Dónde estás?

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No tenía nada que hacer. Después de que Álex me cancelara por la cirugía de emergencia que tenía me habia quedado sola en casa. Rechacé la invitación de Ángel al cine para nada. Estaba comiendo un poco de helado. Si almenos supiera dónde vive ya hubiese ido a su casa. Pero no, no tenía ni idea.

Pero... Se donde trabaja, y tal vez ya había terminado sus pendientes, sería un lindo detalle ir por el, darle un masaje y dormir. Me levanté del sillón. Me cambié. Tomé unas cosas, un aceite para masaje, una lencería sexy. Pedí un taxi y salí. Llegué al hospital, era increíble que aún siendo ya tarde estuviera aún tan movido aquí. Estaba buscando su consultorio cuando ví a uno de los chicos que estaba con el en el bar, me vió y me reconoció de inmediato por qué me sonrió y se acercó a mi .

- Hey hola - parecía nervioso, tal vez ya estaba cansado - que haces aquí ?
- Vine a ver a Alex, imaginé que ya habría terminado - se rascó la incipiente barba como pensando bien si debería decir o no algo
- Mira, no lo escuchaste de mi está bien? - asenti - pero el se fue hace rato, salió a su hora normal. Todo el día estuvo alterado por la visita de su exnovia
- Se ... Se fue con ella ?
- No, ella llegó aquí por la mañana y el salió a las 6 dudo mucho que se fuera con ella a menos que lo haya esperado en su apartamento - quería llorar, tal vez si había sido mala idea empezar algo con el
- Podrías porfavor darme su dirección ? - frunció las cejas como si le hubiera dicho que tenía una tercer pierna.
- No sabes dónde vive? Nunca te ha llevado? - Negué, él no tenía idea de que lo que me decía solo me dolía más - toma - me dió un papel en el que acababa de escribir la dirección - deshaste del papel cuando llegues, no quiero que reconozca mi letra
- Está bien, gracias - me acerque, me puse de puntillas y le di un beso en la mejilla. Caminé sin levantar la mirada, tenía que aguantar las lágrimas y prepararme para lo peor. Tal vez para encontrarlo con ella sería el peor escenario. El taxista se detuvo frente al edificio, no sabía si bajar o no, pero lo mejor era que si. Pagué y subí al ascensor. Al bajar me sentía mareada, y de nuevo parecía que me derretía con la cantidad de sudor que transpiraba. Vi el número de su casa y me acerqué, la puerta estaba apenas abierta y se escuchaban voces.

- Pero que quieres que le diga? Que ella regresó y luego me agarré a golpes con el ?
- Ella lo entenderá
- Ella no entenderá, nunca le hablé de mi historia con ella
- Pues ya es hora de que lo hagas
- No, lo mejor será que me aleje de ella hasta que sepa que decirle
- Eres un imbécil
- Y crees que no lo sé? Solo no quiero verla, no quiero ver a Alli hasta que aclare mi cabeza.

Ya no podía soportar esto, ya no quería escuchar más, si el decía que necesitaba aclarar su cabeza es por qué había estado con ella, si no por qué se habría agarrado a golpes. Me fui a mi casa y me encerré. No tenía por qué sentir culpa por el, no más, almenos yo era la única que había sido sincera en esto.

No respondí sus mensajes al día siguiente, ya había pasado toda la noche llorando como idiota, no más, ya era de ponerme a trabajar. Si no me tiré por Carlos menos por el que tenía menos tiempo de conocerlo. Me preparé, preparé las sabanas, los tragos, los condones. Adiós Allison hola Cielo. Mi regreso era más que triunfal por así decirlo. Apenas avisé que ya estaba de vuelta después de varios días Tenia a varios pidiendo servicio, desde nuevos hasta clientes frecuentes. Se que lo hacía más que nada por despecho pero estaba saliendo muy beneficiada con esto económicamente. Estaba tomando un descanso, ya estaba agotada, eran casi las 4 de la tarde y solo había tenido 10 minutos de descanso entre cada servicio. Estaba bebiendo un vaso de agua y comía una barrita de cereales mientras hablaba con Ángel.

- Estás arrasando maldita, y eso es bueno
- Lo sé - dije sonriendo - para el fin de semana tendré buen dinero para mamá y lleve a mis hermanos a pasear
- Y tal vez nosotras hasta podamos ir de compras
- Dalo por hecho - tocaron la puerta. Ángel fue a abrir, desde mi lugar lo pude ver, era muy apuesto. Su rostro me era familiar por alguna razón, no recuerdo donde haberlo visto. Tal vez en el bar. No sé.

