Staig / One shots.

27

☁️¡sorpresa! ☁️

Le encantaría decir que es producto del alcohol pero no es así.

Ese chico le atrae.

Estando sobrio y estando ebrio.

Sus grandes ojos azules, su piel blanca, sus labios rojizos.
Es un gran idiota por tratar de estar cerca, sabe muy bien a _quién_ tiene detrás, y eso lo fastidia, más no lo asusta.

— Creo que voy a bajar. —

Comentó el de cabello negro al de de extensiones verdes,   habían subido a la azotea de Mike, era muy fácil llegar hasta ahí por su ventana, ambos tomando cerveza directo de la lata y conversando.

No podía adivinar muy bien porqué sabiendo que era un gótico le había llegado tan profundo.

– ¿Te vas, parce? —

Su voz sonó triste, puso la lata sobre sus labios para intentar disimular y dio un trago imaginario.

— Sí, mis amigos deben estar buscándome, sobre todo ebrio, ya sabes. —

Gateo hasta la ventana, tropezando al intentar voltear y cayendo al piso, fue grave por supuesto, pero el golpe seco del piso sin duda lo escucharían las personas que lo tienen como techo.

— ¡Stan! —

— auch... —

El vampiro fue hasta la ventana, parando sin pensar al ebrio caído, mala idea, pues al ser devuelto a sus pies de manera repentina sintió deseos de vomitar, se había mareado y tan ebrio como estaba quizá podría salir de su boca apenas hablara de más.

— Espera, espera... V-voy a vomitar haha. —

Volvió a acostarse en el suelo, viendo el techo intentando despejarse, el golpe no le dolió, de hecho, ni siquiera resentía el haberse caído. Por otra parte el de los colmillos de plástico si que estaba en una batalla mental, él estaba ebrio, podría, quizá confesarse, no iba a recordarlo, pero ¿debía? ¿Era así como quería sacar sus sentimientos?

— ¿Bajamos? —

— No, no puedo aún... —

Tomó una decisión, no le diría nada y sus acciones hablarían por el.

— Oye Stan, ¿qué ... Qué tipo de sangre eres? —

— Uhm... ¿Sangre? No lo sé, quizá O+ Kyle dijo que era el más común. —

Con sus manos a cada lado de su cuerpo y su cabeza ligeramente hacia atrás el de extensiones tenía camino libre para actuar, se acercó muy lento, como un felino, recostadose a su lado como si nada pasara, en el estado semi inconsciente de sí mismo, no notó eso, era una presa en ese momento, su depredador lo analizaba, cortaba su espacio sin consideración, pasaba la lengua insistente por sus propios labios y se auto saboteaba en ser discreto, no podía y no quería.

— Pero tú no tienes nada de común. —

— No sé —

Respondió cerrando los ojos, el mareo no bajaba, y seguir hablando le dejaba la boca seca, estaba esforzándose por no manchar el piso, no quería hacerle eso a su amigo, pero Joder, tampoco podía pararse y evitarlo, nunca fue bueno reteniendo el vómito.

Se aproximó con velocidad, así como un depredador, atacó sin piedad los labios semiabiertos del muchacho derrumbado en el suelo, le besó sin calma, sin paciencia pero evitando ser brusco, las manos blancas de su amigo lo tomaron del pecho, se sintió aliviado al no pedirle que se alejara, se separó dando suaves picos, que dejaban al otro pálido, un estruendo lo hizo saltar en su lugar y abandonar el rostro ajeno.