17. Still Learning

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Yoongi no pudo estar más que feliz.

Dio un paso en su departamento y fue a pedirle perdón a Holly quien estaba dormida en su camita. Yoongi por lo menos le había dejado un poco de agua y comida. De cualquier forma le prometió que no volvería a pasar, aunque su mascota no lo estaba escuchando.

Pero no pudo quedarse más tiempo porque debía apresurarse si quería llegar a tiempo al trabajo. Tuvo que correr en busca de ropa y una ducha rápida, dejando para el final tomar un vaso de leche y tomar una manzana y claro que dejarle comida a Holly para cuando despertara. 

En menos de quince minutos dejó dejo su casa antes de dirigirse a su trabajo. 

Recibió un par de llamadas pero las ignoro, pues estaba ya a nada de llegar. 

Cuando entro sus amigos ya estaban en sus respectivos lugares, ambos lo saludaros emocionados. Hoseok aún con el teléfono en su mano, haciendo notar que era él tras las llamadas.

—Este es el hyung que yo conozco. —Hoseok casi estallo en risas. —Al fin llegas después de mi, ¿qué paso con tu puntualidad perfecta?

—Solo me he quedado dormido eso es todo.

—¿Con quién? —pregunto curioso Jungkook, aguantando a no soltar una risa.

—¿Eh? ¿Qué dices?

—Hyung, no quiero ser esa personas pero tengo que serlo. —el menor se levanto, dio dos pasos hasta quedar frente a él, remarcando esos centímetros de diferencia. —Tiene una marca, aquí. —su indice fue a parar a su cuello.

Yoongi era demasiado pálido para su propio bien.

Sus mejillas se encendieron de inmediato. Las puntas de sus orejas hicieron un lindo conjunto también.

—Yo...

—Hyung, esta bien. —Hoseok le sonrió. —Estoy feliz de que estés viendo a alguien. ¿Hace cuanto?

—Nos hemos visto muy pocas veces, no sé...

—Tranquilo, ya nos podrás contar luego. —Jungkook sonrió bonito antes de volver a su lugar.

—Es Seokjin. —no pensaba decirlo, pero odiaba ocultar cosas y eran sus mejores amigos, ¿no?

Ninguno dijo nada por unos segundos, Yoongi bajo la cabeza no sabía que reaccionar esperar, buena o mala, la recibiría pero ni siquiera se había planteado la situación, la paranoia iba a poder con él y no estaba seguro de que eso le hiciera bien.

—¿Seokjin? ¿Es el mismo que yo conozco? 

Por su puesto que lo conoces pensó Yoongi, no es como si el solo le hubiera lanzado un nombre al azar cuando sabían perfectamente que él no era de conseguir amistades a diestra y siniestra. Yoongi estaba ya por solo dejarlo pasar y no decir nada más.

—Mientras estés feliz, me alegro hyung. —su dongsaeng le sonrió mostrando sus dientes como un conejito. 

—Es un chico agradable, de las pocas veces que pude conversar con él. —Hoseok lo miró con una sonrisa. —Honestamente nunca lo vi actuando como lo hace contigo, es casi personal, ustedes se ven bien juntos. 

—¿No crees que sea raro? Digo, él me gusta pero...

—Hyung, no pienses mucho en ello, entiendo que no es una situación muy común que digamos, su trabajo puede no ser como el otros pero no es un mal chico, si las cosas deben darse se darán. Tu solo puedes disfrutar el momento. Jungkook tiene razón. —los ojos de Hoseok brillaron. —Si estas feliz, yo también me alegro por ti. Hace mucho que no te veías así, tus ojos brillan.

Yoongi quería bajar la cabeza, se sentía como un adolescente. 

Se sentía bien.

—¿Lo verás pronto?

—No lo sé, quiero hacerlo.

—Deberías llamarle.

—No tengo su número.

Jungkook casi se ahogo con el agua que estaba tomando. —¿Qué?

Hoseok soltó una carcajada. —Bien, señor Min Yoongi, debemos tener el número del chico primero si queremos que esto funcione. 

Yoongi asintió. Era como si aún siguiera aprendiendo.

Era como un adolescente y distraído para variar.


*

*

Hola, Cherry aquí dejando otro capítulo de esta historia.

Que espero les guste, gracias a sus comentarios y votos es increíble que ya casi sean 500.

Gracias por seguir leyendo mis historias.

¿Qué creen que pase?

Amo leer sus comentarios y teorías.

No duden en dejarlos.

Nos leemos pronto.

-Cherry.

fighting. 



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