- Vengo a ver a cielo me la recomendaron - dice el hombre sonriendo y examinando el cuerpo de Ángel.
- Cariño, te buscan - me limpie la boca rápido y bebí del agua, me acerqué a la puerta, aún lo observaba tratando de recordar dónde, a quien mierda se parece pero el me hacía sentir nerviosa
- Hola guapo - me acerqué y le guiñe un ojo.
- Tu, tu eres Cielo? - dijo asombrado
- No te dejes llevar, soy legal - le sonreí tratando de que se relajara.
- No no es eso, creo que mejor regreso otro día, disculpa, y cuídate mucho porfavor - y se fue, que mierda había sido, ninguna de las dos reaccionó. Que habría querido decir este tipo con eso? Por qué me sentía nerviosa y mi cabeza intentaba quemar mis últimas dos neuronas tratando de recordarlo.
- Eso fue la cosa más rara que me ha sucedido - dice Ángel cerrando la puerta
- Lo sé, no será otra de tus cosas verdad ?
- No claro que no, estoy limpia desde tu incidente
- Está bien, solo tenemos que mantener los ojos abiertos por cualquier cosa.

Después de 20 minutos de estar pensando llegó otro cliente. Lo dejé en la habitación y fui por una botella de agua. El teléfono de la casa sonó y lo contesté. No había Sido buena idea darlo para el negocio.

- Servicio de Ángel y Cielo que se le ofrece?
- Que me respondas el teléfono, y por qué respondes así? Creí que te habías tomado un descanso
- Se terminó el descanso
- Ah si? Desde cuándo - estaba mal humorado
- Desde anoche que decidí que yo también tenía que aclarar mi cabeza - y le colgué, no deje que me respondiera. Sus explicaciones me daban igual. Regresé a la habitación con mi sonrisa habitual para el cliente. No era de las que besaba pero a la mierda, si el hacía lo que quería yo tambien.

Estaba dando un excelente servicio, claro mientras pensaba en el maldito idiota que de seguro estaba riéndose de mi con su estúpida ex novia, que ya no era ex, ya era solo novia de vuelta. El tiempo del chico ya había terminado, estaba apunto de pararme de la cama cuando me pidió una hora más, y está bien, no había problema, este era el último del día y más dinero no caía mal. Comencé a hacerle un oral, no se si es raro o no pero tener el miembro en mi boca era tan excitante para mí. Sentír la punta carnosa en mi lengua y como esa pequeña gota que escurría en mi lengua y me hacía chupar y lamer con más ánimo y fuerza. Mi mano jugaba en sus testículos mientras seguía chupando y se ponía duro en mi boca. Entre sus jadeos escuché que Ángel discutía con alguien, tal vez un cliente molesto. Aunque con ella lo dudo. Tal vez estaba ebrio. De pronto lo escuché más claro, era su voz. A qué venía? Creí haber sido demaciado clara con el. No paré de hacer mi trabajo. Luego escuché más murmullos y después la puerta azotarse. El chico se sobresaltó. Luego de eso el bote de basura del pasillo salió volando y se escuchó cuando cayó al suelo con fuerza.

- Creo que mejor te dejo, para que ayudes a tu amiga - se levantó de la cama y comenzó a vestirse.
- No es necesario, ya se fué
- Creo que es lo mejor - sacó el dinero de su bolsa - es lo extra
- No déjalo, no lo terminé esto va por la casa, por el incidente - le guiño un ojo.
- Por eso siempre vuelvo, y más ahora que me diste el placer de besar tus labios - me dió un último beso y salió de ahí.

Salgo de la habitación envuelta en mi bata y veo a Ángel con una cara, que ni ella se aguantaba.

- Que fue eso ?
- Tu estúpido novio, estaba como alma que lleva el diablo y estaba aferrado a entrar. Le dije que no, que tenías cliente, te juro que creí que me metería un golpe para quitarme. Pero solo se enojó y se fue - me dejé caer en el sofá - por cierto, lo del pasillo lo limpias tu - asenti y no dije nada más, no lo llamaría. No quería escuchar nada que tuviera que decir por ahora.

En mi cama [Terminada ✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora