ɱเ รεcɾεƭσ (Final)

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-ahh!!! ¿Que debo hacer? Maldita sea! - replicaba el limeño con desesperación

Perú había quedado en coma , sus hermanos seguían muriendo y aún él no encontraba la manera de salir de todo esto, había asumido la responsabilidad de todo un país sin tener la suficiente preparación y no estaba listo para todo lo que tenía que afrontar , por suerte había  resuelto algo...

ONU por fin lo había dejado en paz con eso de entregar la Quina , China descubrió otra cura y eso fue un alivio para el de bandera amarilla .

Los toques de queda habían vuelto , el terrorismo también, juntándose con el coronavirus , las calles ya no eran seguras y no podía permitir que algo le pasase a sus ciudadanos,  bueno , los que aún no morían.

✿◉●•◦

-d-debo salir de aquí...- decía decidida pero adolorida la Venezolana, escabulliendose entre las puertas cerradas y librándose de las cuerdas que la sujetaban ¿en qué momento esto se convirtió en una tortura ? Desde cuando Argentina se convirtió en quien es ahora? No quería responder esas preguntas en ese momento.  Si se quedaba allí un día más,  uno solo, estaba segura que acabaría muerta o a punto de hacerlo.

Los suspiros de cansancio se escuchaban en su respiración agitada , la adrenalina y nerviosismo corría entre sus venas y la emoción se notaba en su mirada al estar cerca de la salida de aquel calvario que antes era su hogar , con lo último de fuerzas que quedó en su cuerpo , corrió lo más rápido posible , hasta llegar a ella para intentar forzarla , si , aquella cerradura se mantenía con seguro durante todo el día para evitar que la chica escape .

Con emoción empezó a sacar una por una las llaves , esperando que alguna de ellas sea la correcta pero...

- ¿a donde pensás ir ?- se escuchó detrás de ella con aquel acento que Venezuela ahora le temía demasiado , un pavor increíble que cualquiera pensaría que toda la vida la tuvo atormentada ...

<<Vene , mi padre necesita tu ayuda >>

Escucho detrás de ella aquella voz de una jovencita de más o menos 15 años de edad , al mirar a sus espaldas pudo ver a la adolescente Tumbes mirándola fijamente y con ojos desesperados suplicantes por auxilio  ... ¿cómo había llegado allí?

♥●•٠·˙

El mexicano se encontraba en aquel sótano,  aquel oscuro lugar , el tricolor no sabía en qué maldito momento había llegado hasta allí, todo su ser tenía,   lo que al parecer eran marcas de cadenas las cuales habían golpeado su cuerpo hasta dejarlo inconsciente, sus ojos cerrados que daban a entender que no había soportado el dolor y cayó rendido del desmayo en un momento de aquel encierro .

Su cabeza estaba baja , sus brazos abarrotados a la silla en donde se situaba sentado, sus piernas se aderian a las patas de aquella estructura de madera , y una mordaza en su boca , era lo último que evitaba que pida ayuda o que escapase.

Al pasar unos minutos , se acercó a él alguien , los pasos retumbaban en aquel lugar aparentemente vacío, aquellos pasos que el mexicano pensó haberlos escuchado antes.

La voz grave que lo despertó por aquel susto que le daba , retumbó en sus oídos y por ende es su cerebro , haciendo estremecer su cabeza y agudizar el dolor que ya tenía,  mientras con las cejas inclinadas , que trataban de que no se mostrase débil intentó sacarse la mordaza .

-ni lo intentes ... "mejor amigo"'- se escuchó en frente de él , resaltando las últimas dos palabras con evidente odio o al menos rencor . Acercó su rostro al contrario , anotándose sus facciones para luego quitarle la mordaza de golpe , rasgando algo su cara .

- ¿P-peru? ¡¿C-como?! - mostrándose asombrado ante lo que pensó al escuchar y reconocer su voz y ver la bandera  - ¡tu estabas en coma!- no podía entender nada , literalmente , lloró el estado de su amigo, lamentó no poder hacer nada por él, incluso le pidió a ONU que haga algo más,  esto era simplemente imposible .

s-solo te preguntaré algo ...- detuvo su voz unos segundos para acercarse peligrosamente a el tricolor, mostrando sus ojos totalmente oscuros y las grietas en su rostro que delataban algo totalmente frívolo en su alma .

- ¿por qué eliminaste al amor de mi vida?- tomando de su camisa con total odio diciendo las palabras en voz retumbante para el de sangre azteca .

Sus ojos blancos se abrieron totalmente al escuchar las palabras del blanquirrojo, no sabía como, pero se había enterado .

- n-no fui yo! A-a mi solo me pagaron Perú- tartamudeo es lo único que salio de su boca al ver como este se acercaba aún más, haciendo que de sus ojos abundar aquel líquido negro que hizo resaltar sus grietas de corrupción,  mientras que el verdadero dolor empezaba a brotar de su cuerpo.

Al despertar de aquella pesadilla , se apretó fuertemente el pecho.  Mientras miraba al frente suyo,  por haberse levantado de golpe sentado, miró a su lado, encontrando a Rusia durmiendo junto a él, botó un suspiro de alivio  mientras tomaba su celular para hacer una llamada , a esa hora , 1:30 am .

-Japon... debemos hablar de ... "tu encargo"-

En la otra línea telefónica, escuchaba atenta la Japonesa ante cada una de las palabras del tricolor norteamericano , la cabeza le dolía, demasiados problemas en ella , más no quería dejar ese asunto sin resolver.

-NO ME IMPORTA TUS REMORDIMIENTOS DE CONCIENCIA MÉXICO!!  Te quedas callado ,por que te quedas callado  ¡¿ok?!- sin más,  colgó la llamada demasiado alterada , su dolor de cabeza aumentaba, la conciencia retumbaba en su mente , pero no podía hacer nada , si aquel mexicano hablaba , todo su trabajo de iría al tacho, eso no era nada bueno, mucho menos con la alianza que tenía ahora....



UK



ஜ۩۞۩ஜ

-¿¡QUE MIERDA PIENSAS HACER?! Q-QUE TE PASA TAHUANTINSUYO?!!- replicaba horrorizada aquella chilena , al ver aquella imagen de la emperadora incaica frente a ella , aquella señora de ojos vacíos,  agrietados y sangrantes , no parecía ser la misma . El terror recorría todo su ser , la amenazaba con una lanza hecha de oro puro, mientras sus grandes alas negras se hacían visibles ahora.

- Es hora de Nuestra Venganza Chile...-

Alzo aquella lanza a la altura de su sien ,manteniendo la punta a la altura de sus ojos , mientras la chica de parche miraba atónita todo lo que ocurría,  viendo como la tahunitense bajaba sus brazos bruscamente , introduciendo de golpe aquella filosa punta de oro en su vientre.

La chilena dio un quejido de dolor al sentir aquella arma perforando su cuerpo, al mismo tiempo que su ser se llenaba de un aura oscura reflejada en su agrietado cuerpo .

-este no es el fin... es solo el inicio de mi nueva vida , de mi venganza, de poner a prueba... mi sangre blanquirroja-



Próximamente:

Sangre blanquirroja
El secreto de Perú 2

Solo en wattpad , también en 3D

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