Capítulo once

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Después de que Louis empezase a sacar a los niños a jugar al aire libre, lo hicieron casi a diario.

Los alfas vieron que sus hijos estaban encantados con el ojiazul y les agradecían todos los días el permitir que su institutriz tuviese carta blanca.

Sin embargo a medida que los días fueron pasando, la furia de la ama de llaves fue en aumento pues a pesar de que había usado sus artimañas anteriores contra Louis, nada le había dado resultado.

Así que cuando el celo del ojiazul estuvo cerca, ésta se las arregló para entrar en su habitación y cambiarle los supresores por unas de igual color y forma que tan solo eran placebos.

Louis no notó la diferencia pero Harry y Niall si, por lo que aunque no dijeron nada, soportaban el estar cerca del omega como podían.

El aroma del castaño era tan intenso que el alfa ojiverde varias veces tuvo que esquivarlo dejándolo bastante desconcertado.

Harry se sentía inquieto, molesto, notaba como si su sangre hirviese en el interior de sus venas y ya no sabía que hacer para que su esposa no descubriera lo que el omega estaba causando en él.

Incluso visitó a su amigo y psiquiatra Ed Sheeran, un pelirrojo alfa al que conocía desde sus tiempos en la Universidad.

Incluso visitó a su amigo y psiquiatra Ed Sheeran, un pelirrojo alfa al que conocía desde sus tiempos en la Universidad

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...—Ayúdame amigo, estoy desesperado...voy a perder a mi familia...voy a arruinarlo todo.

—¿Por qué dices eso?.

—No estoy seguro de lo que siento...alguien me hace dudar de mí y de mi fuerza interior.

—Harry, creo que lo que te pasa no es de la rama de psiquiatría...eso tiene un nombre.

—Lo sé...lo sé pero no puede ser...mi pareja es Karen...la quiero...ella es la persona que elegí y es la madre de mis hijos.

El terapeuta suspiró y acto seguido le indicó que tomase asiento.

—Mira, yo te lo avisé cuando estábamos más jóvenes ¿recuerdas?—el ojiverde asintió—… te dije que lo que sentías por Karen no duraría porqué ella no te llenaba totalmente...ella no te hacía vibrar, ni te hizo ponerte así, tal como te encuentras ahora.

Harry se acercó molestó.

—Ella fue mi salvación y tu lo sabes...fue la única que me comprendía y la única que supo despertar en mi el sentimiento de querer ser de alguien.

—Lo sé amigo...yo sé por lo que pasaste y sé lo mucho que te aferraste a ella pero te dije mil veces que eso no era amor, que era dependencia.

El alfa ojiverde rompió a llorar como un niño.

—La muerte de tus padres y tu hermana fue muy fuerte para ti...los amabas tanto, eran tu vida y Karen supo llegar a ti con mucha paciencia y cariño, porque te habías cerrado en banda e incluso a mi me costó que me tomases en cuenta.

—Si, ella es extraordinaria...es la mejor mujer de todas—dijo Harry cabizbajo.

—Si lo es...es hermosa, es buena y te quiere y tu la quieres pero eso no significa que sea la única a la que puedas amar—volvió a hablar Ed.

—Pe-Pero yo jamás sentí nada por nadie más...veo y trato con gente todos los días de mi vida...he tenido cerca alfas, omegas e incluso betas rondándome y ofreciéndose y yo no he hecho caso alguno...pe-pero Louis es distinto, con él es diferente desde el principio.

—Cuéntame todo Harry y quizás así hallemos la respuesta.

El alfa ojiverde suspiró profundamente y asintió conforme.

—Bueno pues Louis es el omega que se presentó a la entrevista para ocupar el puesto de institutriz de mis hijos...desde un comienzo en cuanto lo vi, me llamó la atención...no sé si fue porque era hombre y todas las demás eran mujeres, no lo sé, tan solo me vi contratandolo sin apenas haber leído su currículum ni escuchar lo que me dijo.

—¿Por qué no lo estabas escuchando?—interrumpió el pelirrojo.

—Bueno es que él tiene un olor peculiar...su aroma es de canela...es exactamente igual al olor de mis recuerdos con mi abuelita...cada vez que me lo encuentré me transportaba a esos maravillosos momentos.

—¿Fue solamente su olor, Harry o hay algo más?.

El alfa ojiverde negó con pesar.

—No, ya desde un principio me gustó su cara, sus preciosos ojos azules y su frágil y delineado cuervo...es dueño de unas curvas muy femeninas y su trasero es redondo y hermoso....jamás vi un omega tan lindo.

—Bueno amigo, el que lo hayas contratado porque te gustase físicamente no es un pecado, a todos nos gustan lo hermoso.

—Si es verdad pero ahí ya debí de rechazarlo inmediatamente pues debía haber supuesto que sería un peligro...todas las anteriores institutrices fueron un problema entre Karen y yo, aunque nadan despertaban en mí pero con Louis está siendo todo lo contrario.

—¿Tienes miedo de que él se sienta atraído por ti y Karen lo eche?.

—Louis es muy correcto...es perfecto con los niños, ellos son más felices...él se comporta conmigo como cualquier empleado eficiente y distante.

—Entonces ¿por qué estás tan alterado?

—Es su olor...ahora es más intenso, creo que su celo está cerca... ese omega me trae loco y tengo mucho miedo de perder la cabeza y cometer una locura.

—Vete de viaje Harry...sal de tu casa por un tiempo.

El alfa ojiverde miró a su amigo con una sonrisa.

—Un viaje...eso es fantástico, ¿por qué no sé me habrá ocurrido?...iré con Karen...haremos una segunda luna de miel y cuando regresemos ya todo habrá terminado.

Tras salir de la consulta de su amigo, Harry entró en una agencia de viajes y compró dos billetes a París, se sentía más relajado y esperanzado pues quizás creía que todo aquello sería pasajero y lo que Louis le despertaba ya no iría más allá de una simple atracción.

15. Aroma De Canela-L.S (Omegaverse), TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora