¡Joder! ¡Nos Enamoramos!

20. Problemas, Problemas y Más Problemas. ☆

☆POV/PDV.- Angie☆

Abrí mis ojos de par en par, pude observar a Mike y a Marcus discutir. Tome mi almohada y la puse en mi cara para volver a intentar dormir.

-... te he dicho muchas veces que no vuelvas a usar mi jabón. Es algo higiénico y privado-cierro mis ojos con mucha fuerza. ¿En serio discuten por un estúpido jabón?

-Tú usas mi shampoo y yo no te digo nada Marcus.

-Es muy diferente, el shampoo es para el cabello. ¡El jabón para lavar mi puta polla!

-Sí, eso piensas idiota. Tú no te acuestas con la vieja de la secretaría para que te consiga un maldito shampoo-está bien, es suficiente, no soporto seguir escuchando. Me levanto de un salto de la cama, y Mike tiene a Marcus contra la pared a punto de golpearlo.

-Muy bien, basta de sus estupideces. No soporto el dolor de cabeza y ustedes están a estás horas discutiendo por un estúpido jabón-los dos me observan.

-Deberías callarte, es un asunto de ellos dos-sale Leonardo del baño sin camisa y con una toalla amarrada a su cintura.

-Pues sí, los dejaría. Los dejaría si está tonta discusión no me afectara a mí, pero lo hace-camino hacía él.

-Ay niña deja el drama-dice abrumado

-Volveré a dormir-frunzo el ceño.

-No deberías. Faltan 10 minutos para la primera clase-se acerca al armario y saca su uniforme. Pego un brinco.

-No me jodan-corro al baño y me encierro antes de que digan algo. Tomo una ducha rápida, cepillo mis dientes y salgo. Seco mi cabello mojado y cuando me percato la habitación se encuentra vacía. Genial, lo que me faltaba. Llegar tarde a mi primera clase del día.

Tomo el uniforme y como puedo me lo pongo, peino mi cabello y lo dejo suelto, agarro mi mochila que contenía dentro mis cuadernos, y por último no me olvido de mi teléfono. Salgo de la habitación y corro hasta el ascensor. No hay nadie en los pasillos, esto es increíble.

Presiono el botón del quinto nivel, donde Jhosh nos aviso a Iris y a mí que veríamos nuestra primera hora de clases. Cuando las compuertas se abren, lo primero que veo son los casilleros y algunos salones que ya están cerrados. Suspiro y rápidamente encuentro mi salón, pero en ese momento veo a Iris sentada en el suelo pegada a la pared.

-Veo que las dos hemos llegado tarde-rueda los ojos levantándose.

-¿No te dejan entrar?-niega-, déjame intentarlo yo.

-Está bien-me sonríe-. Por cierto te ves bien con el uniforme.

-Ay gracias, tú también. No te mentiré, pensé que sería algo así tipo como de monjas ¿Sabes?-las dos reímos. Me acerco a la puerta y la toco dos veces. Ésta se abre y aparece un señor mayor con lentes y gordo, muy gordo. Intento no reír, pero mi mejor amiga no lo intenta, ella se está burlando a carcajadas-. Ya entiendo porque no te dejaron entrar. Disculpe profesor, ¿Podemos pasar?, es que somos las nuevas y no queremos faltar a nuestro primer día de clases. Usted debería de entendernos, alguna vez debió llegar tarde a clases, ¿O no?-él me mira de arriba a bajo.

-Pasen señoritas-le sonrío y nos adentramos en aquel salón.

Las clases no pudieron ir mejor, aburridas, pero son clases. La parte del día Iris y yo nos las pasábamos haciendo tonterías, lanzando papelitos, con notas dentro de este como: "Me estoy cagando" o "Tengo hambre" . El profesor no se daba cuenta y también le lanzábamos a él, era divertido ver como se quejaba mientras caminaba de un lado a otro.

