Los rayos de luz entran por la ventana, miro hacia afuera y el mar azul combinado con el atardecer, hacían de Santorini un lugar de ensueño.
Cierro los ojos evitando contener las lágrimas y la sonrisa más amplia que puedo tener se adueña de mi rostro.
Siento que mi mente me lleva a un viaje por el pasado, a todo lo que he vivido, las alegrías, las tristezas, los fracasos, las decepciones, todo pasa por mis ojos en tan solo minutos.
No existe rencor, no existe odio y no existe tristeza.
Un capítulo nuevo comenzaba y estaba emocionada porque así fuera.
Rui ya no dolía, ya no existía ese amor que alguna vez tuve por él, mi corazón estaba sano otra vez y el amor se adueñaba de él de nueva cuenta, volvía a llenarse del amor que existió hace años, volvió a recuperar a su dueño, Cristiano.
Siento como sus manos recorren mis hombros, como sus labios dejan un pequeño beso en mi hombro.
Prometí no llorar, pero las emociones eran más fuertes que yo.
Las horas pasan en esa pequeña habitación, las lágrimas ahora eran de felicidad y el destino me trae hasta aquí, no necesitaba huir, no necesitaba a nadie más que no fuera él.
Doy media vuelta observándome en el espejo, muerdo mi labio inferior para no llorar, un vestido hermoso, color blanco, estaba en mi cuerpo, ahora, es el día más feliz de mi vida y no podía pedir más.
Las mujeres se vuelven locas, terminan de acomodar mi vestido, de peinarme y de controlar las lágrimas.
Mamá no dice nada, está feliz y yo también.
No estaba siendo "vendida" estaba recuperando mi vida.
Salgo de la pequeña habitación, el atardecer es mágico, mis zapatillas resuenan y entonces él está ahí.
Hago lo posible por no llorar, pero al verlo a él haciendolo, no lo puedo evitar. Ambos nos miramos y es imposible no contenerlos, nuestras madres nos obsequian un pequeño pañuelo, entonces es cuando me doy cuenta de que para estar viviendo este momento mágico, tuve que pasar muchos obstáculos.
La ceremonia culmina y ambos sellamos nuestro amor, un amor que se siente y que no es atado, que no es un compromiso.
Un amor real.
Y sin más, me toma entre sus brazos, dejandonos guíar por la música instrumental, solo existimos los dos en esa burbuja, solo los dos y nadie más.
—Gracias Andreia. Mi meta en esta vida, es hacerte feliz día a día, cuidarte y protegerte, pero sobre todo, amarte en esta vida y en las que siguen.
—Te amo.
Y es el "te amo" más sincero que he dicho en mi vida y que más lo he sentido.
Dos palabras que me hacen llorar y sentir miles de cosas dentro de mi ser.
—Te amo y sé que soy feliz porque cada día haces que sea diferente al anterior.
Y el beso que todos esperan se consume frente a la puesta de sol, llenando el momento de magia que no se compara a nada en la tierra.
Y entonces no hay nada ni nadie que separe este vínculo de toda una vida.
Y la palabra vendida, perdió significado.
Fin
Solo quiero agradecer a todas las personas que leyeron y votaron en esta historia, que se tomaban la molestia de comentar y esperar pacientes a qué actualizara. Espero hayan escuchado la canción ya que me inspiró bastante para este capítulo y porque sale en la película de Cristiano 🤭 de verdad solo tengo palabras de agradecimiento y no olviden pasar a mis demás historias.
Salu2 🙌🏼🌚