Cap.7 «La carta»

152 7 0
                                    

ALEC P. O. V.

Acabo de salir de la habitación de Renesme y me dirijo hacia donde quiera que estén Jane y Renesme. Al llegar a la tienda donde estuvieron comprando, reconocí el olor de mi hermana y lo seguí hasta llegar a un basto restaurante. Al entrar veo a Jane y Renesme reírse, cosa que me pareció curioso así que me acerque a ellas.

-¿Qué es tan gracioso?- digo al llegar a su mesa. Jane y Renesme se miraron en silencio y volvieron a mirarme a mi.- ¿Y bien?- les digo metiéndole un poco de presión.

-Nada, nada una broma que le gasté a Ren.-dice mi hermanita.

-Ah, vale. ¿qué se supone que hacemos aquí?- digo mirando el entorno del restaurante que estaba repleto de humanos.

-Comer, creía que al menos eso era obvio- contesta Ren... digo Renesme en tono cortante mientras mi hermana miraba hacia otro lado, seguramemte para no reirse en mi cara.

En ese momento llego una camarera con una bandeja llena de comida.

-¿Quiere algo caballero?- me pregunto la camarera un poco sonrojada. Era alta, de pelo liso y negro, y tenía unas caderas muy bien marcadas.

-No, gracias- dije mientras me sentaba al lado de mi hermana. La camarera se fue con la misma y se llevó la bandeja vacia.

-¿Y toda esta comida es para ti?- le pregunto a Renesme.

-No, es para las dos- contesto Jane y yo la mire confundido como llebaba haciendo todo el día porque no entendia los comentarios de Ren y Jane.

-Pero ¿cómo?- exclamo aún más confuso.

-Después te lo explico, pero no le digas a nadie nada- dijo Ren, mientras ella y Jane empezaban a comer. Yo asentí con la cabeza y fuí a pagar.

Cuando llegué a la barra volví a ver a la camarera que nos atendió en la mesa.

-¿Al final a desidido tomar algo caballero?- pregunta la camarera, que por lo que ponía en su identificación, se llamaba Laura.

-No, sino que vine a pagar la cuenta- contesto mientras le entregó el dinero. Espere a que me diese la vuelta y entonces volví a la mesa donde estaban Jane y Renesme, y para mi sorpresa, ya se habían terminado toda la comida.

-¿Nos vamos?- pregunta Jane y yo asiento con la cabeza. Se levantaron y los tres salimos despacio del restaurante.

Al volver a casa, fui ha avisar a los maestros nuestra llegada, después de ello me fui a mi habitación y me metí en el baño para darme una larga ducha. Me pasé una media hora en la ducha y al terminar me puse una toalla amarrada en la cintura y me alborote el cabello para que se me secara antes. Pero al abrir la puerta del baño, me encontré con algo con lo que no contaba encontrar en aquel preciso momento.

Hay estaba plasmada mirándome, la persona que no había podido sacar de mi mente desde que la volví a ver. La persona que sin querer, había conseguido que Alec Vulturi, se enamorara perdidadmente de ella sin dar crédito. Y que le había dado a entender que el sentimiento era mutuo. Había convertido cada segundo a su lado una especie de sueño, y en los que no lo estaba, casi un infierno. Ella es mi tua cantante, ella es...

-Renesme...-susurro casi suspirando.

RENESME P.O.V.

Acabamos de llegar a lo que iba a ser mi nueva casa, al menos por un tiempo, y la verdad es que no estaba tan mal eso de vivir aquí. Alec se fue a hablar con los maestros y Jane me acompañó a mi habitación. Al llegar las bolsas de ropa estaban vacías en mi cama, lo que provocó que un nudo se formara en mi garganta. Me dirijo a mi armario y allí estaba toda colocadita en su cajon correspondiente la ropa que habiamos comprado.

Amor por defecto -RENESLEC-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora