Al llegar a mi baño personal me estaban esperando, como siempre. Günter se tiró sobre mí, Conrrad me extendió una toalla y Wolfram me dio una escueta bienvenida desde un costado. He de admitir que no estaba seguro si vendría a recibirme y verlo aquí, a pesar de todo, me hizo un poquito feliz. Luché un poco para sacarme a mi tutor de encima, pedí disculpas por irme sin avisar, aunque advirtieron que el problema iba a ser con Gwendal, eso lo sabía.
-¿Cuánto tiempo me fui esta vez? - pregunté, se suponía que estaba mejorando con el tema, pero aún a veces me costaba.
-Fueron 16 días Heika.
-Es Yuri!, pensé que podría haber sido menos tiempo, solo estuve un día allá- me quejo, cuando viajo con Murata es más simple medir el tiempo, al menos terminé en el castillo y no en otro lugar.
Logré vestirme allí con la ropa que me habían llevado. Al salir agarré los regalos de mi madre para entregarlos, le dí a mi amigo el que era especialmente para él, tenía un cartelito con su nombre, en hiragana pero él ya podía identificarlo. Lo recibió dudoso.
-No sé si es correcto- dijo mirándolo.
-¿Por qué no? Ella lo preparó para ti después de todo- Pude ver sus ojos triste en vez de emocionados como cuando le entregaba esos regalos con anterioridad.
-De acuerdo, gracias- Murmuró mirando el regalo y luego hacia otro lado. No pude evitar sentirme mal al respecto, sentí una incomodidad en el pecho al verlo tan apagado.
Miré a Conrrad que había agarrados las otras cosas.
-Creo que es comida- expliqué- ya sabes, cosas para que prueben y dulces- diga ya para cambiar de tema- conseguí otra tarjeta también, ya voy a dártela en cuanto saque las cosas de mi mochila.
-¿De qué es?
-Es una del año en que nací, así que hay posibilidades que sea alguno que reconozcas esta vez- reí, menos mal que estaba mi padrino para aligerar las cosas.
Günter lloraba porque no tenía algo especial para él. No sé si debería hacerlo la próxima vez, temo sus posibles expresiones de gratitud aún más que la lástima que me da verlo llorar.
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Ya que Gwendal había solicitado mi presencia prontamente, según me dijeron, nos dirigimos allí, mi mochila fue enviada a mi cuarto, solo tardaría unos minutos más, podría haberla llevado yo mismo... En fin, al entrar noté primero la pila de papeles y luego al hermano mayor que me recriminó el haberme ido sin avisar. Había papeles urgentes que firmar y hace poco tiempo que había regresado de la tierra para irme tan pronto nuevamente y por más de dos semanas.
Me disculpé y mis acompañantes se fueron mientras yo me sentaba en el escritorio. Una vez solos tomó un par de papeles y se acercó.
-Llegaron estas mientras no estaba- me dice mientras coloca los papeles frente a mí.
