Una Vida Contigo | Erick Brian Colón

Capítulo 7

Al día siguiente hicimos la misma rutina, Erick se fue al trabajo y mas tarde iría a verle.

Ahora mismo estaba debatiendo entre hacer hacer arroz frito o un pastel. Creo que haré arroz, ya vamos a llegar a diciembre, así podré celebrar Navidad en el trabajo, si, trabaja en Navidades, pero le darán un mes libre en enero.

Voy a la habitación a cambiarme de ropa y coger mi monedero para ir a comprar ingredientes.

Llego al supermercado y compro todo lo necesario, debo terminar antes de que sean las 16:00. Me pongo manos a la obra.

(...)

Me quedo mirando la comida un buen rato, hacer este tipo de comida tarda mas de cuatro horas, y si lo hago yo sola tardaré hasta la noche.

Voy al salón a por mi móvil. Llamo a mi amiga.

-¿Hola? -responde ella.

-Scarlett.

-¿Si?

-¿Estas ocupada?

-Si, pero casi termino, ¿pasa algo? Al final no me hablaste sobre lo de Erick.

-Oh, cierto... lo olvidé. ¿Puedes venir a ayudarme con la comida? Y así de paso te cuento lo que pasó.

-Ok, te prometo que cuando acabe esto voy para allá.

-Ok, aquí te espero. -corté.

Llamo a Valeria, Priscila, Celeste y Cinthia.

Ellas dicen que vienen, unos minutos despues viene todas menos Scarlett.

-Bien, chicas, gracias por venir. He pensado en que en Nochebuena salgamos a festejar. ¿Os parece?

-¡Si! -dicen todas.

-Vale... -tocan la puerta -¡Voy! -abro la puerta y entra Scarlett. -Que bien que estés aquí, ya podemos empezar.

Ya estábamos en la cocina.

-Vale, ¿me pueden ayudara cortar la carne, zanahoria, y pimienta?

-Claro, por algo hemos venido -me responde Priscila.

-Y también por lo que me ibas a decir -me susurró, aunque todas la escucharon.

-¿Que es eso que le vas a contar a Scarlett?

-Bueno... -dije yo.

(...)

-Y pues vino e hicimos las paces, y ya no estamos enfadados. Hoy quiero darle una sorpresa a Erick, le gusta como cocino el arroz frito.

-Ah, me encanta como resolvéis vuestros problemas. Ya estoy cansada de estar soltera. -dice Valeria.

-Bueno, es que esta de moda, pero da igual, yo te busco uno, seguro que Erick tiene amigos muy guapos.

-¡Nos llamas! -gritan todas.

Las miro asustada.

-Perdón -ríen.

Nos fuimos todas a sentar ya que solo faltaba que hierva.

(...)

Ya habíamos terminado de cocinar y le agradecí a todas.

-Muchas gracias, chicas.

-Ay, chica, no pasa nada, para eso están las amigas. -me habla Celeste.

-Bueno, tengo que ir a la empresa,¿vienen?

-Lo siento, estoy muy cansada, hoy a sido un día cansado.

-Si, nosotras también -hablaron a la vez.

-Vale, vale, bueno, tengo que irme.

-Adiós.

-No, no, no, ustedes no se van sin probar de su comida.

Les di de comer y se fueron, yo me vestí y salí para la empresa.

Al llegar subí al piso de Erick, toqué la puerta y ahí estaba Erick.

-Mi amor, ¿como estás?

-Hambriento.

-Bueno, te he traído algo.

-¿Que es, bebé?

-Toma. -le di la bolsa.

Lo abre.

-Ese olor... mi hiciste arroz frito.

-El mismo de siempre.

-Te amo -me acerco a él y me besa.

-Siéntate -dice que me siente en sus piernas. -¿Ya comiste?

-No, comeré cuando llegue...

-No, no, te comes la comida que cocinaste. Vamos a comer. -abre la boca esperando que le de.

Cojo la cuchara y le pongo arroz en la boca, yo también como.

-Lo hicimos mis amigas y yo.

-Invitalas a casa.

-Si lo haré.

Seguimos comiendo.