Finalmente el omega ojiazul salió de su encierro tras restablecerse por completo.Los niños estaban felices pues lo habían extrañado mucho, ya que sus vidas habían vuelto a ser muy angustiosas bajo el mandato de Greta.
Cuando Harry llegó al comedor y lo vio sentado a la mesa y este le sonrió como siempre respiró aliviado pues había sentido una gran opresión en el pecho desde aquella noche en la que lo había visitado entre penumbras.
Sabía que no debía comportarse así nuevamente, Louis le había dejado muy claro el puesto que ocupaba cada uno y sabía que este tenía razón pero lo que el alfa sentía en cuanto estaba cerca de él le era ya inevitable.
En cuanto el desayuno terminó y los niños se fueron a lavarse las manos para comenzar con las clases y Karen se fue a su trabajo, Harry vio una oportunidad de explicarse.
—Louis, ¿podemos hablar un momento?.
El omega asintió conforme.
—Bien, entonces sigueme... iremos a la biblioteca.
El omega ojiazul obedeció algo temeroso pues creía que era para regañarle o incluso para echarlo por estar tantos días enfermo y por eso empezó a temblar en cuanto la puerta se cerró tras él.
—Louis, iré al grano— habló el ojiverde acercándose—...¿recuerdas aquella noche?.
Louis asintió.
—Si, pero...
Harry no le dejó continuar pues levantó uno de sus dedos y le tocó levemente los labios.
—Espero que no estés molesto conmigo por eso...la verdad es que yo...
El omega sospechó lo que seguiría, así que dio unos pasos hacia atrás.
—Harry...no por favor...no lo digas.
El alfa suspiró nervioso y se acercó nuevamente.
—Debo hacerlo Louis, no puedo negarlo más.
El omega entonces chasqueó la lengua y caminó hacia la ventana.
—Tú eres mi jefe... tienes una hermosa familia y a mi me encanta trabajar aquí... amo a tus hijos pero si me haces las cosas difíciles tendré que irme.
—No...no...no puedes irte— negó Harry sujetandole de los hombros.
—No puedes hacer esto...creí que eras un buen alfa y que amabas a tu familia—Louis rompió a llorar.
El ojiverde lo soltó inmediatamente.
—Por favor no llores, que me partes el alma.
—Entonces no me digas nada...no me hagas nada.
El alfa gruñó y se apartó pues el olor de Louis había tornado amargo.
—Lo que menos quiero hacerte es daño, Louis pero quiero saber que es esto que siento...quiero saber si tú también lo sientes.
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15. Aroma De Canela-L.S (Omegaverse), Terminada
FanfictionAdvertencia: Esta historia contiene escenas de sexo duro y vocabulario fuertes, además de comportamientos abusivos, como violación, agresión, etc...por ello, si eres sensible a estos términos no continues. Sin embargo, quiero decir que no puedes olv...