⭕My baby bear⭕

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—Sunbae...

—No me hables en aquel tono dramático—Yoongi me señala con el dedo, Seokjin a su lado ríe sin ganas— ¿Me harás ese favor?

Mi pecho se aprieta pensando en Taehyung, no sé como estarán sintiéndose el y el resto de los miembros, pero puedo escuchar a Athena sonar su nariz cosa que me desconcierta, ella luce tan fuerte...

—¿Porqué...?

—Yoongi y yo así lo decidimos, no podemos esperar más— asiento, supongo que no es como que pueda objetar— están molestos ahora, pero sé que luego entenderán que es lo mejor.

El personal andaba susurrando por los pasillos acerca de BTS reuniéndose en la sala destinada a eso junto a sus representantes, jefe y algunos publicistas.

Kim Seokjin y Min Yoongi empezarían su servicio militar, así lo habían decidido ambos cuando los rumores acerca de enviar al grupo completo se intensificaron, y es que si estaba prevista aquella posibilidad, pero los dos mayores se habían negado rotundamente.

—Entra ahí y busca a tu novio, el jefe salió hace apenas unos minutos así que está bien ¿Si?— susurro una afirmación, pues sigo aturdida— quita esa cara, no estamos muriendo.

—Más tarde, si tienes tiempo pasa por mi estudio, quiero hablar contigo acerca de algo— ¿Qué tendría que hablar conmigo Yoongi?— estaremos ahí junto a tu líder, búscame.

Ambos aprietan mi hombro despidiéndose, no sé siquiera como sentirme al respecto, mucho menos sabré reaccionar si me toman desprevenida.

Tomo una respiración honda, no puedo verme mal en esta situación, se supone que tengo que apoyar y dar ánimo, ciertamente el panorama es triste, estos chicos han estado la mitad de sus vidas pegados cual chicles unos con otros y ahora han de sentirse incompletos. Mi pobre osito debe estar muy triste.

Mi teléfono vibra en mi mano.

Osito🐻

¿Dónde estás?

No puedo entrar, me encontraría con rostros afligidos y nisiquiera estoy segura de que podré consolar a mi novio.

Estoy aquí afuera.
¿Quieres salir? Vamos al estudio
de Leo, hablemos allí.

Bien.



Los segundos parecen eternos y para cuando Taehyung sale debo contenerme para no lanzarme sobre él e intentar remediar todo, sus ojitos apagados me transmiten todo lo que siente.

Camino adelante y el me sigue, el estudio de Leo es de los pocos lugares en la empresa libre de cámaras, por lo que al menos sé que habrá privacidad, al llegar introduzco la llave haciendo ceder la puerta rápidamente, Taehyung entra primero y le sigo, cerrando desde dentro para evitar escenas problemáticas, y cuando me volteo, él ya está sentado observandome, sin expresión alguna, solo me ve caminando lento hasta que mis rodillas chocan con las suyas, ahí es cuando toma mi cintura y me jala hacía el, su cabeza descansa en mi vientre y puedo escucharlo suspirar, acaricio su cabello esperando que la sensación lo calme un poco.

—No pensé que nos fuese a doler tanto— habla primero, solo lo escucho— es tonto, porque todos iremos en algún momento, pero se siente extraño.

—No es tonto, son familia, nunca se han separado tanto tiempo— aprieta su agarre en mi cintura, cuando estar de pie empieza a sentirse incómodo, me siento en sus piernas quedando a la altura de su rostro, frente a frente— no digas que su tristeza es tonta, no lo es— asiente quedito— no podrán irse juntos, es cierto, pero pueden visitarlos seguido, tienen sus teléfonos celulares, podrán mensajearse y cuando tengan días libres podrán salir y compartir con ellos como siempre, lo único que cambia es la cantidad de tiempo cerca— acuno su rostro en mis manos— creo que justo ahora necesitan apoyo, la tristeza pasará y cuando menos lo esperemos, tendremos a Jungkook burlándose de sus Hyungs en la peluquería— aquello lo hace reír un poco— igual puedes golpearlos para desahogarte.

—Me gusta esa sugerencia, lo haré— reímos, beso la punta de su nariz, me muestra una sonrisa de boca cerrada— gracias.

—No hice nada— vuelvo a besar su nariz, es como un niño, le hace gracia cuando hago eso— sabes que cuando te toque a ti ir... y si aún estamos juntos-

—Lo estaremos.

—Mientras estés en la peluquería me aferrare a mis miembros y llorare desconsoladamente porque te voy a extrañar horriblemente— retira con sus dedos el mechón de cabello que se safò de mis trenzas— y luego estaré abrazandote y dándote todo mi amor y apoyo en lo que espero por ti.

—Existen las visitas conyugales— siempre tiene que arruinarlo y luego reírse de su falta de romanticismo mientras lo golpeo— podemos planear nuestra boda cuando me visites, quiero muchos hijos, una novia para Yeontan y-

—Solo uno y me estoy arriesgando.

La expresión decepcionada que tiene supera a todas sus reacciones anteriores conocidas por mi.

—¡No podemos tener solo un hijo!— exclama, indignado— que desperdicio de espacio.

—¿Espacio? ¿Quieres una casa grande?

—Una enorme— blanqueo los ojos— puede tener lo que quieras, realmente quiero un jardín para que nuestros cinco hijos jueguen y dañen las flores como los niños revoltosos que sé que serán.

—¿Quién te dijo que tendremos cinco?

—Bien. Cuatro.

Me queje en voz alta ¿Qué quería? ¿Un equipo de fútbol? Aunque solo estaba jugando con él.

—Me encantas.

—Ya te pusiste cursi.

—Es que me gustas mucho.

—Tu me desesperas mucho, Kim.

Se rió, no era cierto, por supuesto que él también me tenía encantada.


Mis niñas, el cuarto libro de la saga ha sido publicado, obviamente solo el prólogo

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Mis niñas, el cuarto libro de la saga ha sido publicado, obviamente solo el prólogo.

Vayan a leer TASTE ME, besitos rojos.

Triptych»KTH;FAMOUS2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora