Entro en la casa y Evan entra atrás de mi, se va a su habitación mientras que yo me dirijo a mi habitación, busco a Ayla pero no la veo.
Busco su olor que me guía a una de las habitaciones de invitados ¿por que diablos esta ahí? Abro la puerta y la veo admirar su título.
Ayla- que bien trajiste mis maletas, necesito un baño- toma sus maletas, comienza a querer acomodar todo en el closet pero se lo impido.
Grayson- puedes acomodar tus cosas en mi habitación-
Ayla- no quiero dormir contigo- ruedo los ojos y suspiro, la tomo del brazo pone resistencia pero soy mas fuerte que ella.
Bajo las escaleras arrastrándola literalmente, bajo al sótano, la obligó a sentase en una silla, ató sus manos hacia atrás y sus piernas en a las patas de la silla, ella lucha contra las cadenas.
Pero pongo un poco de té de verbena en las cadenas normalmente gritaría de dolor pero ella no siente dolor, no siente absolutamente nada pero al menos eso reducirá sus fuerzas.
Tomo un cuchillo con verbena y lo paso por todo el largo de sus brazos haciendo grandes cortes, después lo paso por los lugares donde se que se desangrara mas rápido.
Ayla- ¿y luego que? Beberás mi sangre y me besaras apasionadamente- se ríe.
Grayson- no sabes como me duele hacerte esto pero es necesario- le doy un beso en la frente y después me voy de ahí, me encierro en mi despacho para llorar sin que nadie me escuche.
Días después...
Me despierto sintiendo un miedo horrible un miedo paralizante, pero ese miedo no es mío, corro al sótano y ahí veo a Ayla llora pero al mismo tiempo se ríe.
Cualquiera la acusaría de loca pero yo se que todas las emociones e incluso dolores la están asfixiando, se ve delgada y ojerosa.
Ahora solo yo podré apagar sus emociones, ella ya no tendrá el control sobre eso, eso lo logre con ayuda de un brujo.
Le quitó las cadenas con ayuda de unos guantes que no dejan pasar la verbena y que me queme, veo que su piel ahí donde la tocaron las cadenas esta muy lastimada.
Grayson- perdóname- mis ojos se llenan de lágrimas y los de ella igual.
Ayla- esta bien pero nunca lo vuelvas a hacer por favor-
Grayson- solo que sea necesario- la cargo para llevarla a nuestra habitación, tengo que llamar a Evan, pero primero le daré sangre en bolsas por que ahorita podría matar a su alimentador.
Al llegar a la habitación la dejo sobre la cama y salgo corriendo a la cocina en la nevera tenía bolsas de sangre, tome 5 bolsas.
Subí a la habitación con las bolsas en las manos, al llegar a la habitación le acerque la primera bolsa de sangre ella la bebió en segundos, arrasó con las 5 bolsas y aun se ve mal.
Corro de nuevo a la cocina por otras 6 bolsas y subo, ella se bebe cada una de ellas, cuando la veo mas estable decido ir por Evan.
Evan- ¿que sucede?- pregunta adormilado.
Grayson- ella te necesita- a toda velocidad ambos corremos a la habitación, Ayla al verlo se lanza sobre él, pero con sus buenos reflejos de él no la dejo tocar su cuello.
La veo beber su sangre y me siento aliviado al verla recuperarse del todo, cuando sabe que está saciada, se separa de la muñeca de Evan.
Evan solo esta un poco débil, lo hago sentarse en la cama, le traigo el desayuno y las pastillas de hierro, come con rapidez, se bebe el jugo que le traje para pasar la pastilla.
Ayla- lo siento Evan- él la mira con una sonrisa.
Evan- no te preocupes, me pondré bien- asiente y me observa -bueno yo me voy, ambos necesitan hablar y yo necesito seguir durmiendo- se va, cierra la puerta.
Ayla- Grayson quiero conocerte y quiero que me conozcas, tu tía el día que la conocí me tocó la frente y pudo ver todo mi pasado gracias a eso quiero que lo hagas tu, yo no me creo capaz de poderte contar sobre mi vida sin llorar- sonrió y asiento.
No se si soportare ver lo mucho que sufrió mi tía me comentó que vio lo mucho que sufrió y que a la fecha no puede olvidarlo.
Me acerco a ella, acarició su mejilla para tratar de calmarme y después llevo una de mis manos a su frente, esto es algo que no hago normalmente pero sé hacerlo como si mi instinto me guiara.
Veo desde el momento en que ella recuerda de su niñez que era una niñez tranquila pero de repente todo cambia, Ayla no vuelve a sonreír solo cuando ve a su madre lo hace.
Veo cada segundo de lo que fue su vida como si estuviera viendo una película horrible, llegue hasta el día de hoy.
Definitivamente no me agrado ver como besaba a su ex esposo muerto y como él la trataba como un trapo viejo que no siente me dolía en lo mas profundo que lo amara pero eso cambió el día en que vio la tumba de su madre.
Ayla- es doloroso para mi recordar todo eso, pero es por mi pasado que soy quien soy hoy ¿verdad?-
Grayson- te juro que yo no seré como Asher- se que eso ella lo sabe pero aun así necesitaba decírselo en voz alta conmigo ya no va a tener malos recuerdos.
Ayla- lo se- miro mis labios, después se acerco mas, sabía lo que quería y yo la complacería en todo.
Nos besamos este es nuestro primer beso, quiero protegerla y eso haré, no permitiré que nada le haga daño.
Nos separamos por falta de aire, ella me miraba con ternura.
Grayson- será mejor que nos detengamos ahora por que si es contigo no se si me pueda controlar-
Ayla- y quien dijo que quiero que te controles, se que tu me puedes hacer el amor, me puedes enseñar lo que es disfrutar del sexo así que no quiero que te detengas- continuamos con lo nuestro.
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Mi compañera eterna
VampireElla ha vivido una vida donde su padre golpeaba a su madre, ella mantenía su vicio que eran los casinos, un mal día su padre pierde contra un poderoso narcotraficante y él le ofrece a su hija como pago, ella con el hijo de ese hombre vivirá sus peor...