Juego Peligroso(Jim Moriarty)

Familia de mier**

Despertaste por el sonido del timbre, alguien golpeaba la puerta y tocaba el timbre con desesperación, lentamente te levantaste notando la presencia de Jim, ibas a despertarlo pero seguían tocando el timbre.
Caminaste a la puerta con pesadez, al abrir la puerta tu sueño se fue por completo.

- ¿pa... papá? -preguntaste con los ojos muy abiertos.

- ¡hola hija! -te abrazó sin mucho entusiasmo.

- ¿qué hacen aquí? -frunciste el ceño.

- ¡te dije! -gritó Betty la pareja de tu padre bajándose del auto con un pastel- olvidaría tu cumpleaños

- no lo olvidé -rodaste los ojos- es sólo que no pensé que vinieran a festejarlo aquí conmigo

- no lo haríamos -dijo Betty. Tu padre trató de callarla, pero ella prosiguió- lo íbamos a pasar con tu hermana, pero no estaba en casa

- ella no es mi hermana -dijiste enojada- y es lindo saber que me aprecias Betty -hablaste sarcásticamente.

- ¿podremos entrar? -preguntó tu padre queriendo pasar.

- ¡no! No pueden -sostuviste la puerta.

- ¿por qué no? -preguntó Betty.

Estabas por contestar con la primera excusa que se te ocurriera, pero la voz de Jim llamandote arruinó todo.

- ¿estás con alguien? -preguntó tu padre.

Sin dejarte hablar entraron encontrándose a Moriarty en camisa blanca y boxers.

- de seguro es alguien que conociste en un bar, un revolcón de una noche -te dijo Betty.

- tú conoces muy bien sobre el tema ¿no? -dijiste mientras la mirabas seria.

- ¿quién eres? -preguntó Betty irritada cambiando de tema.

Miraste a Jim como para que hiciera o pensará algo, tú aún estabas adormilada, no se te ocurría nada.

- Jim Moriarty, hola -extendió su mano hacía tu padre- la pareja de su hija

- ¿qué? -dijeron tú y Betty.

- ¿ella con alguien como tú? -preguntó Betty- ¿eres drogadicto? Algún defecto debes tener...

- no, soy un... importante... empresario -sonrió actuando- bueno, si me disculpan subiré para estar más presentable

Jim se fue subiendo las escaleras rápidamente, lo seguiste sin hablar con tus padres, ellos fueron a la cocina.

- ¿por qué dijiste eso? -estabas molesta.

- fue lo primero que se me ocurrió -sonrió de forma pícara.

- pero ahora piensan que yo estoy contigo

- ¿cuál es la diferencia? -se acerca peligrosamente- te dije que serías mía, no importa si lo piensan antes -te tomó de la cintura y te besó.

- ¡___! ¡Tanto vas a tardar! -dijo Betty golpeando la puerta.

Te apartaste rápidamente, y tomaste algo de ropa metiendote al baño, suspiraste exaltada y pronto empezaste a cambiarte
Al salir Jim no estaba en la habitación, bajaste y lo encontraste ya vestido con su traje en la cocina hablando con tu padre y Betty.

- hija ven, siéntate con nosotros -dijo tu padre.

Te sentaste junto a Jim, frente a tu padre y Betty, tenían el pastel en la mesa y una pizza con algunas latas de cerveza.