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Y como habían dicho antes el grupo de amigos se habían puesto de acuerdo para poder ir a la playa todos juntos, hoy era un día muy hermoso o al menos eso se veía que seria, eran las siete de la mañana y todos estaban metidos en el carro de JungKook a pesar de que TaeHyung era el que manejaba.

Todos iban sonriendo, cantando las canciones que ellos mismo ponían a través del reproductor inteligente de este carro.

De pronto se reprodujo una canción de México que ya tenía muchos años desde su primera aparición, algunos se sabían la letra y algunos no.

— Voy a presentarte a Teresa. — Todos iniciaron cantando dramáticamente. — La que se duerme en tu cama, la que es toda una dama, la que no te pide nada pero le gusta lo mejor. — Después de eso todos empezaron a reír.

Estaban apunto de seguir con la canción cuando de pronto Tae apagó el reproducir.

— ¡Oye!. — Le gritaron todos.

— Lo siento, es que ya llegamos. — Sonrió inocentemente.

Y por arte de magia a todos se les paso el enojo, abrieron las puertas del carro para poder salir corriendo de ahí pues querían respirar el aire puro.

— Primero vayamos a comer. — Opino Baek.

— Si, ya tengo hambre. — TaeMin hizo un puchero.

— Vamos a buscar algún buen restaurante. — Observó Jung a los lados.

— Miren allá. — JiMin hizo que todos miraran hacia donde el señalaba.

A todos les brillaron los ojitos al ver esa bandera con los colores verde, blanco y rojo.

— ¡Comida mexicana!. — Gritaron todos con felicidad.

Sin más corrieron hasta donde ese restaurante estaba, al llegar ahí vieron que este restaurante estaba decorado con muchas cosas que hacían referencia a dicho país.

— Woaw. — Admiraron a la par en la que observaban todo.

— Hola buenas tardes. — Llegó un chico de apariencia mexicana. — Mi nombre es Ivan y seré su mesero. — Sonrió.

— Eres mexicano ¿verdad?. — JiMin le pregunto sonriente.

— Si lo soy. — Río.

— Woa hablas muy bien el coreano. — Halago.

— Gracias, aún lo estoy perfeccionado. — Sonrió.

— Nos vamos a quedar aquí parado o que. — Dijo JungKook con cierta molestia y ironía.

— Oh perdón. — Se disculpo. — Pasen por acá. — Empezó a caminar para que el grupo de amigos le siguieran.

Todos se movieron hasta dicha mesa, donde se sentaron con cierta tensión pues todos menos JiMin habían notado el seño fruncido de Kook.

— Ya Kook, lo vas a matar con la mirada. — Le susurro Lisa a Jung.

— No están haciendo nada malo. — Negó Baek con la cabeza.

— Baek tiene razón. — Dijo TaeMin.

— A ver JeonKim venimos aquí para divertirnos, no para que estés de posesivo con tu prometido. — Mostró su dedo anular. — ¿Escuchas eso?. — Pregunto. — Tu prometido. — Tae dijo esto siendo obvio.

— Ustedes que van a querer. — JiMin se encontraba viendo el menú. — ¿Qué me recomiendas Ivan?. — Pregunto sonriente.

— Te recomiendo las picadas de salsa roja con carne de chinameca. — Le señaló la pequeña foto que había en el menú.

Te encontréDonde viven las historias. Descúbrelo ahora