En mi cama [Terminada ✓]

Maldita ilusa

Cómo pude ser tan idiota? Acaso creíste Allison Soto que el guapo doctor te había invitado a salir, en una velada perfecta, con una cogida espectacular el día de tu cumpleaños por qué le gustabas? . No! Claro que no. Tonta, tonta, tonta. El nisiquiera sabía que era tu cumpleaños, el solo te invitó y ya. Si hubiera Sido una verdadera cita hubiese dejado de lado la paga. Pero no lo hizo, solo fue un servicio para el.

Después de entrar a casa entré al baño. Quería quitar su olor de mi y llorar. Estaba enojada por allá haberme llenado de ilusiones y pensar que entre el y yo estaba surgiendo algo. Mientras el agua se llevaba mi maquillaje y borraba su olor de mi piel dejé que también arrastrara mi miseria y se fuera por el drenajes. Salí de la ducha y fui al cuarto. Ya había varias llamadas perdidas de el en mi teléfono. Me asomé por la ventana y aún estaba ahí su auto. Que quería? Por qué no se iba? Ni había Sido suficiente lo que le dí y la humillación que me hizo pasar? Quería que se fuera, así que le envié un mensaje:

"Deja de llamar, tengo que dormir, mañana comienzo rutina laboral, buenas noches, espero que el servicio fuera de su agrado, hasta la próxima"

Lancé mi teléfono al fondo del buró en silencio. Me puse mi pijama y m fui a dormir. Realmente no trabajaría mañana pero quería que él sintiera algo de lo que yo sentía. Luego de eso me quise dar contra la pared. Que bruta sigues siendo Ali, si no le importó hace un momento menos ahora.

Mi cuerpo estaba despierto pero mi mente quería no salir de la habitación, y por qué no hacerlo? Nada me lo impedía. Tomé mi teléfono del cajón y ví que tenía varias llamadas perdidas aún de Alex y otras cuantas mas de mamá. Creo que era mejor que llamara a ella y ver que sucedía.

- Feliz cumpleaños a ti, felíz cumpleaños a ti, felíz cumpleaños mi bebé feliz cumpleaños a ti - mis ojos se himedecieron al escuchar la voz de mi mamá.
- Gracias mami, te amo
- Ayer fue algo complicado pero quería darte tus felicitaciones
- Me hacían falta ma'
- Ven hoy a la casa, haré tu comida favorita y habrá pastel de helado con chocolate
- Esa es una exelente idea, me cambio y salgo para allá
- Si cariño aquí nos vemos
- Mamá? - le dije antes de que colgara - puedo llevar a mi compañera?
- Claro que sí , es bienvenida.

Colgué la llamada y salí de la habitación para entrar en la de Ángel y saltar sobre su cama
- Ponte lista, en cuanto termine salimos a casa de mi mamá a celebrar mi cumpleaños atrasado - no esperaba que le dijera eso pero me abrazó
- Y apenas me lo dices pedazo de animal? Cuando fue tu cumpleaños?
- Ayer, pero hoy iremos a casa de mi madre a comer, así que ponte lista - le di un beso en la mejilla y salí de ahí para vestirme y maquillar mi golpe tal cual ella lo había hecho ayer. Después de pasada media hora estaba lista, tomé mi teléfono, cartera y el dinero que tenía para mamá. Estaba en la sala esperando a Ángel, estaba ella un tanto nerviosa, dijo que tenía mucho que no convivía en familia y quería lucir lo mejor posible. Y así fué, salió de su habitación con un vestido hasta la rodilla color azul que se ceñia de una manera espectacular a su cuerpo, un saco delgado color blanco y zapatos y cartera a juego. Mierda, Ángel podría dejar de parecer una puta cuando se lo proponía.

- Dios mío - me acerco y la tomo de la mano para ayudarle a dar una vuelta - eres tan hermosa mente sexy
- Enserio lo crees? Que le agrade a tu familia? Que tú mamá lo apruebe?
- Claro que sí, mírate, luces exelente.

Pedimos un taxi y salimos de ahí directo a casa de mamá. Nos recibieron a ambas con mucho afecto. Mamá le preguntaba cosas a Ángel sobre a qué nos dedicamos. Por fortuna ya había pasado mayor parte del camino explicándole que le había dicho yo a mamá. Ella no estaba de acuerdo.

- Pero deberías decirle la verdad
- No puedo, que pensará de mi?
- Cariño pero si le dices tal vez ella se apresure a buscar trabajo y tu dejes ésta vida
- Te diré la verdad, no es tan malo después de todo - le dije sintiendo melancólica - he conocido gente muy especial para mí ahora - le tomo la mano
- Me harás llorar tonta
- No llores, es maquillaje barato el que traemos y se va a correr - ambas soltamos una carcajada. Tal vez era cierto lo que decía Ángel, pero ella prometió no decir nada. Yo por el momento seguía creyendo que esto era lo mejor.