I'M YOUR BAD GUY [BILLIE EILISH/TERMINADA]

Capítulo 17

Narra Alex

Me fui a casa pensando en la propuesta que Billie me había hecho, ¿que querría que hiciésemos en su casa hoy? No tenía muy claro que buscaba de mí pero ya nos habíamos quedado a medias un par de veces y pensaba que quería salvar esa distancia ya. Aunque después del pequeño capítulo de celos con Heather no sé que más podría querer hacer conmigo pero no me iba a negar a nada, hacía mucho tiempo que no tenía contacto con nadie y ya no tenía ningún tipo de relación con Paula.
Mis padres aún no habían llegado, supongo que estarían trabajando así que no los llamé. Subí a mi habitación y dejé la mochila encima de la cama, y bajé para buscar algo de comida para poder llenar mi estómago. Mi madre al parecer había dejado una nota en la puerta del frigorífico:
"Cómete los macarrones cariño, aquí salimos más tarde de trabajar, recoge la cocina después. Te quiero."

Pues tengo para comer macarrones. Ya hacía tiempo que no comía pasta así que no puse alguna pega, y simplemente los calenté y me los comí. Cuando acabé de llenar mi barriga, subí las escaleras y me tumbé en la cama un momento y cogí mi móvil para ver que mensajes tenía:

Populares del High
Bill's te añadió.

Taylor: Ya me estabas haciendo falta por aquí García, te quiero hoy en la pizzería de las primeras. A las 19:00 lo veo bien chicos!
Alex: Ya sabes que voy a estar allí la primera esperándote 😉

Me llegó un mensaje de Billie al chat privado en ese momento:
Bill's: ¿Qué me dices si quedamos a las 16:30?
Alex: Son bastantes horas, ¿tantos planes tienes para nosotras? 🤭
Bill's: Tú solo ven...

Me asomé por la ventana y la vi tumbada en su cama, haciendo los deberes. Ya los haría yo esta noche, mi don del insomnio había conseguido cambiarme las rutinas y los deberes se colocaron en esos horarios. Por lo que decidí darme una ducha y así hacía tiempo, aún faltaban un par de horas para las 16:30 así que podría hacer otras cosas antes.
Se me olvidó regular el agua caliente y una gran cantidad de gotas frías cayeron por mí cuerpo, no me importó. ¿Despejaría mi cabeza así?
Una vez fuera de la ducha busque algo de ropa en mi armario. Decidí ponerme un chándal negro y una camiseta blanca, ese look nunca fallaba y siempre parecía bastante arreglado.
Entre unas cosas y otras, dieron las 16 y me asomé por la ventana y vi a Billie con una toalla alrededor de su cuerpo. Su complexión era fina, tenía unas bonitas curvas, un increíble cuerpo siendo sinceros. Me quedé mirándola unos minutos, delineando su cuerpo con mis ojos, salvando las distancias en mi mente.
¿Estabas causando efecto en mí Billie? ¿O simplemente quería olvidar a Paula?
Dejé de mirarla y salí de mi casa para llamar a la suya, lentamente, había llegado con antelación.
La escuché bajar las escaleras y a los pocos segundos me abrió la puerta con una sonrisa pícara. Me miró a los ojos y mordió su labio inferior. A continuación se giró y caminó hacía dentro, simplemente me quedé mirando como subía las escaleras:

Billie: ¿Vas a quedarte ahí o vas a subir? - me miró desde las escaleras.

Le sonreí y cerré la puerta una vez dentro.
Subí las escaleras y la abracé por detrás, comencé a dejar besos en su nuca, ella comenzó a reír.

Alex: Y ahora quiero que me digas el porqué de esta decisión de quedar antes conmigo, creo que me merezco una explicación, ¿no?

Billie se dio la vuelta y pasó sus brazos por mi cuello, inconscientemente agarré su cintura y la pegué a mí, las dos sonreímos.

Billie: Quizás necesite respuestas y contigo las pueda encontrar, pero solo he dicho quizás - levantó sus cejas.
Alex: Ah vale, soy un experimento social para ti, solo por eso estoy aquí, pues que guay.
Billie: Sabes que no, no te comportes así, mira yo no sé dónde quiero ir pero tengo muy claro que quiero ir contigo Alex - me miró fijamente a los ojos.

Aún no tenía muy claro que iba a pasar entre nosotras pero la besé, solo quería estar entre sus labios ahora mismo, necesitaba de ella.
Caminamos poco a poco hacía su cama, ella sabía cuáles eran mis intenciones y yo, pensaba cuáles eran las suyas.
Se dejó caer y a continuación me dejé caer yo encima de ella, suavemente. Mis labios buscaron su cuello y ella no les impidió el paso, en cuestión de pocos segundos soltó un pequeño suspiro y mis manos pasaron a su abdomen.
Agarré su camiseta y la comencé a subir, poco a poco.
La mía acabó fuera en pocos minutos.
Sentía que había algo que me sobraba y quité mi chándal, ahora ya si estábamos en igualdad de condiciones.
La volví a besar, esta vez con más ganas, con más fuerza, era un beso de necesidad.
Acabé con su ropa interior y simplemente lo dejé fluir.
Me coloqué debajo de ella y se puso encima mía, admiré su cuerpo desnudo por segundos.
La notaba nerviosa y simplemente le regalé una sonrisa de tranquilidad:

Alex: ¿Te sientes bien? Si algo no va bien, solo dímelo.

Simplemente asintió y comenzó a besarme de nuevo.
Noté su humedad y sonreí, por lo que ella me devolvió la sonrisa de nuevo.
Rocé su feminidad y ahí estaba de nuevo, otro suspiró. Jugué con ella un poco, de manera suave, empecé a acariciar poco a poco. De nuevo, otro suspiro y otra sonrisa.
Metí uno, y comencé a besarla, con calma.
Notaba como mi mano cada vez comenzaba a humedecerse más, así que decidí meter otro.
Y ahí estaba, el primer gemido, me lo había ganado.
Transcurrió sin más, en unos 30 minutos, acabé. Por lo que quise repetirlo un par de veces más.
Se tumbó a mi lado y simplemente me dejé caer hacía atrás:

Billie: Eso estuvo bien, sinceramente - comenzó a reír.
Alex: ¿Solo bien? Esperaba mínimo mi notable, o un sobresaliente, me lo merezco, ¿no crees? - mordí mi labio y la miré.

Ella sonrió ante mis palabras y me dejó un beso en la mejilla.
Billie: ¿Qué hora es? Quizás se nos ha hecho tarde.
Alex: Son las 18:30, así que tienes razón, deberíamos vestirnos - arrugué mi nariz.

Las dos nos vestimos y caminamos hacia la pizzería, como le prometí a Taylor, la primera.

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