JOHN MAXWELL COETZEE

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JOHN MAXWELL COETZEE

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JOHN MAXWELL COETZEE

Escritor y novelista sudafricano.

(1940-)

Amor: eso que el corazón ansía dolorosamente.


Tiendo a rehusar invitaciones a interpretar mi propia ficción.


Si hubiera un mejor modo, más claro, más corto de decir lo que la ficción dice, entonces ¿por qué no desecharla?


No somos crueles por naturaleza. Para ser crueles debemos cerrar nuestros corazones al sufrimiento del otro.


Hay obras literarias cuya influencia es fuerte pero indirecta porque está mediada por la totalidad de la cultura, en vez de inmediatamente por imitación.


Los escritores que tienen mayor influencia en uno son aquellos que uno lee en la edad temprana, la más impresionable, y, por lo general, las obras más jóvenes de esos escritores son las que dejan la más profunda impresión.


No considero la creación de ficción, o sea la invención y el desarrollo de fantasías, como una forma de pensamiento abstracto. No deseo negar los usos del intelecto, pero a veces uno tiene la intuición de que el intelecto por sí mismo no lo conducirá a uno a ninguna parte.


Hay un aspecto que siempre me ha parecido extraño en lo que concierne a la fama literaria. Tú pruebas ser competente como escritor e inventor de historias, y luego la gente clama por ti para que hagas discursos y dictes conferencias y digas lo que piensas sobre el mundo.


Si en efecto es imposible (o al menos muy difícil) habitar la conciencia de un animal, entonces cuando se escribe sobre animales existe la tentación de proyectar sobre ellos sentimientos y pensamientos que posiblemente sólo pertenezcan a nuestra mente y nuestro corazón humanos.


Sospecho que las mayores lecciones que uno aprende de otros escritores son las cuestiones inherentes al ritmo narrativo. Un estilo, una actitud hacia el mundo, que al asentarse, se transforma en parte de la propia personalidad, en parte de uno mismo y, finalmente, en parte indistinguible de uno mismo.

EPÍGRAFES FLANTÁSTICOS PARA ESCRITORESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora