42. 100% Predecibles. ☆

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POV/PDV.- Angie

El timbre se escucho en toda la casa de Ryan. Él mismo fue a recibir a quien sea que estuviera detrás de esa puerta, de igual forma creo que esta tonta reunión es un tanto incomoda y un poco loca, como dije, muy incomoda y loca, de ser así es una buena manera de convivencia, tal vez es hora de que ya dejen aun lado todo su odio y rencor.

—¿Angie?—escucho la voz de preocupación de mi preciado hermano. Me pongo de pie rápidamente. Observo a Tayler caminar hasta mí, y Ryan siguiéndolo detrás de él.

—Hey, hermosa, te está buscando tu novio—pronuncia muy alto Ryan dirigiéndose hasta mí. Todos se levantan de sus asientos y solo ven a Tayler detenerse en frente de mí.

—No...—Tayler me interrumpe.

—Angie, tenemos que irnos, ¿Qué coño hacen aquí?—Tay se dirige hasta nosotras tres.

—¿Esté imbécil es tu novio?—oigo la voz burlona de Leonardo. Tay y yo volteamos a verlo al mismo tiempo, e incluso siento su mirada atravesar mis ojos. 

—¿Disculpa?—Tayler avanza dos pasos hasta él. Leonardo camina un paso y se detiene a verme nuevamente. 

—Digo, que es un idiota mayor que tú, ¿Y realmente estás enamorada de él?—me quedo en shok, pero que se cree este, Ni si quiera es mi novio, iugh.

—¡Joder, que no...—Tayler vuelve a interrumpirme.

—¿Qué tiene que sea mi novia, imbécil sanguijuela?—veo extrañamente a mi hermano, ¿De donde aprende esos tontos insultos?

—¿Qué sabes que pienso?—me acerco hasta ellos, al ver que Leonardo se le acerca mucho al rostro de mi hermano, él no se intimida, al contrario también lo amenaza con la mirada. 

Sostengo el antebrazo de mi hermano, y es entonces que decido mirar a los demás que observan la escena atentos, y le dirijo una rápida mirada a Iris, para que intenta ayudarme.

—Angie no está enamorada de ti, no te ama, así que deberías de irte muy al carajo—escucho a Leonardo, quien tiene la mandíbula tensa.

—¿Y tú que mierdas sabes si me ama o no?, vete al infierno tú, yo la amo, y la conozco mucho mejor que tú imbécil—me interpongo entre los dos, y es cuando Iris toma del brazo a Tay.

—Okey, basta, basta ya. Leonardo ¿Qué coño te ocurre?, es que no me dejas explicar—termine pero Leonardo aun no dejaba de balbucear. 

—No Angie, ¿Acaso lo que paso en el armario esa noche no significo nada?, ¿Lo qué paso en el ascensor tampoco sucedió porque quisiste? o dime, ¿Todo esto es real o es un simple juego?—Siento la mirada atenta de Tayler que me ve confundido.

—¿Armario? ¿Ascensor?, ¿Qué es esto Angie, una historia de un libro romántico y cliché de esos que te encantan leer?, No joder, no lo es. ¡Me explicas que sucedió en el puto armario!—me exige. Yo decido ignorarlo y es entonces que mis ojos se ponen llorosos.

—¿Un juego? ¿Un puto juego, Leonardo?, Dímelo tú eres el que esta encaprichado en que yo caiga a tus pies por un puto juego. Ahí está tu estúpida respuesta—me alejo de ellos, jalo del brazo a Tayler y lo saco de esa casa. Iris y Thess nos siguen.

—¿Qué estaba hablando ese tipejo Angie? ¿Cómo que "Lo que paso en el Armario"?—fingió una voz un poco más aguda.

—Cállate idiota, no quiero hablar de eso, la pregunta es ¿Qué coño hacías allí?—acentúe, el me miro obvio, yo le devolví la mirada, y es entonces que suspiro.

—Mi madre me mando a buscarte, fui a casa de Iris, y su padre me ha dicho que los ha visto entrar a la casa del Señor Rowrester, pero jamás me imagine que en ese tonto lugar, estuviera un puto pendejo que lo que quiere es tenerte—frunzo el ceño.

—Tayler, me estás faltando el respeto, jamás estaría con una persona como Leonardo.

—¿Y entonces que carajos paso en el puto armario, y en el ascensor?—ruedo los ojos.

—Fueron solo besos, y no tengo que decirte más nada. Déjame en paz Tay, y ya vamos a casa. Quiero que esta noche se acabe de una buena vez—desde ese momento caminamos hasta mi casa en un gran silencio incomodo sin palabra que decir. Estoy muy cansada, y siendo sincera, este día solo sirvió para cabrearme más de lo que puedo llegar a estar.

Lunes

Muy bien esto es muy incomodo.

¿Cuál es la posibilidad de que siete alumnos de un Instituto lleguen tarde a su primera clase de un Lunes?

¿Si existe?

Sí, eso creo, porque es lo que esta pasando en este instante, siete alumnos llegan tarde al mismo tiempo a la misma clase, creo que es un poco incomodo. De hecho muy incomodo.

Okey les cuento.

Ryan se ofreció traernos, y sí, nos trajo al Instituto, pero mejor tarde que nunca. En fin, tardamos por que Tayler no quería que me fuera con ellos, incluso se puso como un niño a hacer un berrinche de que me quería llevar él, solo para que Leonardo no estuviera cerca de mí.

De igual forma aquí estamos, al final, Tay acepto que me fuera con ellos pero a varios centímetros alejada de Leonardo, y si se preguntan, sí, Leonardo sigue pensado que Tayler y yo somos novios. 

Está bien, no quiero decirlo, pero tendré que hacerlo. No será en este momento, está claro, pero algún día y en algún lugar. 

Ajá, prosigo. Luego de que Ryan fuera a la dirección y nosotros nos dirigiéramos a nuestros respectivos salones, que llámenme loca, pero no puede ser que estemos en la misma clase y yo sin haberme dado cuenta. Nos encontramos los siete parados como unos idiotas viendo al profesor gordinflón de la clase de Historia, su voz aguda se hace presente en todo el salón.

 —Muchachos, Señoritas... ¿Saben que tienen media hora de retraso?—¿Media hora?, joder si que es tarde—Salgan del aula que ustedes no van a entrar a mi clase. 

—Profesor, disculpe, pero no creo que sea muy conveniente, déjenos entrar, y luego hablaré con mi padre—interfiere Ethan. El profesor lo para en seco con su mano levantada y responde con voz atorante.

—A mi jamás lograrás manipularme Thompson. Ahora salgan, y el Director me ha pedido que tú y la Señorita Henderson limpien la cafetería—señala a Ethan y a mi amiga. Él se queda estupefacto y entonces él es el primero en salir del aula. 

Luego le seguimos todos. Esto se puso más serio.

Primera clase del día la hemos perdido por culpa de mi hermoso y sexy hermano, fascinante, es tan predecible.

Sí. 

Digamos que somos un 100% Predecible

¡Joder! ¡Nos Enamoramos!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora