Cap.23 ~Examen~

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– ¡Jung HoSeok súbete esos pantalones!– Ordené mientras que me cubría la cara con mis manos, sentía como mi cara explotaba de la vergüenza, similar a un volcán.

¡Momentito! Primero tienen que saber que paso antes para que estén en contexto, no vayan a mal pensar hijas de la iglesia...

Señora escritora ¿Me hace el favor?

|9:30 am|

Estaba en la cocina tomando un café acompañado de un delicioso pastel de chocolate, el día de hoy no tenía clases así que aprovecharía para descansar. Ahora que lo pienso con detenimiento, como que tengo muchos días sin escuela ¿No?

Mire por la ventana, no había nada interesante que hacer, los chicos aún siguen dormidos y probablemente seguirán en un largo rato. Por cierto, ¿Hace cuánto el vecino quito sus árboles? Según yo estaba de vacaciones en la Isla Jeju, seguramente ya regreso.

– ¡Buenos días ___!– Apareció detrás de mí, para luego enredar sus brazos por mi cintura al igual que su cola

–No me lo puedo creer, el gran Min YoonGi despertándose temprano ¿Qué sigue, que Taehyung ya no odie las ardillas? – Carcajee divertida, normalmente es el primero en dormirse y el último en levantarse. Si, un dormilón hecho y derecho.

–Aish, yo que venía de buen humor– Dejo caer su cabeza en mi hombro

–Era broma, gatito– Murmure lo último

– ¿Qué dijiste?– Me quede callada ante su pregunta –Repítelo, di o último– Su voz se tornó más ronca de lo normal, mostraba mucha seriedad.

Los escalofríos recorrieron todo mi cuerpo, a la vez que mi piernas comenzaron a temblar ¿Soy la única que se le hizo el corazón de pollo?

–G-gatito– Titubee, ¿Cómo es que hizo eso? De alguna manera me sentía desprotegida e insegura, de alguna forma más sumisa.

–Gatito... Me gusta– Sus labios se posaron en mi mejilla depositando un dulce beso, ¿Qué carajos acaba de pasar? Necesito una explicación.

– ¡Dame uno!

A lo lejos una pelea se llevaba a cabo, la primera pelea del día –y todas las que faltan– así son todas las mañanas, geniales ¿No creen?

– ¡___ dile que me dé una galleta!– Entre Jungkook y Jin forcejeaban por un paquete de galletas de chocolate

–Ya te dije que no te voy a dar, además apenas llevo cuatro– Le enseño la lengua como todo un malote

–Sí, ¡Cuatro paquetes!

El mayor alzo lo más alto que pudo aprovechándose que Jungkook era más pequeño que él, el menor hizo lo posible por alcanzarlas ¡Hasta se puso de puntitas! Pero fue en vano ya que no las pudo conseguir, encaprichado inflo sus mejillas, frunció su entrecejo y... Se puso a llorar

– ¡Jungkookie quiere galletas!– Soltaba sollozos que estoy segura que se escuchó hasta la casa de mi vecino Taeyang y eso que vive a unas tres cuadras

–Ya Kookie, no llores– El pobre se abalanzo sobre mí y me abrazo por el cuello mientras seguía llorando, poco a poco se dejaron de escuchar sus lloriqueos – ¿Tienes hambre? Puedo preparar unos huevos– Asintió para luego soltar un 'Ujum'

–Tsk, niño mimado– Se cruzó de brazos molesto

Tengo que admitirlo, lo que dijo Jin es cierto. Pero ¿Quién le diría un 'no' al pequeño? Sus esponjosas orejitas encorvadas hacia abajo, su naricita roja al igual que sus mejillas, sus ojitos hinchados por el llanto y sonrisita de bebé, simplemente adorable.

✧𝓐𝓷𝓽𝓲-𝓝𝓪𝓽𝓾𝓻𝓪𝓵✧ ||BTS √Donde viven las historias. Descúbrelo ahora