TE ENCONTRÉ

242 24 2
                                    

NARRA YURITZI

Amanecer a lado de jimin es tan gratificante , cuando despertamos el simplemente se marcho de la  habitación sin decir nada, como si fuera una vieja costumbre de nosotros dormir juntos.

Hoy tengo trabajo por hacer, bajo a la cocina para tomar un pequeño desayuno, me encuentro con jin comiendo cereal.

-Te miras diferente.

Es lo único que me dice con la boca llena de cereal, me preparo uno y me siento a su lado, comemos en silencio, el tiene el cabello todo despeinado y ojeras.

Termino mi cereal y me marcho despidiéndome con una pequeña reverencia, jin me contesta de igual manera, me pregunto que lo mantuvo despierto tan tarde.

Tomo un taxi y le pido que me lleve a big hit, el conductor se me queda mirando por el espejo.

-¿No eres un idol verdad?
Claro supongo que es normal encontrarse con super estrellas tomando taxis.

-No solo trabajo allí.

 Hace un gesto de desagrado y continuamos el viaje en silencio. Llegamos a la empresa y me deja en la parte de enfrente, bajo y le pago en efectivo, localizo un puesto de helados cruzando la calle, justo para bajarme la calor de estos momentos.

Hay un par de personas haciendo fila, no creo que se me haga tarde, cuando estoy a escasos metros de distancia siento que alguien me toma por los hombros y me coloca algo en la espalda.

-Hola hermanita.

Siento que mi corazón se detiene, mis pies se estancan en el suelo y el miedo me pide que huya, pero mi cuerpo no se mueve.

-Camina al maldito estacionamiento o te disparo.

Si dejo que ella me arrastre me pasara algo peor que un simple disparo, abro la boca para intentar pedir ayuda pero escucho como la bala entra en la recamara, me quedo callada, comienzo a caminar lentamente hacia el estacionamiento, las personas pasan a nuestro alrededor y nadie nota que tengo una puta pistola pegada en la espalda, trato de hacer gestos con mi cara e indicarles que algo extraño pasa, pero algunos se encuentran metidos en sus teléfonos que no prestan atención a lo que pasa a su alrededor.

Llegamos al estacionamiento y comienza a empujarme con la punta de la pistola hacia una pequeña bodega, la que suelen usar los guardias de seguridad, pero que nadie usa en estos días.

-No voltees.

Me ordena, yo solo asiento, ella abre la puerta de la pequeña bodega y me empuja dentro.

-Por favor.....

Trato de suplicarle.

-¿Por favor que?

La bodega consiste en un almacén de computadoras y equipos viejos, se encuentra llena de polvo, papeles tirados por todos lados y un fétido olor a basura.

Escucho como saca algo de un bolso, toma mis muñecas y las pega a mi espalda, suelto un pequeño quejido de dolor al notar la presión.

-Creíste que no haría nada al irte a meter a la casa de esos estúpidos.

-Por favor déjame ayudarte.....se que estas enferma y nuestra madre debió ayudarte.

Ella suelta una risa burlona que me hace temblar.

-¡¿Ayudarme?! ¡esa zorra no podía ni ayudarse así misma!

Me gira para quedar frente a ella, sus pupilas se encuentran dilatadas por la emoción, como si hubiera fumado un porro. Ella hace una reverencia exagerada y da una vuelta completa como si estuviera bailando.

-¿Sabes que? planeaba dejarte en paz, cuando la policía te llevo dije ¡esa maldita ya pago lo que me debe! pero no ¡tenias que irte a meter con jimin! pero .....ahh solo hiciste mas divertido el reto.- Asiente para si misma.- ahora puedo suplantarte una vez mas, han llegado a quererte y esa sera su maldita perdición.

-¡no! ¡no lo hagas! ¡no le hagas mas daño a  jimin!

Coloca sus manos en mis hombros y me obliga a sentarme.

-Lo que le pase a jimin de ahora en adelante sera tu culpa ¡tu maldita culpa! 

Las lagrimas comienzan a desliarse por mis mejillas, no debí quedarme, debí alejarme y enfrentarla yo sola, su mano se estampa en mi cara haciéndome caer de lado y golpearme en la cabeza.

-Sabes cuales son las reglas del juego, si te portas bien no te haré nada, pero si no.....

Lo ultimo que veo es a su pie dirigirse a mi cara, recibo el impacto, mi cabeza bota en el suelo como si fuera pelota y pierdo la conciencia.



NARRA JIMIN

Termino mi ensayo agitado, el sudor corre por todo mi cuerpo, me dirijo a  las duchas y en el camino visualizo a yuritzi, con unos papeles en mano.

-¡Hey!

Ella se me queda mirando de una manera extraña, se queda inmóvil y ni si quiera parpadea, me acerco a ella y sigue mirándome fijamente poniéndome un poco incomodo, cada parte de mi piel se eriza.

-Hola jimin-chim.

Me saca de onda por un momento ¿ella me había llamado así antes? me encojo de  hombros y decido dejarlo pasar.

-¿Que haces?

-Tengo que entregarle estos documentos al manager ¿y tu?

-Estaba por ir a ducharme ¿que harás cuando salgas?

Pregunto fingiendo tener curiosidad pues quiero salir a comer con ella y pasar un rato agradable como lo hicimos con mi familia.

-No lo se tal vez iré directo a casa.

-¿Quieres ir a comer conmigo?

Desvió la mirada, no se por que de repente me siento extraño.

-Claro que si, tenemos mucho de que hablar.

Ella se marcha dejándome con esta confusión ¿de que quiere hablar? tal vez esta pensando en como atrapar a su hermana o en nosotros ¿ha notado la manera en que he estado actuando con ella?  no, no creo que sea eso.



  

  



YO NO SOY ELLADonde viven las historias. Descúbrelo ahora