Capítulo 16. THURMOND DE LOS LOCOS

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¬ Tenía que hacer un recado en la Torre de Control. ¬ les espeté con decisión ¬ Vi los códigos de acceso a los servidores informáticos a los que la Liga pretende acceder. Tengo memoria fotográfica, y soy muy buena en todo lo referente a números y códigos. Me sacaron para conseguir la información.

Debía de ser la mayor mentira que había creado desde el "Me llamo Anika y soy Verde". Seguramente todo lo que había dicho no tenía sentido y era una completa exageración, pero se lo tragaron.

¬ ¿Y tu amigo? ¿Por qué lo quieren a él? ¬ Cuanto más rato me miraban fijamente, más me costaba no mostrarme inquieta.

¬ ¿Te refieres a Martin? ¬ dije, con una voz excesivamente aguda incluso para mis oídos ¬ Lo vi ayer por vez primera. No tengo ni idea de porque lo sacaron. Desconozco su historia. No se la pregunté.

"Ojalá no supiese la historia retorcida del naranja".

Chubs dio una palmada al lateral del monovolumen.  ¬ No me digas que te la crees, Lee. Cuando nos fugamos, conocíamos a todo el mundo.

"¿Fugarse?" 

"¿Se habían fugado de verdad?"

La sorpresa me dejó sin habla durante unos segundos, hasta que por fin pregunté: ¬ ¿No os sacó también La Liga? ¿Os escapasteis? ¿En serio? ¿Cómo lo conseguisteis? ¬ Respiré hondo ¬ Además, ¿Cómo ibais a conocer a los tres mil?

Los chicos dieron simultáneamente un paso atrás.

¬ ¿En tu campamento había tres mil niños? ¬ preguntó Liam.

¬ ¿Por qué lo dices así? 

Desvié la mirada de uno a otro, desconcertada. ¬ ¿Cuántos erais en vuestro campamento?

¬ Trescientos, como mucho. ¬ respondió Liam

Abrí los ojos sorprendida.

"¿Solo?" 

"¿Tan pocos?"

¬ ¿Estás segura? ¿Tres mil?

¬ La verdad es que nunca nos comunicaron la cifra oficial. Pero había treinta niños por cabaña y habría un centenar de cabañas. Antes había más, pero se quitaron de encima a los rojos, los naranjas y los amarillos.

Por lo visto, estaban alucinando. Liam soltó un extraño gruñido.

¬ ¡La hostia! ¬ consiguió decir por fin ¬ ¿Y qué campamento era ese?

¬ Y a ti qué te importa. ¬ dije ¬ Tampoco ando yo preguntándoos dónde estabais vosotros.

¬ Estábamos en Caledonia, Ohio. ¬ dijo Chubs, haciendo caso omiso a la dura mirada de Liam ¬ Nos metieron en una escuela de primaria abandonada. Nos fugamos. Y ahora es tu turno.

¬ Estaba en Thurmond.

Me pasó un escalofrió por la columna. El silencio que siguió a mi declaración se hizo más largo que la carretera que teníamos frente a nosotros.

¬ ¿Lo dices en serio? ¬ preguntó finalmente Liam ¬ ¿El Thurmond de los locos, con los niños Frankenstein?

¬ No, el Thurmond de las ancianas con sobrepeso. ¬ resoplé cansada ¬ ¿Tú conoces otro Thurmond?

No quería tener esta conversación, ni ahora, ni nunca.

¬ Ya no hacen experimentos. Los detuvieron unos meses antes de que nosotras ingresáramos. ¬ les contesté adoptando inconscientemente una postura defensiva.

All For Us  |  The Darkest Minds | #AFU1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora