Capítulo 2

260 24 42
                                    

Esas dos palabras 'Hola Samy'  no han salido de mi mente en toda la tarde. Fue lo único que me dijo y yo sólo le respondí con un tembloroso 'Hola'.  Sinceramente me considero una persona bien directa, fuerte y valiente pero soy de las típicas personas que con la cercanía de su crush ya está por los suelos.

Que vergüenza Samantha.

Creo que alegrarme por sólo dos palabras pronunciados en un día es algo confuso y raro, pero creo que al no verlo, al no escucharlo durante todo este tiempo ha hecho que sienta una necesidad de tenerlo cerca o por lo menos que respire en mi mismo ambiente.

Eso estuvo intenso, pero bueno.

La tarde en el colegio pasó volando ya que fue un día bastante movido, además que tengo mucho que ponerme al día, ya que prácticamente soy nueva con ellos y debo reincorporarme.

Sólo estuve pocos días en otra clase y ellos parece que ya dieron las lecciones para el resto del año.

En la salida, sólo observo a Jair subir al lujoso auto de su padre y nada más. Él era de una familia adinerada, más bien tiene un padre rico que luego de divorciarse triplicó su fortuna. Estudiamos en el mismo colegio por el simple hecho de que es un colegio privado profesional donde es de alto rango pero gratis. Pero sólo se ingresa con un examen de prueba de ingreso que te deja al borde del precipicio.

Jaír y yo no habíamos tenido ninguna conversación más y ante eso estaba bastante acostumbrada ya que así era nuestra relación de amistad.

Éramos de hablar mucho por mensajes pero en vivo y en directo sólo existían cortos saludos. La razón es que  existe cierto nerviosismo ante su cercanía.

Mi papá me deja en casa y sale con sus amigos a jugar fútbol. Mamá no está ya que hoy le toca el turno de hasta las nueve de la noche en el supermercado donde trabaja.

Osea en síntesis estoy sola y estoy muy cansada por el día de hoy sin mencionar que estoy muy hambrienta. Pero mi amada madre me dejó un omelette de jamón y queso en el microondas. Gracias al Espíritu me ahorro el trabajo de cocinar. Me como el omelette como León hambriento  y casi me atraganto con un pedazo de queso por lo rápido que lo comí.

Imagínense que me muera por atragantamiento por un queso, los ratones estarían decepcionados de mi.

Además apenas son las seis  de la tarde,  y se preguntarán quien cena a ésta hora, pues yo. Dicen que si cenas temprano tienes más horas de circulación antes de dormir y evitas engordar, pues yo me la creí ya que estoy muy acomplejada con mi cuerpo.

Éstos pequeños rollitos me hacen sentir inconforme ya que son los restos de la obesidad en la que me encontraba de niña. Suspiro ante el recuerdo de esos tiempos.

Pero fuera de eso al menos tengo bastante tiempo para realizar las tareas que me hacen falta, pero mi mente me abofetea al recordar que no tengo los apuntes que me faltan.

Pues lo única opción que me queda es pedir por mensaje de texto a uno de mis compañeros. Y el primer compañero que siempre me respondía al instante es..

Si lo adivinaron.

Jair Gosling.

Es la excusa perfecta para comenzar una conversación con él.

Soy tan inteligente.

¿Y si le envías mensajes y te ignora como lo ha hecho durante estos tres meses?

Él no hace eso no te atormentes por esas cosas.

Agarro mi célular y escribo un mensaje por whatsapp.

Mi Estabilidad ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora