Estaré ahí si caes.

Capítulo 1.

Me levanté a las 7:00 am apagué mi alarma, como siempre otro bendito día de escuela, genial. Me habían transferido a la escuela de mi hermano y justo a la mitad del semestre, al parecer era la típica chica problema, me expulsaron o como ellos dicen me dieron una "oportunidad" para que me cambie de escuela, lo único que hice fue defenderme. Mis padres estaban separados; mi mamá era una empresaria y no paraba en casa, es decir gracias al trabajo viaja mucho y yo me quedaba sola, ya estaba acostumbrada siempre tomar el desayuno con Fernanda, mi "niñera" si se le puede llamar así; ella veía que yo estuviera bien, le avisaba a mi mamá sobre "todo" aunque no exactamente ya que cuando le hacia la carita de perrito me dejaba hacer fiestas.

Estaba perdida en mis pensamientos hasta que mamá toco la puerta de mi habitación.

-Hannah puedes bajar ya! Tienes que desayunar o llegaras tarde en tu primer día- dijo seriamente, ni siquiera se preocupaba como he estado; no me veía hace semanas, no me quedaba de otra que responder como siempre con la voz "de la niña dulce" odiaba tener que fingir esa dulzura cuando estaba ella.

-Si mamá ya voy, me termino de alistar y bajo- mentí, lo único que me quedaba hacer siempre; no me gustan las mentiras pero a veces tengo que hacerlo.

Cuando escuche a mi mamá alejarse corrí y me di la ducha mas rápida que pude, al salir me puse unos vaqueros negros rasgados, una remera blanca y unos tenis negros.

Baje lo mas rápido posible y escuche a mi mamá discutir por teléfono aunque no podía entender muy bien, me senté en la barra para tomar mi jugo de fresa con mis quesadillas.

-Uuuhhhmmm Fer las quesadillas te quedaron deliciosas, ¿Tú ya comiste? -pregunté pero me distraje viendo a mi mamá; Fernanda siguió mi mirada y me llamó silenciosamente.

-Hannah la señora Daniela esta que discute con Mark, creo que se trata de tu hermano-dijo pero antes de que le pudiera responder se marchó ya que mi mamá entraba a la cocina. No podía dejar de pensar en que mi mamá y papá discutían por Max, que habrá hecho mi hermano esta vez, termine el desayuno y coloque mis servicios en el fregadero cogí mi skateboard
y mi mochila; iba a llamar a mi mamá para que me lleve a la escuela cuando sonó el claxon mire por la ventana y era mi hermano ¿que hacia aquí? no es que no me agradara su compañía peeeero, nunca venia temprano.

-Hannah tu hermano vivirá con nosotras, tuvo problemas con tu padre, hoy el te llevara a la escuela- dijo fríamente, al ver a mi hermano ni una sonrisa se formo en sus labios, no podía creerlo ¿Es que ella no sentía nada? No lo ve hace años y no se porque; no se que mas esperar de mi madre. Salí corriendo y abrace a mi hermano con mucha fuerza.

-Hola hermosa - dijo sonriendo - has crecido aunque sigues mas pequeña que yo - curvó sus labios sacando una sonrisa tremenda.

-Oye, no soy tan pequeña tu mides 1,83m ok, aparte eres 2 años mayor que yo y voy en algunas clases contigo - dije burlona y le empujé graciosamente la barriga.

-Eres una cerebrito, jajajaja- rodé los ojos al escuchar eso; siempre me decía lo mismo, cuando miro el carro me di cuenta que había alguien ahí Max lo noto - ah por cierto el es mi amigo Jake, Jake Bieber; iremos con el a la escuela... ¿No te molesta verdad?.

-No para nada, ¿es que acaso no me lo vas a presentar?- dije sarcástica y le di una sonrisa Jake que me miraba desde el interior del carro- Ah por cierto ¿Qué ha pasado con papá?, lo oí discutir con mamá esta mañana - al escuchar esto tensó su mandíbula.

-¿Mark estuvo aquí?- dijo nervioso y empezó a mirar a la casa.

-¿Ahora le dices Mark a papá? ¿Tan malo fue?- respondí burlándome; se que estaba mal pero tenía que ponerle humor antes que el se pusiera histérico- No te preocupes solo discutieron por teléfono.