Para Ochako y Katsuki fue una de las peores tardes que tuvieron en años. Incluso peores que las normalmente llamadas de atención de Aizawa. Porque esta vez, el hombre frente a ellos estaba un poco rojo de la furia y tenía los ojos más abiertos de lo normal.
—¡Metieron las patas hasta el fondo! ¡Hasta el fondo!
Ochako cerró los ojos tras escuchar a su profesor y se masajeó las sienes al igual que Aizawa en ese momento. Por su parte, el rubio estaba apoyado contra una mesa, mirando a su profesor y a Ochako estresados. Más allá estaba la profesora Midnight intentando mirar el vientre de la castaña con curiosidad, intentando acercarse para ver bien.
—No hagas eso, Nemuri.
—No me llames por mi nombre. —se quejó Midnight mientras por fin se acercaba a Ochako. —Siento que eres muy chiquitita y te vas a romper con este embarazo.
—Siento que me voy a romper en cualquier momento, Midnight-sensei. De hecho, es algo incómodo dormir.
—¿Duermen juntos ustedes dos? —preguntó la profesora con una sonrisa pícara.
Ambos enrojecieron a un tono cereza.
—¿Tus padres lo saben, Uraraka?
—No. . . aún no se los he dicho. —susurró sin muchos ánimos de seguir respondiendo. —pero, los padres de Bakugo-kun sí lo saben.
—Bien. Al menos no estás sola con eso. Voy a pedirles que vuelvan a vivir a las dependencias de la UA.
—Pero...
—Nada de peros, Uraraka. Ahí estarás protegida por varias personas y podrán ayudarte. Además, ¿sabes qué pasaría si la próxima egresada Uravity es encontrada por villanos estando embarazada? La gente es suficientemente cruel. Así podemos mantenerte vigilada, y a ti también, asno.
—¿yo qué? —preguntó como gruñido Bakugo, visiblemente molesto.
—¿eso significa que no tendré que salirme de clases?
—No. Pero no te puedo asegurar que no será algo fácil... No quiero seguir enojado con ustedes.
—Deja de regañarlos entonces, cariño. —escucharon una voz en el salón de profesores y no tuvieron que desviar la vista para encontrarse con el responsable.
—¿cariño? —preguntó Katsuki a tono de burla.
Aizawa los miró feo, y los mandó fuera del salón y ambos no tardaron en irse y no quisieron hablar del tema amoroso de su profesor. Al final, los había regañado casi una hora entera. Volvieron a clases, dónde todos se les tiraron encima a hacer preguntas.
—¡Aléjense de mi, malditos hijos de puta!
—Uy viejo, estás de pésimo humor, ¿Qué pasó?
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S.O.S, ¡Bebé en camino! | Kacchako
FanficUna galleta ha arruinado la mañana de Ochako; aunque en verdad, fue una combinación de alcohol y fiesta. Ahora tiene que afrontar un embarazo en su último año de escuela y para peor; ¡con Katsuki Bakugo! A ella le gustaba el pero compartir un hijo y...