The Pirate 🏴‍☠️ [l.h] PAUSADA

𝑐𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 6

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Luke y Anton caminaban tranquilamente camino al estanque de agua cristalina, el menor un poco nervioso no dejaba de mirar a su alrededor, como si el animal solo se fuera a aparecer de repente.

-Relájate un poco Anton, si estuviese cerca lo escucharíamos venir.

-No estoy muy seguro de eso ¿sabes?, hace rato apareció de pronto.

-Más a mi favor, ya comió.

-Si, pero, ¿que si solo nos mira y le dan ganas de asesinarnos?-preguntó sin alejar la mano de su espada, preparado para sacarla en cualquier momento.

-Si ese es el caso, entonces solo lo confrontamos, somos piratas ¿lo olvidas acaso?-el menor negó.-No le tememos a nada.-dijo con una sonrisa ladina.-Ademas ya estamos cerca y no nos hemos encontrado nada más que insectos y aves.

-Vimos una serpiente comiéndose un ratón.-puntualizó el castaño, Luke se encogió de hombros.

-Se veía ocupada como para prestarnos atención, así que no te preocupes por eso Anton, seguro que de regreso ya se habrá ido.

-Eso espero.-murmuró balanceando su mano, con ello las cantimploras comenzaron a moverse de un lado a otro.-¿Por qué traes un vestido?-preguntó curioso.

-Ah, eso...-murmuró sin dejar de mirar al frente.-Que te importa.

El menor se encogió en su lugar, ocasionando que el rubio riera.

-Estaba jugando.-obvió.-Me encontré con una mujer aquí ayer y le he traído un vestido para que pueda usarlo, el suyo está destruido, supongo.

-Si, creo que Gerben mencionó algo como eso, aunque nadie más que tú la vió.

-Lo se, se fue corriendo en cuanto escuchó al resto, creo que pudo confundirlos con el animal de esta mañana.-el menor asintió y suspiró de alegria al levantar la vista.

Al fin habían llegado al estanque.

-Joder si, ahora nos podremos ir más rápido.-murmuró caminando hacia el agua, dejó caer las cantimploras en el húmedo suelo, mientras abría una y comenzar a llenarlas.

Luke dejó el vestido sobre una roca y tomó una de las cantimploras dispuesto a rellenarlas lo más pronto posible.

Un golpe en su nuca hizo al rubio girar la cabeza desconcertado, se mantuvo mirando hacia atrás cerca de diez segundos cuando miró a la chica desconocida mirándolo sonriente desde la rama de un árbol.

¿Ella lo seguía o se la pasaba ahí habiendo tanta isla sola?

Luke se levantó lentamente del suelo, acercándose a ella, la pelinegra bajó de forma rápida y ágil del árbol, cayendo en completo silencio, de no ser por el crujir de una ramita, Anton habría seguido rellenando las cantimploras como si nada pasase.

Se giró totalmente asustado.

Ante el ruido, la ojiverde volteó hacia el castaño, que miraba confundido a la mujer.

¿Por qué estaba medio desnuda?

Entendía que tuviese calor, el también tenía mucho calor, pero no por eso se iba a quitar toda la ropa.

Bueno, no toda la ropa, al menos tenía cubierta la parte importante del sector inferior de su cuerpo.

-¿Es ella?-le preguntó Anton a Luke, levantándose de forma tranquila.

El rubio asintió.

-Hola, mi nombre es Anton y yo...-se calló en cuanto sintió las manos femeninas sobre su torso, tocando todos y cada uno de los colgantes que llevaba por el cuello.-Ahhhh, ¿Qué haces?-preguntó, alejándole de su cuerpo algo apenado, la pelinegra miró brillar su anillo de plata con una esmeralda grande en el centro.

Tomó la mano del castaño y con alegría miró la piedra preciosa brillar contra luz.

-¿Capitán?-murmuró el menor incómodo cuando ella comenzó a inspeccionar su rostro con los ojos.

-Solo dile que se detenga.-murmuró cruzándose de brazos.

-Deténte-susurró sonrojado, mientras ella acercaba su nariz a su cuello y comenzaba a olfatear.

Luke rodó los ojos.

-Anton, díselo serio, no como si tuvieras cinco años.-el menor asintió, al mismo tiempo que ella tocaba su cinturón.

Totalmente ajena a lo que sucedía ahí, se arrodilló, inspeccionando la hebilla de metal del cinturón.

Luke suspiró, dando por hecho que Anton estaba lo suficientemente nervioso como para exigirle que parase, se acercó a la pelinegra la tomó por los hombros llamando su atención.

-No, no puedes hacer eso.-murmuró negando, ella solo lo miró con el ceño fruncido.-Arriba.

Ella pareció entenderle, porque se puso de pie automáticamente, dándole la espalda a Anton para caminar hacia Luke.

Sus ojos azules parecían brillar y ella necesitaba tocarlos, eran tan bonitos.

-Te traje un vestido.-murmuró, dándose la vuelta para entregárselo, saltó levemente al notar que ella estaba detrás, casi encima suyo.-Toma.-extendió la mano que sostenía el vestido rojo.

Ella solo miró la tela sin expresión, negó confundida.

-Ah, así que si me entiendes.-dijo sonriente el rubio.-Toma, para que te lo pongas.

Ella se alejó con el ceño fruncido.

-Capitán.-murmuró Anton, captando la atención de Luke.-Mire.-señaló el abdomen de la pelinegra y también parte de su pecho.

-¿Te encuentras bien?-preguntó Luke mirando la sangre en su cuerpo, ella lo miró sin entender.

El ojiazul señaló su piel manchada de color rojo, a lo que ella solo se miró a sí misma.

Miró a Luke y lo tomó por la solapa de su gabardina, jalándolo a algún lugar desconocido.

Anton comenzó a caminar detrás suyo, hasta que ella lo detuvo bruscamente con su brazo, resoplando en su contra, un gruñido parecido al de la noche anterior.

El menor solo levantó las manos desconcertado, mientras Luke miraba a la pelinegra con la frente arrugada.

-Está bien Anton, iré, no tardes en volver a la playa ¿de acuerdo?-dijo el mayor.

-Pero capitán, ¿y si le pasa algo?-preguntó preocupado.

-No me sucederá nada, tranquilo, sin embargo, vuelve antes de la puesta de sol.-el castaño asintió.

La pelinegra lo jaló nuevamente, caminando entre los árboles y plantas enormes.

-¿A donde me llevas?-preguntó confundido, mirando como ella caminaba por ahí tranquilamente, como si no pudiese salir algún animal salvaje de pronto.

La pelinegra se detuvo ante la pregunta, se giró y lo miró con sus grandes ojos, acercándose cada vez más a su rostro, hasta que Luke sintió su respiración mezclarse con la de ella.

-¿Que haces?-preguntó en un susurro el rubio.

La ojiverde delineó sutilmente su mandíbula, y después, de forma inesperada solo le lamió los labios.

Luke frunció el ceño, pero esta vez no se alejó de ella.

-¿Intentas seducirme o algo?-preguntó mirándola fijamente, ella sonrió casi de forma infantil dando media vuelta, comenzando a caminar de nuevo.

El pirata solo suspiró negando, ¿que intentaba esa chica?

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K opinan?