Mi compañera eterna

Capitulo 1

Hola mi nombre es Ayla York, vivo Minnesota con mis padres, me gradué hace un año de la preparatoria y al contrario dr muchas chicas o chicos yo busque un trabajo en lugar de una Universidad.

Mi padre se llama Lisandro York y mi madre se llama Alejandra de York.

Mi familia no es lo que se dice unida, bueno solo con mi padre es así, nunca fuimos una familia, mi padre es un adicto al juego y al alcohol, se la pasa en los pocos casinos que hay en la ciudad.

Mi madre se la pasa todo el día llorando, yo antes me mataba estudiando para algún día salirme de mi casa y alejarme de mi padre, llevándome a mi madre conmigo.

Él cuando llega borracho nos golpea a mi madre y a mi, pero siempre la que se lleva la peor parte es mi mamá, ella por tratar de defenderme se lleva los peores golpes.

Solo mi mamá y yo somos unidas antes su única alegría era escucharme hablar sobre mis amigos y sobre mis excelentes calificaciones.

Ahora me la paso todo el día trabajando, antes vivíamos en una casa propia, ahora vivimos en un asqueroso departamento, mi padre gracias a sus adicciones no pudo seguir pagando la casa.

El dueño del edificio es su amigo de juego así que no nos cobra renta pero hay veces en las que ni mi mamá ni yo comemos.

Cuando es día de paga en mi trabajo y llego a casa inmediatamente mi padre me quita todo, a veces cuando esta de buen humor me deja $60 dólares para comer pero con eso no me alcanza para casi nada.

Una vez intenté enfrentarme a él y no darle mi dinero pero fue lo peor que pude haber hecho, me golpeo hasta el cansancio.

Me dejo durmiendo en la calle con mis heridas y solo con mi uniforme de camarera, pasé mucho frío y pude morir de hipotermia pero por suerte una vecina me metió a su casa sin que mi padre viera.

Desde ese día no le he vuelto a negar el dinero que con tanto trabajo y esfuerzo me gano en la cafetería y en el bar.

Así es tengo dos trabajos pero al bar solo voy los fines de semana, casi no tengo amigos o mejor dicho solo tengo compañeros de trabajo.

Me despierto temprano en la mañana hoy es lunes y trabaje hasta muy tarde ayer en el bar por lo que me cuesta mucho abrir los ojos.

Me levanto con mucho trabajo y camino al baño con mi bata y una toalla, cierro la puerta con seguro, me baño rápido con agua fría lo cual logra despertarme un poco.

Cuando termino me pongo mi bata y mi toalla en mi cabello, me lavo los dientes para después salir del baño, mi padre estaba esperando a que saliera.

Lisandro- ya era hora de que salieras, quítate- me empuja y se mete al baño.

Suspiro y camino a mi cuarto, me pongo ropa interior y mi uniforme, salgo de mi cuarto con mi mochila donde cargo ropa para cuando salgo de trabajar.

Veo a mi mamá tiene un moretón en el ojo izquierdo y varias cicatrices de quemaduras, otras de cortes que mi papá le hace con su navaja.

Me acerco y beso su mejilla, ella me abraza, yo le correspondo el abrazo.

Alejandra- que dios te acompañe mi vida- suspiro mi mamá es católica aun que no en exceso, yo no creo en esas cosas.

Ayla- gracias mamá, te veo en la noche- nos separamos.

Salgo de departamento, veo mi viejo reloj y aun es muy temprano, mi estomago ruge por comida pero desgraciadamente no tengo dinero para comprarme nada.

Camino evitando a los vecinos, veo al amigo de papá subir, el señor Johns.

- buenos días princesa- lo ignoró y siente su asquerosa mirada en mi.

Salgo del asqueroso edificio, camino por las calles hasta llegar a la cafetería, Harry está trapeando los pisos.

Ayla- buenos días Harry- él es muy tímido y casi no habla es hijo de la dueña de la cafetería.

Harry- h...hola Ayla- baja la mirada cuando me volteo a verlo, suspiro y comienzo a limpiar la barra, después voy a la cocina a lavar los platos que quedaron de ayer.

Abrimos la cafetería exactamente a las 9 am, la gente comienza a llegar, yo atiendo a la mitad de las mesas y Harry a la otra mitad.

El día de hoy la cafetería esta muy concurrida por lo que yo no puedo descansar ni un segundo.

Al llegar las 10 pm cerramos, lavo los trastes, ayudo a Harry a limpiar las mesas mientras Sabrina su madre cuenta el dinero en la caja.

Ella es una muy buena jefa, todo lo contrario a mi jefe del bar que es un abusivo y un cerdo.

Sabrina- bueno hoy les fue muy bien en propinas chicos- cuando termino de limpiar las mesas barro todo.

Voy a cambiarme a los vestidores y después Sabrina me paga mis propinas junto a mi sueldo.

Cerramos la cafetería para después irnos, ellos se van en su carro y yo me voy caminando, las calles son muy solitarias a estas horas.

Al llegar a la entrada del edificio suspiro de alivio pero entonces me percato de una camioneta negra con los vidrios polarizados.

¿Que hará esa camioneta en un barrio como este? Seguramente George se la robo, George es uno de mis vecinos que ha estado muchas veces en la cárcel pero por robos.

Llego a mi departamento y veo que la puerta de mi casa está abierta, no me extraña eso, pero me extraña oír las voces de varios hombres dentro.

Tengo un mal presentimiento, pero entro por que mi madre está ahí dentro, veo a unos hombres con traje darme la espalda pero hay uno que parece ser el jefe.

Uno de los hombres se da cuenta de mi presencia y me agarra, para después sentarme en uno de los sillones, grito cuando veo a mi mamá tirada en el piso.