FUCK CRUSH !

Capítulo 65 ♥

Bambi:

Una mañana nublada se asoma por mi ventana y la noche ya dejó de ser pesada. Empieza un nuevo día diría una persona mayor. Siempre empieza un nuevo día. No sé si es producto de mi impulsividad ir a la anterior zona de Buenos Aires donde vivía, queda a tres horas de viaje desde acá. No pierdo tiempo en pensar, decido cambiarme, abrigo mi cuerpo, dejo mi cabello suelto y no me maquillo demasiado porque sinceramente no tengo ganas. Tomo plata para comprar facturas en la panadería de la esquina de mi casa, cierro la puerta y respiro profundamente.

Mientras estoy viajando en el colectivo miles de recuerdos y pensamientos cruzan por mi mente a medida que voy avanzando sobre la zona, es como si toda mi vida pasada estuviera atravesando por mí. Recuerdos de los cuales no quisiera tener memoria, recuerdos que preferí enterrar, que me hicieron crecer. Recuerdos que me arruinaron la existencia, que por esa razón me fui a reconstruir una nueva vida, recuerdos que escondo y nadie lo nota. Solo recuerdos.

Cuando llego al destino y bajo con mi mochila observo a Stefany, por cierto, muy cambiada. Me gusta verla así. Hace señas para dirigirme al taxi rápidamente ya que está lloviendo.

Entro e instantáneamente al cerrar la puerta nos abrazamos fuerte: un abrazo sincero y que necesitaba, hace mucho tiempo no veía a Stefy, ella sabe por todo lo que tuve que pasar, me apoyó en cada momento y comprendió la razón de mi escape.

—Bambi, que linda estas—escucho que susurra en mi oído en tanto nos abrazamos. Es un mimo al alma, un mar de emociones recorre mi cuerpo porque estar otra vez acá, sí que es algo llamado coraje, valentía y esfuerzo—tranquila, ahora vamos a casa y hablamos todo—. Acepto media confundida todavía de la situación, pero por suerte después de unos minutos logro relajarme. 

—Traje facturas, como en los viejos tiempos, nada más que ahora en vez del parque va a ser en tu cuarto por la lluvia—exclamo.

—Nada mejor como un día de lluvia, ven, pasa a casa—abre la puerta. Stefy tiene el típico ambiente cálido familiar, su mamá me recibe con un abrazo y dice que puedo venir cuando quiera, que extrañaba verme por estos lados y no deja de preguntarme cómo estoy. Le agradezco por tal afecto.

— ¡Bueno mamá! No hay tiempo para perder con Bambi, nos tenemos que poner al día con muchas cosas como ya verás—me mira con cara de no soportar a veces a su propia madre. Río un poco—estamos arriba, voy a preparar café del escritorio de papá que tiene todo—finaliza Stefany. Su madre asiente y continúa con las tareas del hogar.

El cuarto de Stefy siempre me pareció muy lindo, obviamente todo me trae recuerdos de mi época pasada.

—Mmm... Ya imagino lo que debes acordarte mirando tanto esa ventana—acota cuando entra sujetando las dos tazas de café.

—Sí, épicas son las escapadas que hacíamos para ir a bailar—contesto. Nos sonrojamos.

—Bueno, hablemos amiga—su sonrisa se transforma en seriedad y atención para escucharme.

—Te juro no sé por dónde empezar—tomo una bocanada de aire.

—Solo libéralo, del orden que te salga, es la mejor terapia. Pero habla.

—Me enamoré y pensé que esta vez sería sincero y de verdad, no que iba a salir lastimada, otra vez. Otra vez lastimada, Stefy—miro al costado y exhalo—otra vez—una lágrima recorre mi mejilla y ya la sensibilidad explotó en mi organismo.

—Pero Bambi... ¿Qué pasó?

—Todo empezó bien. Mira me costó dejar esta vida y vos lo sabes, sin embargo decidí volver a empezar, con esfuerzo volví a empezar. Recuperé mi autoestima y mi amor propio, la primera noche en mi casa de allá fue increíble, no sabes lo bien que estaba, cómo bailaba y me contemplaba al espejo. Renací de verdad. Conocí a Axel el próximo día que empecé en el nuevo colegio.

—Sí, me contaste de ese chico por arriba.

—Bueno, él. Lo conocí en el vestuario—miro hacia abajo y sonrío con todas las ganas y lo que daría por volver a ese momento—al principio chocamos como perro y gato, ni te cuento, pero después me di cuenta de que me encantó él, me encantó. Y aunque lo consideré un crush, un platónico inalcanzable, la vida me sorprendió cuando noté cierta importancia de él hacia mí ¿Sabes? Poco a poco nos fuimos conociendo mejor, había una complementación increíble, o por lo menos así lo sentía yo, poco a poco olvidé lo que era estar dolida, aunque llevo conmigo un pasado, jamás perdí la esperanza de volver a enamorarme. La vida me llevó a volver a enamorarme y fue de él, lo sentí el correcto, no me preguntes por qué pero lo que siento por Axel es único y nunca lo sentí por nadie, y bueno, ni hablar que al ser correspondida todo absolutamente todo se coloreó de rosa. Así y todo él también carga con su pasado, al parecer, nunca me percaté de eso... él tiene una ex.

—Pero... ¿Qué tiene de malo eso?

—Que él no la olvidó, o peor, que ella no es buena persona. Mich y Alex me hablaron sobre ella, se llama Barbie, y al parecer volvió al colegio para atrapar otra vez a Axel, que claro él esta pegadísimo con ella. Y obviamente ahora duda de lo nuestro y parece que se olvidó de lo lindo que fue. No sé, está cambiado, está como ciego por amor.

—Así que su ex ¿No es buena persona?

—No, Stefy. Yo creo en la palabra de Mich, ella es sincera conmigo y no es casual que a bastantes del colegio les caiga mal ¿O no? Se dice que Barbie es muy tóxica, no sé que logra con ello, cada uno hace lo que quiere de su vida, en fin no puedo hacer nada. No puedo hacer que Axel se dé cuenta de la relación entre Barbie y él. No sé qué hacer y hasta tengo miedo que ella se la agarre conmigo, desconfianza. No sé.

—No puedo creerlo, parece todo una película.

—Ojala fuera solo una película.

—Ay, Bambi...

—Le di todo y pretendía darle mucho más, y ahora es como estar estancada en el medio de un camino ¿Entiendes? No puedo forzar nada, ni pienso. Mi orgullo es más fuerte. Pero más allá de eso, me duele muchísimo. Vos no sabes la cantidad de momentos que tuvimos juntos, le entregué todo, por amor, porque estoy enamorada—exhalo—ya no sé qué pensar.

—No hay nada que pensar, él se tiene que dar cuenta Bambi.

—Lo sé, solo espero que no sea demasiado tarde. Porque lo amo y quiero que reconstruya su vida conmigo, porque sé que lo siente, porque Barbie solo quiere lastimarlo. Sin embargo ya depende de él.