Capítulo 29

76 6 0
                                    

  Siento que mis piernas están cortadas, no siento mis manos ni mi rostro, sólo escalofríos cada vez más intensos... Todo está oscuro, negro, silencioso, incómodo...

  -Smeart'...

  Papá...

  -Debes levantarte, ser fuerte...

  Padre no puedo, ayúdame por favor...

  -Tus amigos te necesitan, Jacob está...

  Jacob...

  -¡Jacob! -Grito levantándome como me es posible, hago un gran esfuerzo, pero estoy en una cama de hospital, llena de vendajes, tubos y aparatos.

  -¡Smeart! Gracias al cielo que despertó princesa... -Yannick exclama con preocupación, también está en una cama a mi izquierda, sólo que con pocas heridas y menos tubos y aparatos.

  -D-Desearía no haberlo hecho... -Exclamo con fuertes dolores por todo mi cuerpo -J-Jacob... ¿Dónde está?

  -Él... E-Está en sala de operaciones, salió... Demasiado herido -El hijo de Atenea agacha la cabeza con tristeza.

  -¡N-No! Dios mío... ¡Debo ir a verlo... Yo debo...! -Intento levantarme pero sólo logro retorcerme gritando de dolor, mi costilla se siente partida en varios pedazos mientras mi cabeza da vueltas con leves mareos.

  -Tranquila Smeart'... No debes levantarte... -Yannick intenta calmarme pero tampoco puede levantarse.

  -¡Señorita! -Una enfermera se acerca hacia mí y me levanta -Necesitamos que regrese a la cama -Me obligan a recostarme.

  -N-No por favor... Y-Yo... Necesito verlo, Jacob... Él... -Suspiro con nervios, intentando borrar mi ira, expulsándola a través de las lágrimas que fluyen como río por mis mejillas.

  -Tranquila jovencita... Su novio estará bien... -Responde con leve inseguridad, noto cómo observa a Yannick con preocupación.

  -Calma Smeart'... No lo perderás... -El hijo de Atenea me mira con tranquilidad, dándome algo de paz en el fondo de mi corazón.

  -P-Por favor... N-No lo dejen morir... -Miro a la enfermera que se aleja de mí buscando algo a su alrededor -Oh Dioses del Olimpo, por favor, les ruego, no lo dejen morir... -Susurro a las Divinidades de forma suplicante. No sé qué haría sin Apoloson, sin expresarle mis sentimientos de verdad, con cada detalle, sin poder afrontar a otros o a mí misma porque no está allí para aconsejarme, sin alguien que me haga reír...

  Está claro que Jacob es mi vida, si se va no podré salir adelante en muchísimo tiempo.

  -Lo siento señorita, pero esto va a dolerle un poco -La enfermera toma mi brazo derecho y me clava una jeringa, lo que hace que largue un fuerte grito de agonía y cierre mis ojos con fuerza, luego de unos segundos de lo sucedido todo vuelve a ser oscuro y silencioso.

  El silencio se rompe un rato después.

  -Aquí está doctor...

  -Vaya... No se ve muy bien...

  -Me temo que no.

  -¿Ha despertado?

  -Si, estaba desesperada por su novio, tuve que dormirla completamente...

  -Perfecto, dile a mi enfermero que pase por favor, y déjenos a solas con los pacientes.

  -Si doctor.

  Las voces y los pasos se hacen más audibles, intento abrir mis ojos pero me cuesta mucho. Luego de varios minutos de lucha, alcanzo a ver un rostro frente a mí con una pequeña luz en su mano.

Smeart', Tartar PrincessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora