FERNANDO PESSOA

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FERNANDO PESSOA

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FERNANDO PESSOA

Escritor portugüés.

(1888-1935)

"Todas las cartas de amor son ridículas.

No serían cartas de

amor si no fuesen ridículas."


Odiamos lo que casi somos.


Hay bastante metafísica en no pensar en nada.


La artificialidad garantiza el goce de la naturalidad.


La alegría es la forma comunicativa de la estupidez.


El hombre es un egoísmo mitigado por una indolencia.


Ser poeta no es una ambición mía, es mi manera de estar solo.


El deleite del odio no puede compararse al deleite de ser odiado.


Me siento tan aislado que puedo palpar la distancia entre mí y mi presencia.


Vivir me parece un error metafísico de la materia, un descuido de la inacción.


No hay normas. Todos los hombres son excepciones a una regia que no existe.


Todas las frases en el libro de la vida, si son leídas hasta el final, van a terminar en una interrogación.


Soy como alguien que busca a ciegas, sin saber dónde ocultaron el objeto que no le dijeron qué es. Jugamos a las escondidas con nadie.


Nací en un tiempo en que la mayoría de los jóvenes habían dejado de creer en Dios por la misma razón que sus mayores habían creído en El, sin saber porqué.


Si después de yo morir quisieran escribir mi biografía, no hay nada más sencillo. Tiene sólo dos fechas, la de mi nacimiento y la de mi muerte. Entre una y otra todos los días son míos.


La única actitud digna de un hombre superior es el persistir tenaz en una actividad que se reconoce inútil, el hábito de una disciplina que se sabe estéril, y el uso fijo de normas de pensamiento filosófico y metafísico cuya importancia se siente como nula. 

EPÍGRAFES FLANTÁSTICOS PARA ESCRITORESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora