CAPITULO 29

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Narra Tails Doll:

Hace ya unos años que no he visto a mi viejo amigo, Slender. Y ahora viene a mi otro de sus proxys, una chica a decir verdad. Me encontraba en mi oficina observando los documentos de experimentación de las criaturas que tengo en cautiverio, no son muchas solo son tres las cuales he observado su comportamiento, alimentación y haciendo hipótesis sobre esto. Estas criaturas son: El devorador de semillas; una criatura humanoide de piel verdosa o café de largo cabello azabache, en su largo rostro lleva puesta una máscara con aperturas en un ojo y en la boca, esta última deja ver una boca llena de colmillos. Origen: desconocido. Bestia Obscena Brutal, o por sus siglas BOB; otro humanoide de aspecto demasiado delgado de piel grisácea y una boca que muestra una tétrica sonrisa repleta de pequeños dientes, no pose brazos pero a pesar de eso es muy ágil con sus piernas y sus uñas afiladas, perfectas para despedazar carne. Origen: conocido. Por último, El rastrillo ; este desgraciado fue el que se escapó, humanoide de aspecto esbelto, lo más característico son sus manos, estas posen largas y afiladas garras que usa principalmente para atacar, de piel pálida, su rostro no parece tener ojos, en su lugar hay un par de cuencas vacías que por lo que he observado pare ser que puede ver perfectamente, al igual que boca, esta no parece estar sin embargo si tiene. Origen: desconocido.

Aparte la mirada de aquellos documentos al momento que la puerta de la oficina fue golpeada un par de veces, me quede viendo unos segundos para posteriormente decir "Pasa". Coloque mis codos sobre el escritorio uniendo mis manos.

Narrador Omnisciente

La puerta de madera desgastada se abría dejando ver a un joven con una máscara gatuna, que solo asomaba su cabeza y parte de su torso con la mirada hacia enfrente, mirando a su operador.

The Cat H.: Señor, le traje a... la chica. —Por debajo de su máscara hizo una expresión de desagrado volteando a ver a la joven y después a su operador.

Tails D.: Excelente, déjala pasar con sus manos atadas y tu quédate afuera, cerca de la puerta. —sus órdenes fueron claras y precisas por lo que el joven se dedicó a asentir y posteriormente a cumplir con lo dicho.

Tras cerrar la puerta detrás de él, claro, no sin antes de dejar a la chica en la oficina, el muñeco la miro de pies a cabeza, como si la estuviera escaneando y al llegar a sus ojos le mostraba una sonrisa "amable" a la chica, que más bien parecía una macabra sonrisa que hizo estremecer a la joven, quien no ocultaba este sentimiento de miedo con su cara, esto provoco una risa de parte del muñeco.

Tails D.: Toma asiento, tendremos una conversación. —con una mano señalo el asiente roto con unos que otros resortes por fuera pero que aun servía, de milagro. Nuestra protagonista trago grueso y sin replicar nada se sentaba en el mueble muy deteriorado.

___: ... Sobre que quiere hablar... --En la cabeza de ella era todo un caos, ya no sabía en que confiar gracias a su corta platica que había tenido con el joven, sobre todo aquella frase "Ellos me traicionaron". Volviendo con el muñeco, este desde su escritorio la observa detenidamente, si deberíamos de mencionar un sentimiento en su mirar seria: frívola, una mirada fría con un toque de seriedad pero de un momento a otro esta mirada cambio a una feliz y con un tono de voz totalmente diferente a lo que la joven se imaginaba comenzó la conversación.

Tails D.: Sobre Slendy y la creepyhouse. Dime ¿Cómo han estado todos? – su tono alegre era muy evidente, tan así era su alegría por saber de sus ex colegas que sus par de colas se movían con euforia.

___: ¿Eh? Debe de ser una broma. —Pensaba con una ligera expresión de confusión, ¿De verdad? Aquel muñeco le hacia esa pregunta, despejo esa duda al ver la sonrisa que ahora le parecía tierna y sincera. Desvió la mirada jugando con sus dedos incomoda.

Tails D.: Veo que eres una proxy de Slenderman o por lo menos eso sospecho yo. —seguía con esa sonrisa señalando la muñeca de la contraria, bajo la mano reposándola sobre el escritorio. En su mirada se notaba algo de ansiedad, esperando la respuesta de la chica.

___: Emmm... si le soy sincera, no lo sé... --Volvía su mirada hacia los ojos negros del zorro, los que extrañamente pudo notar un brillo en aquel par de ojos que la miraban con frialdad hace unos momentos. –Pero si lo que quiere escuchar que están bien se equivoca, deben estar preocupados

Tails D.: Me lo imagino, sobre todo los chicos... ¿Cómo se llaman? –Giro con levedad la silla giratoria en la que se encontraba, esa pregunta la hizo más para sí mismo que para la joven, chasqueo los dedos volviendo a girar la silla y de esa manera volver su vista con la chica cuando recordó los nombres de los proxys.— Timothy, Toby y Brian ¿No es así?

___: No conocía sus nombres reales...--Al muñeco le dio gracia su comentario, lo cual le mostro con una ligera carcajada. — .. Si, sobre todo ellos. Señor Tails, ya no le temo a la muerte, desde que me uní a Slenderman, así que... ¿Por qué traiciono al operador? O ¿Qué fue lo que paso?

La cara de Tails cambio nuevamente de forma brusca, ahora era una de seriedad a lo que ____ reaccionó de inmediato encorvándose en el sofá, su mirada era igual a la del muñeco.

Tails D.: Te voy a ser totalmente honesto, es tu problema si no me crees. —La chica asentía. —Todo comenzó una mañana, era una mañana cualquiera....

De esa manera, el muñeco empezó a recordar ese día, aquel día que jamás olvidaría por nada. Mientras  tanto, los chicos cada vez estaban más y más cerca de la casa de Tails Doll, ellos sabían que esa misma noche regresaría su operador de su viaje, así que la presión estaba muy presente en sus corazones que latían con fuerza. caminan con precaución, atentos a todo ser viviente que pisara cualquier hoja que se encuentra cerca de ellos, guiados por la criatura humanoide que escapo y ahora regresaba con aliados, todos ellos tenían un objetivo bien claro: Salvar a ______, ya que dentro de sus corazones sentían que aun se encuentra con vida.

secretos (proxys y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora