·Long Time No See~ Suga- T/N

Viaje y temas absurdos

¿Por qué no regresaba?

Eran casi las 12:30 y teníamos que ir a la estación, nuestro tren salía en una hora. No estabamos tan lejos pero empezaba a desesperarme.

Simplemente salió y dijo que volvería a tiempo, pero eso fue hace 3 horas.

¿¡A donde diablos te fuiste Yoon-gi?!

Ni siquiera tenía su número ¿debería pedírselo a Tae? Sería muy raro que lo hiciera de repente pero ya me inventaría algo.

Entré a whatsapp y entonces recordé aquel grupo al que fui agregada, busqué su contacto y lo llamé. Al tercer pitido contestó.

Yoonnie: ¿Diga?

Yo: ¡¿En donde carajo estás Min?!

Yoon-gi se quedó en silencio mucho tiempo, incrementando mi enfado.

Yoonnie: Disculpe número equivocado

Yo: ¡NO TE ATREVAS A COLGARME! 

Yoonnie: ¿Yoon? ¿eres tú?

Yo: ¡CLARO QUE SOY YO! ¡¿EN DONDE DIABLOS ESTÁS?! ¡TENEMOS QUE IRNOS YA!

Y entonces, la puerta del departamento se abrió, Yoon-gi entró y me miró asustado, cargando unas fundas en sus manos.

Yonnie: ¿Estas bien?

Lo escuché por ambos lados

Colgué la llamada y solté un suspiro. Agarré el mango de mi maleta y comencé a caminar hacia la salida, Yoon-gi había dejado sus cosas cerca de la puerta por lo que ni siquiera entró.

Una vez fuera este me miró temeroso, como esperando por mi reacción. Resoplé porque en serio parecía asustado.

-Perdón, me alteré.

Arqueó una ceja, aún desconfiado

-¿Tú crees?.- entrecerré los ojos y este rió.- ¿De donde sacaste mi número?

Comenzamos a caminar hacia el ascensor

-¿Seokjin y los otros 5?.- su boca se abrió, comprendiendo.- Por cierto, que bien te quedaba el cabello rojo.

Ladeó su cabeza.- ¿Cómo sabes que tenía el cabello rojo?.- arrugó los labios pero luego pareció entender, sobresaltándose.- ¿Viste las fotos, Yoon?

Ahogué una risa.- ¡Ja! Fuiste mi salva pantallas en mis primeros días de clase, si no me asusto no me levanto.

Me miró de reojo furibundo, después desvió la mirada hacia la funda que llevaba en su mano y empezó a murmurar cosas inentendibles.

-Por cierto ¿a donde fuiste? ¿tenías que comprar algo?.- apunté con mi mentón a dicha funda y este de inmediato la guardó en su bolsillo. Parecía funda de una farmacia ¿tal vez estaba enfermo?

No dijo nada y en ese momento llegamos al ascensor que estaba abriéndose, saliendo de él un par de personas y quedando cierto señor que se había dado a la fuga todo este tiempo.

-Buenas, señor Kim.- dijimos Min y yo al mismo tiempo.

Cruzamos miradas y nos quedamos ahí frente a la puerta, cruzados de brazos. Bueno él, yo no.

El dueño puso cara de que se le salió el alma por la boca, intento retroceder pero no tenía a donde. Se aclaró la voz y fingió calma, poniendo las manos detrás de su espalda.

-Buenos tardes jóvenes ¿se dirigen a algún lado?

-Sí, vamos a ver a la señorita Chou.-respondí en seco, el señor Kim tragó grueso.