Ahora nos encontramos en la cafetería. Iris, Liam, Luke, Thess, y yo.

-Entonces, ¿En donde te metiste en toda la fiesta Luke?-preguntó Liam.

-Estuve siempre presente, no te habrás dado cuenta porque has estado muy ocupado-ríe.

-Oh sí, te puedo asegurar que muy ocupado-agregué riéndome.

-¿De qué hablan?-Thess mencionó inocente.

-¿Tan borracha estabas?-pregunta Luke mientras come de una manzana.

-No te preocupes Thess, Liam no estuvo con otra chica-sonreí-, estuvo contigo toda la noche.

-No lo sé, no recuerdo muy bien-se soba la cien.

-¿Iris?, ¿Estás bien?-Liam observa directamente a Iris, que tenía mala cara.

-Realmente no-nos sonríe-, estoy hecha un asco-a pesar de que mi mejor amiga se veía muy bien con el uniforme y su cabello amarillo suelto, su cara daba a entender que no hubiese dormido en días.

-Me imagino-susurra Luke frunciendo el ceño.

-Ya te pedí disculpas Luke-anuncia ella enojada-, no seguiré insistiendo-se levanta de la mesa y se marcha.

-¿Qué acaba de pasar?-Thess levanta una ceja sin entender. Luke suspira.

-Hablaré con ella-me levanto.

-No, iré yo-Luke se me adelanta y camina detrás de ella.

-No entiendo nada-afirmo. Observo a las personas a mi alrededor que ríen y charlan. Un grupo en específico se burlan y me miran como si fuera algo sorprendente. Soy yo o se están burlando de mí. Ja, debía de esperarse entre ellos está Leonardo- ¿Se dan cuenta de lo qué está pasando?

-¿Qué?-preguntó Thess.

-Oh sí que lo veo-afirma Liam. Me levanto de la mesa e intento caminar hacía ellos y lo último que escucho de parte de Thess es:

-¿Qué? No los entiendo-se marcha ella y Liam va detrás.

Cuando estoy justo en frente de la mesa fulmino con la mirada a Leonardo.

-Hablando del rey de roma-susurra un chico.

-Si ya me di cuenta de que están hablando de mí-miro directamente a Leonardo quien tiene una sonrisa triunfante en su rostro.

-Leo nos está contando de que el sábado tuvieron su noche especial-¿Qué?

-Espera, ¿De qué estás hablando?

-Tú y Leo, juntos, en el armario, haciendo cosas sucias.-inmediatamente frunzo el ceño.

-¿Qué?-la voz suave de Melody se escucha a mis espaldas-¿Angie?-cuando volteo lentamente ella se encuentra junto a dos chicas más, Tifanny y Camille se encuentran detrás de ella con curiosidad y con enojo a la vez-¿Cómo fuiste capaz?-alza un poco más la voz, causando que parte del comedor se fijara en nosotros.

-Melody, no es así, entre Leonardo y yo no paso nada. Bueno sí paso pero no como tu crees-dije sin saber explicar.

-Cállate-la mire en silencio, mientras a ella se le aguaban los ojos-Ámber tenía razón y yo no quise hacerle caso, tú querías meterte en mi relación con Leonardo.

-No es así Melody, para que lo tengas claro Leonardo no me interesa ni lo hará, solo nos besamos, y no tengo porque mentirte.

-Eso no es lo que dicen todos-se acerca Ámber hacía Melody.

-Tú no te metas-me percato de que Leonardo está a mi lado y mira directamente a Melody.

-Mel, no fue mi intención dañar a nadie, pero siéndote sincero ya no siento nada por ti-Se le salen las lágrimas.

-¡Eres un idiota!-grita y se aleja rápidamente. Tomo del brazo a Leonardo y lo llevo conmigo hasta el pasillo.

-¿Cómo te atreves? Sabes perfectamente que entre tú y yo no paso nada más que besos...