificar el grito? -