"El pasado no es lo que todos suponen"

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PV Carlos

Había estado dejando rosas de vez en cuando en la puerta de Alek, al ser sus flores favoritas, su rostro siempre se ilumina cuando las recibe... Pero, quizá pronto comenzaría a investigar quién las ha estado dejando y la sola idea de que crea que es Sparrow quien lo hace me revuelve el estómago, así que decidí parar un tiempo.
Últimamente me sentía raro, escuchaba una voz extraña... Un canto cada qué intentaba conciliar el sueño por la noches... Cosa que no pasaba desde que era un niño y esta noche creo que no será diferente, justo cuando mis ojos comenzaban a rendirse ante el sueño, ese canto apareció en mis oidos.
- Qué... Qué!?- me levanté de golpe al escuchar ese canto, mi movimiento asustó a Chico haciéndolo despertar de forma brusca y el grito de Chico a su vez, despertó a Jay.
- Hey... Por qué están haciendo tanto ruido?... Son... las 2:00 de la mañana...- dijo Jay adormilado mirando su reloj.
- Lo siento Jay, Chico... Es solo que creí escuchar algo...- dije acariciando las orejas de mi peludo amigo y mirando a Jay con algo de culpa.
- Qué escuchaste Carlos?- me preguntó Chico acomodándose en su pequeña cama de nuevo.
- Bueno... Hace días que escucho un canto... Justo en la hora de dormir y a veces durante el día...- dije suspirando algo cansado.
- Una voz? No te había escuchado decir eso desde hace años... En la isla- respondió Jay mirándome desde su cama.
- Lo sé, poco antes de venir a Auradon deje de escucharla... Pero... Desde hace unos días apareció de nuevo...- dije tirándome en mi cama y cubriendo mi cara con la almohada.
Después de eso no nos quedó más remedio que volver a dormir... en mi caso, intentar dormir. Afortunadamente pude conciliar el sueño algunas horas, ya no escuché la voz, pero el sueño se me había espantado y mi cabeza no dejaba de pensar en Alek y en el hecho de que Sparrow estuviera merodeandola, así que no me percate del momento en el que caí rendido.
Parecía ser que me había quedado profundamente dormido, ya que en ningún momento escuché mi despertador y lo que me hizo abrir los ojos fue un almohadazo por parte de Jay.
- Hey!!!- grité al sentir el golpe de la almohada en mi cara.
- Carlos, vas a llegar tarde a clases y al entrenamiento también si no te alistas ya- decía Jay tomando su maleta del gimnasio.
- Qué?... - miré el reloj y efectivamente era tarde.
Como pude me levanté de inmediato y me aliste lo más rápido posible, tomé mis cosas y salimos corriendo de la habitación.
La primera clase del día la tenía precisamente con Alek, pero con ella estaría ese entrometido de Sparrow... para mi fortuna, Evie también estaría ahí.
- Carlos! al fin llegas, un poco más y el profesor no te habría dejado pasar... - decía Evie haciéndome espacio para sentarme con ella.
- Me quedé dormido E... No tuve una buena noche - respondí.
La llegada de Alek y Avan interrumpio mi plática con Evie... En verdad ese sujeto parecía una sanguijuela pegado a ella.
- Buenos días chicos- saludó Alek.
- Buen día, Alek- respondí levantando la mirada para verla, topandome con esos preciosos ojos turquesa que solo ella posee, mi corazón latio igual que la primera vez que los ví con atención... Su mirada también se había quedado clavada en la mía por unos segundos hasta que...
- DeVil! Buenos días...- dijo Avan interponiendose entre nosotros, con ese molesto acento pirata.
- Sparrow... - hice un pequeño gesto con mi cabeza en forma de saludo, bastante forzado.
- Princesa, podrías prestarme las notas que me prometiste?- decía Avan tomando la mano de Alek.
- Cierto, vamos a sentarnos.... Nos vemos en un momento chicos- dijo Alek sonriendo de forma inocente.
Sentí que me hervía la cabeza en ese momento.
- Carlos, cálmate... Recuerda que...- decía Evie en voz baja.
- Sí! Sí... Lo sé... Debo controlarme o todo podría descubrirse...- bufé acomodandome en mi silla.
Evie tenía razón, eso lo sabía perfectamente, sin embargo... Cómo pedirle a mi corazón que se cierre?... Ahora, entendía perfectamente lo que Alek sufría anteriormente.
El profesor llegó y la clase transcurrió como de costumbre. De vez en cuando miraba a Alek de reojo, podía botarla algo distraída, Avan murmuraba a su lado, pero ella parecía no prestarle atención del todo.
- Entonces, para la siguiente exposición necesito que se junten en equipos de dos personas para trabajar- dijo el profesor.
Sus palabras me sacaron de mis pensamientos y de inmediato miré a Evie, ella pareció leer mi mente y de inmediato, antes de que Avan dijera algo se levantó de su asiento...
- Avan! Hagamos equipo tú y yo!- dijo Evie caminado hasta el lugar de Avan y Alek.
Sparrow solo la miró algo inseguro y soltó una leve risita con cierto sarcasmo.
- No hemos tenido mucha oportunidad de convivir y como consejera de Ben, me gustaría conocerte un poco mas- añadió.

Helado Corazón ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora