Desconocido.
Hola JiMinie, soy JK
Me puedes dar tu dirección para pasar por ti a las 5:00pm, iremos a comer lo que tu quieras y luego iremos a la feria.
Desconocido
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Minnie
Si, no tienes que pasar por mi, nos vemos en el parque que esta cerca de la universidad y gracias por dejarme elegir la comida, te espero.
El corazón de JiMin se volvió acelerar, cualquiera que los viera diría que van demasiado rápido para apenas conocerse, el problema es que ellos no sentían lo mismo, al mirarse a los ojos lo único que sentían era como si supieran más del otro que de si mismo.
JiMin entró a su casa con una enorme sonrisa, su madre se encontraba descansando en el sofá después de haber barrido toda la casa.
Pero algo paso en ese momento, recordó algo en especial; un nombre.
— JiHyo. — Hablo sin saber por qué.
— ¿Quien es JiHyo?. — Pregunto coqueta. — ¿Conociste a una chica?. —
— ¿Quien es JiHyo?. — Volvió en si.
— No lo sé, tu lo has dicho. — Se levantó del sofá.
— No importa lo que allá dicho. — Se tallo la cara. — Mami me dejas salir a la feria. — Suplico.
— Ve pero con mucho cuidado. — Advirtió. — Y no regreses tarde. — Sonrió mientras le acariciaba el cabello. — Me alegra que estés otra vez conmigo, te extrañe tanto mi niño. — Le acarició el rostro.
— Es extraño estar de regreso. — Sin pensar empezó a llorar. — Creo que mientras estaba en coma cree mi propio mundo. — Sus lágrimas caía en montones. — Me duele haber despertado. — Su madre le abrazo.
— Mi pequeño. — Tallo su espalda. — Si creaste tu mundo yo te ayudare a enfrentar tu realidad. — Susurro con delicadeza.
— Gracias mamá. — Trato de quitar sus lágrimas. — Así se llamaba mi mamá en mis sueños, se llamaba JiHyo. — Confesó.
— Era probable que tuvieras un sueño. — JiMin se separo.
— Se veía tan real. — Quito más lágrimas.
— Lo se hijo, pero esta es tu realidad. — El menor observó y suspiro.
— Si mamá. — Sorbio por la nariz.
— Ve a cambiarte y después ven a comer. — Le dio una ultima sonrisa y el asintió para después irse.
JiMin sintió alivio al haber dicho eso, el sentía que tenia muchas cargas sobre el y esa había sido una que ya estaba liberada.
Se cambio la ropa, uso una ropa sencilla para comer rápido, quería bañarse otra vez y buscar una ropa para verse bonito.
Camino hasta donde estaba el comedor, no le extrañaba que su padre no estuviera pues en su sueño se había acostumbrado a estar sin su padre pero si se sentía incómodo por su madre, ya que su mamá en sus sueños no estaba, los dos estaban ocupados en su trabajo.
— ¿Qué más recuerda en tu sueño?. — Hirai pregunto al momento de poner el plato frente a JiMin quien ya estaba sentado.
— Mi padre se llamaba KiBum. — Miro la comida con nostalgia.
— KiBum y JiHyo casi nunca estaban en casa. — Una imagen de ellos apareció en su mente.— Entonces ¿estabas solos?. — Ahora ponía su plato.
— No, creo que no. — Tomó la cuchara para empezar a comer sopa. — Creo que había alguien ahí. — Trato de recodar.
— No te lastimes recordando. — Tallo su espalda. — ¿Viste la libreta donde anote lo que dijiste mientras hablaba?. — Pregunto y el otro asintió. — Tal vez eso fue parte de tu sueño, pues yo las veía y no entendía. —
— Yo tampoco. — Tomó más de su sopa.
— No te tortures con eso, disfruta tu comida. — Sonrió.
El otro sonrió pero le pesaba hacer esto, procedieron a seguir comiendo sin ninguno decir otra palabra, JiMin término primero y entonces lavo su plato.
— Me iré a bañar. — Aviso.
— Espera un poco a que se te baje la comida. — Advirtió.
— Si mamá. — Y con eso en mente se fue a su cuarto.
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Te encontré
FanfictionLibro 4 - Destinados. Los ojos ciegos se acabaron para JiMin y JungKook. Tuvo que pasar algo fuerte para poder darse cuenta de que se tenían y se habían encontrado uno al otro, aunque desearían no a ver sido tan ciegos pero eso ya no importa, para e...