secretos (proxys y tu)

CAPÍTULO 31

Narrador Omnisciente:

La joven de cabellos  (C/D/C) se encontraba sentada en el sofá, atenta a todo lo que de la boca del muñeco del zorro de dos colas salía. No negaría que esa historia le provoca un popurrí de emociones. Y a consecuencia de ello, sin pensarlo dos veces se levanta del sofá y con los brazos extendidos, aún teniendo sus manos atadas con una soga. Camina hacia un muy confundido Tails Doll,  quien lo muestra en sus escleróticas con una pequeña pupila color rojo,  además de levantar el músculo de la  ceja, él por su parte no se movía de su asiento, solo giro unos cuantos grados en dirección hacia la chica.

___:Como te dije hace un rato, ya no temo a la muerte  … --Sentenció la chica al estar a unos centímetros de diámetro del muñeco. Le dio un fuerte abrazo, para hacer eso tuvo que ponerse a la altura del contrario y meter al contrario en el hueco de sus brazos al estar atada.

Tails Doll se quedo estático, tenia la sospecha de que haría algo así o incluso, estaba preparado para recibir un grito o una bofetada y un golpe pero un abrazo,  nunca.  Levanto ambos brazos rodeando la espalda de la joven ____. El cristal que cuelga con una especie de alambre comenzó a brillar en un fuerte tono carmesí y unas garras aparecían en sus manos,  una sonrisa burlona de angulares colmillos aparecía en su rostro. Esto no fue visto por la chica,  por la posición en la que se encuentra; con su rostro mirando hacia la pared y abrazando al muñeco. Sin embargo, sentía un aura maligna que emana de él.

___:Lo voy a repetir, no tengo miedo a la muerte. …

Tails D.:  ¿Puedes sentir el sol?

En ese punto,  ya tenía las garras destrozando el abrigo de Cat Hunterque lleva puesto, como era de esperarse, las afiladas garras ya tocaron la piel delicada de la chica, provocando que de sus guantes blancos se pintarán de un color carmesí y gotas de aquel líquido caía al suelo, estimulando el oído del muñeco con el sonido tan característico que se escucha.

___: Sí,  si lo siento  … y quiero que tú también puedas sentir el sol otra vez,  que vuelvas a sentir su calor saliendo de este lado del bosque

Dolía, le dolía su espalda y además,  que estaba a punto de desfallecer por perdida de sangre. El asesino abría sus ojos separado sus brazos de ella y retroseder con la silla de ruedas. _____ cayo al suelo sosteniendo su peso con sus temblorosas manos, a pesar de estar herida, levanta la vista con dirección al muñeco,  en sus labios tenia una sonrisa débil pero con esa sonrisa le hacía entender un sentimiento que no sentía hace tiempo;  compasión,  aquella compasión que algún día tuvo se ex amigo hacia él,  cuando lo acogió en su casa y ¿Cómo se lo pago?  Con uba apuñalada por la espalda.

___: Tails … estas .. ¿Llorando?

En efecto, en los ojos que no muestran vida del muñeco, salian lágrimas de sangre. Sin ninguna pena,  caian por sus mejillas. Con lad yemas de sis dedos limpia algunas,  no todas.

Tails D.:Si … estoy llorando,  que ironía hace mucho tiempo que nadie. … NADIE me hace llorar

Su voz en ningún momento se quiebra sin embargo, se notaba que decia esas palabras con ternura mezclada con determinación y honestidad. Sus garras y sonrisa tétrica desaparecen,  el brillo de la gema ahora era una tenue luz,  cómoda a la vista.

___: ……

Tails D.: Mierda, las heridas  … --Los brazos de la chica no soportaron más, cayendo desmayada delante del muñeco,  quien no pudo detener la caída así que al momento de descender se pegó un buen golpe en su rostro. Se acercó a ella dando vuelta a su cuerpo, apoyado la cabeza de la inconsistente en su regazo. --¡Cat! ¡Ven aquí, es una orden!
El llamado de Tails fue fuerte y claro para al joven que se encuentra fuera de habitación, entro abriendo la puerta de golpe. Bajo la máscara había una cara de sorpresa total al ver la escena.

Tails D.: Carga a la chica,  rápido, llévala al laboratorio, necesito curar sus heridas

Cat H.: ¿Qué?  No espera que …

Tails D.:¡Rápido, es una orden!

Cat H.: De acuerdo, operador

Después de esa pequeña discusión, el muchacho de cabellos castaños no tuvo de otra que obedecer a su operador, cargo a la chica y corría detrás del muñeco, quien se había adelantado. Llegando al susodicho laboratorio, puso manos a la obra llevando de unos estantes algunos analgésicos y una fórmula que solo probó con su único subordinado, este noto el frasco, lo tomo del brazo con fuerza, Tails solo voltea a ver al joven con indiferencia sin decir nada.

Cat H.: Señor Tails,  sabe bien que esa fórmula le dará una regeneración casi inmediata,  de esa forma será más difícil torturar y matarla 

Tails D.: Escucha,  Cat .. no la mataré, y  sí, sé perfectamente lo que le provocará esta fórmula en ella.—Se soltó del agarre lanzando una mirada enojado para posteriormente comenzar a tratar a la chica. Ella se encuentra boca abajo sin el abrigo,  ya que se lo quitaron. Primero le puso algo de analgésicos y después de dar un pesado suspiro, tomo una jeringa de cinco milímetros la cual la llena al tope.—Cat, sujeta sus brazos. Puede que despierte

Y sin decir nada, no dudo en obedecer lo que le decía, amarrado sus extremidades a unas correas de la camilla. Él mejor que nadie sabía lo que se siente ese liquido dentro del cuerpo, los primeros síntomas son: dolor, dolor y más dolor. Son los únicos síntomas.

Inmediatamente, Tails se acercó e inyectó todo el líquido verde en su espalda.  Y como lo predijo, se despertó segundos después de sentir la aguja atravesar su piel,  sentía como si su cuerpo se quema por debajo de su piel,  como si por su sangre corría lava que derretía los vasos sanguíneos y propagara el dolor a sus órganos. Como era de esperarse, comenzó a retorcer su cuerpo de dolor, apretaba sus puños a un punto de volverlos blancos.

___: ¡Ahhhhh! ¡Hijos de puta! ¡Duele, Duele! –Grita con dolor. Mordía sus labios.

Tails D.: Me dijiste que no temías a la muerte,  pero si temes al dolor 

Cat Hunter reía recargado en la pared al escuchar lo que decían. A lo que el muñeco lo mira e hizo que se callará y desvíe la mirada,  ya que con esa mirada le decía o mejor dicho, le recordó lo patético que se miró en la situación que ahora se encuentra la chica.

Cerro sus bonitos ojos color (C/D/O) los cuales salían lágrimas por la inercia del dolor,  pero detuvo sus gritos de aquel sentimiento,  no porque el dolor aminoraba. Sino porque no quería verse patética o débil,  además de que hacer eso seria contraproducente ante sus palabras.

Tails D.:  Tranquila,  ya pasara el dolor. Sientes eso porque las células de tu cuerpo se están regenerando a una velocidad increíble

Las heridas de su espalda cerraron con total éxito, ahora el dolor disminuía. El muñeco se sienta en un banco delante de la chica. Volvía abrir sus ojos cristalizados por las lágrimas, él al ver sus ojos, acerca su mano de una forma lenta pero nunca llego a tocar su rostro tras escuchar una ventana rota. Los salvadores de ____ llegaron a la casa.